Capitulo 6

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Eira llevaba a Regulus por los pasillos de Hogwarts enfadada, se dirigían a la casa Slytherin, Regulus dijo la contraseña y entraron, se sentaron en la sala.

Con un hechizo le curo el labio roto que le había dejado Sirius y se acurrucó a su lado.

—¿Estás bien?—Preguntó Eira dándole caricias a Regulus, que puso su cabeza en su regazo.

—Si, sigue dándome caricias—dijo Regulus con los ojos cerrados disfrutando de las caricias de su compañera.

Eira río y le siguió porpocionando caricias, sintió la respiración pausada de Regulus y se dio cuenta que se había dormido, hizo un hechizo que los llevas a el cuarto de Regulus.

Le quitó los zapatos y lo metió debajo de las sábanas, se quitó sus propios zapatos y también se metió acurrucandose con Regulus, que aún dormido la atrajo a su lado.

Le quedaban algunas clases pero este era su día libre y quería pasarlo con Regulus, aunque fuera durmiendo, todo a su lado se veía hermoso a los ojos de Eira.

Se decidió a olvidarse de lo pasado en el campo de quidditch, con Sirius, y disfrutar el momento.

                         
                               *****

Eira se despertó sintiendo unas caricias en las mejillas, abrió lenta los ojos y vio a Regulus que le regaló una tierna sonrisa.

—Hola—Susurro Eira frotándose los ojos.

—Hola, ¿Que tal has dormido?—Pregunto Regulus dejando ahora caricias en su pelo.

—Muy bien, siempre duermo bien cuando estoy contigo—respondio recostandose en el pecho de Regulus aceptando sus caricias que le estaban dando sueño otra vez.

—Duerme aún quedan unas horas para las clases, te desperté, lo siento—dijo apenado.

Eira negó con la cabeza aunque tenía los ojos cerrados.

—Como si me despierto en un huracán, mientras sea a tu lado

Regulus soltó una risa.

—No sabía que eras una cursi

—Ni yo, pero tú no te quedas muy atrás que digamos, venga ahora vamos a dormir.

Se durmieron en segundos, sintiéndose completos.

                               *****

James, Remus y Peter estuvieron toda la tarde buscando a Sirius, no lo encontraban por ningún lado y eso les estaba desesperadando.

Cuándo ya era de noche, se disponían a ir a sus cuartos para cambiarse y después seguir con su búsqueda pero lo encontraron ahí, en la cama dormido en su forma animago.

—¡Sirius! ¡¿Se puede saber que haces!? ¡Uno buscándote preocupado y tu aquí tan campante durmiendo! ¡Sabes el susto que nos pegado canuto! ¡¿Lo sabes!?— grito James sin detenerse a respirar, volviendo su cara roja.

Sirius que aún seguía en su forma animago los veía con la cola entre las patas y las orejas caídas.

—¡Y no pongas esos ojos de cachorrito! ¡Perro malo!

—Sirius, podrías transformarte ¿ Por favor?—Pregunto Remus amablemente.

Sirius volvió a su forma y se metió en la sábanas luego de ponerse su pijama.

—Me siento mal—respondio Sirius con la manta hasta el cuello.

—Te dijimos que te ibas a arrepentir de lo que estabas haciendo, no hiciste caso, pues atente a las consecuencias—Dijo Peter que está comiendo una galleta.

—¡Peter! Un poco de sensibilidad, por favor—pidió Remus.

—¿Que? Pénse que estábamos jugando al mago malo, bueno y realista—respondió sin hacer mucho caso—Y por cierto nos hemos enterado que Eira está buscando la manera de romper el vínculo de pareja contigo, normal, yo también lo haría si te tuviera como compañero

—¡Dios Peter mejor concentrate en comerte tu galleta!- le gritó Remus.

—Vale—dijo yendo a sentarse a su cama con la galleta.

—¿Que?—fue todo lo que pudo salir de la boca de Sirius, estaba en shock.

—Que Eira está buscando la manera de-

—¡Callate y come tu galleta Peter!—chillo James

Peter se encogió de hombros

—Se veía venir—dijo para después si centrar por fin su atención en la galleta.

—No te preocupes Sirius, no creo que haya un hechizo que pueda romper el vínculo de compañeros, y si lo hay tardará en encontrarlo, y en ese tiempo tú podrás arreglar lo que causaste—dijo Remus dándole un apretón en el hombro.

—¿Sirius estás bien? Te has quedado pálido, ¿Tienes hambre? No has comido en todo el día—le pregunto James preocupado.

—Esta asimilando —contesto Remus.

Sirius que hasta ese momento estaba en estado de shock se levantó de golpe asustando a los demás.

—¿¡Que!? ¡No puede! ¡Como os habéis enterado de eso! ¿¡ Como!?

—Tranquilizate, y respondiéndote fue Lucius, aparte ¿Te puedes creer que me llamo cuatro ojos el pelo caballo ese?—dijo un James indignado.

—Teneis que ayudarme a arreglar esto, t-tengo, n-no quiero que me rechaze—dijo con la voz quebradizo.

—A verlo pensado antes—dijo Peter que ya había terminado su galleta y estaba ya acostado en su cama—Ahora, podemos dormir, estoy cansado de buscarte, ya haremos un plan mañana, venga, apagar las luces.

—Merlin, que poca sensibilidad—nego Remus con la cabeza.

—Es de noche, estoy cansado y tengo sueño y no parais de gritar por cosas que no hubieran ocurrido si Sirius no hubiera sido un patan, a soñar con Merlín—fue lo último que dijo Peter antes de darse la vuelta dándoles la espalda poniéndose a dormir.

—Peter tiene razón sobre qué es tarde, estamos cansado y pensaremos mejor mañana, vamos tranquilízate, seguro todo se arreglara—aseguro James viendo directamente a Sirius, que asintió lentamente con la cabeza.

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