Soulmates [vmin]

courteous cold

Frío cortés.

Para la satisfacción de Jimin, la mañana siguiente terminó siendo una de las más productivas de los últimos días. Y todo gracias a una buena noche de sueño y que no tuvo que pasar unos treinta minutos tratando de despertar a Taehyung como lo había hecho durante muchos años. Así que fue una buena mañana.

Tan pronto como los primeros rayos de la luz del día asoman, se levanta y se aleja de la tentadora cama, preparándose un abundante desayuno para llenarse de energía. Cuando sirve la tostada y los huevos en el plato, trata de no pensar mucho en cómo inconscientemente preparó desayuno para dos, otro hábito que será difícil de romper.

Cuando tomó su teléfono, estuvo medio tentado a enviarle un mensaje a Taehyung, para preguntarle si le gustaría que le llevará el desayuno extra, pero ya había una notificación esperándolo y diciendo que su mejor amigo ya estaba en su primera clase.

Es mejor así. Piensa mientras vuelve a bloquear su teléfono. No quiere parecer pegajoso, y probablemente caminar hasta él para llevarle huevos revueltos recién hechos sea cruzar esa línea. Su lobo se remueve en desacuerdo, insatisfecho de ya no tener a nadie más que a si mismo para cuidar.

Los primeros bocados pasan sin prestar mucha atención al sabor, y los recuerdos de la noche anterior pasan por su cabeza en un relámpago. Se pregunta si Taehyung estaba sintiendo la misma extrañeza y si lo extrañaba tanto como él. Pero todas estas son preguntas tontas con las que no quiere lidiar en este momento, y después de limpiar rápidamente las migajas de sus dedos, toma su teléfono una vez más y se desplaza a través de los mensajes de ayer, descaradamente demorándose en esa maldita foto que Taehyung había enviado.

Por supuesto que Taehyung lo extraña. Eso es obvio. ¿Pero lo anhela como él lo hace? Si la distancia hace que el corazón se vuelva más cariñoso entonces estaba jodido.

Las palabras de Hoseok se burlan de él en su mente, rodando por allí, hablando de sueños y realidades, y se pregunta si realmente desea que las cosas vuelvan a ser como eran antes. Pero su respuesta se compone tanto de sí como de no.

Volver a un mundo en el que tenía a Taehyung para si mismo a cada segundo y cada momento sin duda disminuiría el vacío que siente en la boca del estómago, por supuesto. Pero tampoco elegiría volver a ser beta. Un omega es de lo que está hecho, y ​​desde siempre lo había sentido. Entonces, ¿cómo iba a elegir entre la causa y la consecuencia?

En el momento en que detuvo su tren de pensamientos, notó que ya había terminado su desayuno y la mitad de lo que habría sido el de Taehyung, y decidio que no hay forma de que pueda seguir con su día si se queda sobre su trasero confundido, lleno de pensamientos y sentimientos.

Así que comenzo a limpiar todo, la distracción llegó a él en forma de desempacar maletas, un espacioso armario vacío y decoración para el hogar. Las compras en línea también sirvieron, pero no queria hablar sobre cómo todas las velas que ordenó tenían 'almizcle' o 'bosque' en su descripción de aroma. Y tampoco le gustaría admitir que pidió cinco diferentes con la esperanza de que al menos una se acercara a... el olor de cierta persona.

El reloj acababa de dar las nueve cuando terminó de poner su última camisa en una percha y había puesto todo en su lugar designado. Una ducha rápida y Jimin estaba al teléfono reservando una cita con el Dr. Seokjin. Para su sorpresa y nerviosismo, logró conseguir una ese mismo día a las cinco de la tarde. Definitivamente había pensado que tomaría al menos un par de días antes de que le encontraran un lugar, pero afortunadamente para él, alguien había cancelado su cita y, sinceramente, cuanto antes terminara con eso, mejor.

[Taehyung]
No quiero despertarme a las 6 nunca más.

[Jimin]
Bienvenido al mundo de los adultos, es difícil aquí.