W - larry (traducción)

Capítulo 9

Y me fui a limpiar el patio. A esta altura del otoño siempre hay más hojas en el suelo que en la copa de los árboles y yo necesito recoger algunas de ellas que están al fondo de nuestro patio.

Pero ¿recuerdas que te dije que todo te recordaría algo que tu cerebro considere necesario? Yo estoy así con este maldito caso del asesino en serie.

Y así, por primera vez en cuatro años noté que junto a la cerca baja de nuestro patio trasero, justo al fondo, hay una tapa metálica redonda con las inscripciones de la RPC, o sea, Red Pluvial de Chicago. Esto es suficiente para bajar toda mi energía, por recordar que en este momento Liam, Thomas y todo nuestro departamento está metido en las tuberías de esa red para encontrar el camino de W.

Siento una opresión en el pecho, pensando en lo comunes que son esas tapas en la ciudad, hasta el punto de que existen incluso en el fondo de los patios de algunas casas y un escalofrío me recorre por pensar en lo susceptibles que somos a través de esa red.

Es extraño pensar que algún psicópata ha visto demasiado IT, y tuvo la idea de usar esas tuberías como su ruta de escape, y puede salir en cualquier lugar, incluso al lado de mi patio.

Mi energía bajó tanto cuando me enfrenté a esa tapa de metal que dejé de limpiar el exterior de mi casa, haciéndome volver al interior de la misma y cerrar las puertas rápidamente, ya que ahora me siento tan inseguro.

No puedo juzgarme a mí mismo por tener miedo o sentirme culpable por ser un cobarde. Todo lo que he vivido en los últimos momentos es muy traumático. Estudié psicopatía durante toda mi maestría, hice una tesis sobre un asesino en serie loco que destripaba personas y las colgaba en cadenas, trabajé en un hospital psiquiátrico judicial, fui atacado dos veces por un caníbal, vi a una persona muerta abierta en una escena del crimen e investigo a un asesino en serie. Todo eso es demasiado para cualquiera.

¿Y sabes lo que hace cualquier persona normal cuando se siente así? Come.

Todavía tengo pastel de terciopelo rojo con chocolate en mi cocina y es mi comida reconfortante.

Lleno un plato y vuelvo a la sala. Me quedo un rato sentado en el sofá, disfrutando de mi capricho favorito en el mundo, antes de mirar un armario de documentos que tengo en mi oficina. Ese lugar debe estar más desordenado que mi armario de ropa.

Termino mi pastel y dejo el plato encima de la mesa de centro frente al sofá. Me levanto y abro el armario. Primero tomo una carpeta de acordeón donde guardo muchas cuentas antiguas. Es casi natural, pago una cuenta y la meto ahí. Esta es la primera cosa que organizo, tirando la mitad de ellas, ya que no hay necesidad de guardar cosas de más de 5 años.

Luego tomo una caja con un estampado floral en el estante a la altura de mis ojos. Esta es quizás la caja con el contenido más sensible para mí, ya que es allí donde guardo mis cosas y documentos más personales.

La abro y lo primero que veo es mi certificado de aprobación de maestría. Y me alegra recordar el logro. Pienso que tal vez no debería haber nada aquí para tirar. Yo sólo debería poner todo de forma organizada para que no se arrugue.

Pero el segundo papel que recojo ya está completamente arrugado. Arrugado como si lo hubieran hecho una bolita y luego lo hubieran reabierto para guardarlo.

En la parte superior está escrito Consejo Deliberativo del Consejo Tutelar. Justo debajo están mi nombre y el de Louis completos y el nombre de Darcy, la niña que queríamos adoptar.

Siento ganas de hacer exactamente lo que hice hace un año, arrugar ese papel y tratar de tirarlo. Pero sigo leyendo aunque mis ojos se están llenando de agua, porque no importa cuántas veces lo lea, nunca cambiará su contenido.