"¿creíste que después de muertos dejaríamos de amarnos? gran imbécil."
donde gracias a una paliza a un chico, Vance "conoce" a Rose.
donde un amor fue tan efímero como doloroso.
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Will entró, silencioso y de manera rápida, a su casa.
Cada día tenía el labio más roto, las mejillas más rojas y con unos moretones nuevos en los brazos.
Era obvio que lo estaban golpeando, que todas las veces que no pudieron golpearlo gracias a su hermana estaban sucediendo ahora, solo que con incluso más rabia y fascinación a su dolor.
Y, honestamente, cada día le importaba menos lo que le hagan.
Solo se mantiene de pie por la esperanza de que Rose en algún momento de alguna señal. Ya perdió la cuenta de cuantas veces imaginó que entraba por la puerta principal y él corría a abrazarla.
Sonrió, añorando algo que está lejos de suceder.
Caminó hacia su habitación, arrojó su mochila a su cama y salió al pasillo, dando algunos pasos torpes hasta pararse frente a una puerta en específico.
La puerta de la habitación de Rose.
Exhaló, tomando valor mientras empujaba la puerta e ingresaba.
Una vez estuvo dentro, el aroma de su hermana lo invadió. Quiso llorar al ver todo justo como ella lo dejó. La cama ordenada, la mochila de la escuela en la silla del escritorio, algunos bocetos de dibujo sobre su mesa de luz, la ventana cerrada pero con las cortinas abiertas, la estantería con un orden específico, todo.
Todo era un pedazo de Rose siendo simplemente ella.
Tomó la manga de la campera que estaba recostada sobre la silla del escritorio, y pudo sentir el aroma de su hermana en ella.
Seguía siendo tan dulce y único como lo recordaba.
Will miró hacia todos lados, y después suspiró, jugueteando con la pequeña caja de regalo que tenía entre sus manos. Finalmente, la colocó sobre la cama, con el mayor de los cuidados.
Era horrible saber que ni siquiera podia hacer algo para cambiar el hecho de que su hermana estaba desaparecida, más aún en el día de su cumpleaños. Will pronto iba a patear algo. Se sentía tan cansado de esperar algo que parecía nunca llegar.
Will se siente totalmente inútil e indefenso.
Todo el tiempo.
Y ahora, con su hermana cumpliendo una semana y dos días de desaparecida y a la vez trece años, le hace pensar tantas cosas.
Principalmente, si la policía la sigue buscando a ella o solamente a su cuerpo.
