La Hermana de Buzz || El Teléfono Negro

Capítulo 22

Robin y yo habíamos cumplido tres meses de novios, nos hemos cuidado mucho de Buzz pues no deja de estar pendiente de mi, el rumor que invento aún no ha llegado a mi padre y espero que nunca lo haga
Estos meses han sido los mejores, he ido varias veces al autocinema con Robin, hemos hecho varias pijamadas con Finn y Gwen, realmente Robin estaba salvandome aunque no todo estaba llendo tan bien

Cada que salía me seguía sintiendo vigilada y había noches donde tenía pesadillas, me encontraba en un sótano y una niña no dejaba de repetir "Ya viene" o me decía cosas como que debía tener cuidado, siempre era el mismo sueño y solo podía recordar esa parte. Para calmar esos sueños tomaba mis pastillas aunque ahora solo tomaba una por día cuando me estaba tomando casi cuatro

Me puse un short de mezclilla junto con una playera blanca y encima una chamarra negra, salí a desayunar y ya estaba mi padre junto con Buzz. Al terminar de desayunar me lave los dientes y al regresar vi a mi padre que estaba en la puerta

-Pasa algo -pregunte viéndolo con miedo

-Entraste a mi habitación -pregunto y solo agache la mirada -Contesta -alzo su voz

-Lo siento -dije sin verlo a los ojos -Quería buscar una foto de mamá -

-Cuando vas a entender -hablo lentamente tomando mi cara -Cuando entenderás que tu madre te abandono -grito y me dio una cachetada

-Perdón -me hice para atrás

-Ojala estuvieras muerta -grito enojado y volvió a pegarme, se quito su cinturón y me pego hasta tirarme al piso -Eres una inútil, no sirves para nada -decía mientras me golpeaba en la espalda

-Ya!!- grite llorando -Lo siento -

-Largate a la puta escuela y déjame tranquilo -me dio el último golpe y paso al lado de mi

Me puse de pié y sin esperar a Buzz salí de la casa, limpiaba mis lágrimas mientras caminaba a la escuela, de verdad me deseaba muerta. Mis manos comenzaron a temblar al igual que todo mi cuerpo, llegué a la escuela y me dirigí a mi casillero sacando rápidamente dos pastillas del frasco y metiéndolas a mi boca

-Ash -dijo Robin detrás de mi, con una mano sostenía mi mochila así que puse el frasco de pastillas debajo y con la otra mano tome unas libretas

-Robin -sonreí falsamente al verlo

-Estas bien -pregunto viendo las cosas que tenía en las mano -Déjame ayudarte -trato de tomar la mochila pero me hice hacía atrás

-Estoy bien así -dije rápidamente pero el tomo la mochila

-Vamos Ash -sonrió jalandola y en ese momento las pastillas cayeron al piso, cerré mis ojos y me agache al igual que el -Que es esto -las tomo viéndome

-No es nada -dije nerviosa

-Nada -contesto serio mientras leía la etiqueta -Ashley por qué tomas ésto -levanto la voz y los chicos que estaban ahí comenzaron a vernos

-Robin esto no -trate de explicar pero no sabía cómo

-Desde hace cuanto tomas esto -interrumpió gritando -Ashley contesta-

-Desde que Billy murió -mis ojos de cristalizaron

-Cuatro meses -dijo sin verme -Tomas esto desde hace cuatro meses -avento las pastillas al piso -Ashley esto va a matarte, te volverás adicta -detras de el estaba Buzz viéndonos, supongo que parecía una pelea normal como las de antes

-Yo -trate de defenderme pero las lágrimas ya salían de mis ojos

-Nada -volvió a interrumpir -Acaso quieres morir, acaso crees que te quiero muerta -al escuchar los gritos de Robin los demás ya nos estaban rodeando, lo mire con miedo y el cambio si expresión

-Lo siento -dije tomando mi mochila -Perdón -me puse de pié y salí corriendo empujando a todos los que nos veían

Corrí hasta un parque que estaba un poco lejos de mi casa y escuela, me senté en uno de los columpios que se encontraban ahí. Comence a llorar cubriendo mi cara con mis manos
-Bien hecho Ashley -dije aún con la cara entre las manos -Eres una idiota -

-No lo creó -la voz de Robin se escuchó frente a mi

-Robin -limpie mis lágrimas y lo vi, estaba hincado frente a mi -Que haces aquí -baje la mirada de nuevo

-No podía dejarte así -se sentó en el columpio de a lado -Perdoname -tomo mi mano -No debí gritarte así -

-No pasa nada -negué viéndolo -Siento no decirte lo de las pastillas -

-Ash -acaricio mi cachete con la otra mano -Se que no tenía que actuar así y mucho menos gritarte pero me dio miedo, no quiero ni pensar que pasaría si algo te llega a pasar -

-Lo siento, cuando Billy desapareció yo no sabía que hacer y las pastillas eran lo único que me calmaba -baje la mirada de nuevo -Ahora las tomo para no tener pesadillas -

-Se que fue difícil pero quiero que sepas que siempre voy a estar contigo y no voy a dejarte caer de nuevo -se puso de pie y me jalo para abrazarme

-Gracias -lo abrace y hundí mi cara entre su cuello, pero tuve que ponerme en puntitas -Te amo -

-Yo también -me dio un beso y volvió a abrazarme