. ·ʚĭɞ𝟭+𝟭=𝘆𝗼𝘂 𝗮𝗻𝗱 𝗺𝗲<𝟯 𓇗. | Minchan

. ·ʚĭɞ𝗰𝗮𝗺𝗲𝗹𝗶𝗮

Por fin era el día, yo me encontraba impaciente por todo, Seungmin incluso me había dicho varias veces que me tranquilizara, iba a pedirle a Minho que fuera mi novio, no le iba a pedir matrimonio, aunque aquella idea con el tiempo, no sonaba tan mala.

Había conseguido una reservación en "Lost" el restaurante que tenía una temática del espacio exterior, se encontraba en una terraza y tenían las luces siempre en un color tenue y las lámparas que colgaban de ahí eran referentes a las estrellas. En el día, pensaba hacerlo todo normal, como si fuese una cita cualquiera.

Entré a la florería, no esperaba encontrarme a Minho solo, aunque ya lo sospechaba un poco, es decir, hoy Hyunjin llevaría a Jeongin a una cita, otro par de enamorados.

—Hola, cariño. — dije para hacer que notara mi presencia, él levantó la vista de las flores y se acercó para darme un fugaz beso en los labios.

—Hola, perdona, no te había visto, estaba algo ocupado.

—Tranquilo, te entiendo, Jeongin no está, es normal.

—Sí, estoy algo cansado ya.

—¿Quieres que te de mimos?

No dijo nada más, pero sabía que su respuesta era un sí, nos dirigimos a la parte de atrás de la mesa de recepción y lo acomodé como si fuese un bebé sobre mi regazo. Comencé a dejar caricias en su cabello y a decirle cosas bonitas, él se merecía eso y mucho más. Parecía quedarse dormido.

—¿Has dormido bien?

—No. —dijo entre balbuceos.

—Honey, ya te he dicho que debes dormir bien.

—Lo sé, pero todo el asunto con Minju y Taeyong me tiene estresado. — murmuró antes de acurrucarse más en mi pecho.

—¿Qué asunto? Si se puede saber.

—Quieren que me vaya con ellos a Seúl, por eso han venido hasta aquí.

¿Qué? O no me había dicho eso antes o yo no lo recordaba. Me moví inquieto tratando de buscar una mejor posición para ambos.

—¿Te irás? — pregunté un tanto inseguro de su respuesta.

—No tenía pensado hacerlo en un principio.

Suspiré aliviado, Minho alzó su cabeza cruzándose con mi mirada, me tomó por la mandíbula y me besó, fue un beso sin dobles intenciones, solo buscando cariño.

—Tenemos una reservación esta noche. —dije entre el beso.

—¿En serio? Dime en dónde.

—En "Lost".

Sus ojitos parecieron brillar aún más, volvió a acercar nuestros labios, y Dios, sentía que me iría al paraíso con tan solo ese beso, volvimos a nuestra realidad cuando mi teléfono sonó, se apartó solo un poco para contestar.

—Si, diga.

Minho movía sus ojos de un lado a otro, como esperando a que la otra persona terminase de hablar.

—Oh, claro que si Lixie, solo que, necesito pedirte un favor.

Más segundos de silencio.

—Verás, hoy saldré con Chris y esperaba que me pudieras cubrir, ya sabes, Jeongin también salió.

Yo le daba pequeñas caricias en su cabello y nariz mientras él seguía al teléfono.

—¿En serio? ¡Gracias! Te debo una.

Minho colgó y volvió a acurrucarse en mi pecho.

—Felix dijo que podría irme temprano hoy, al parecer, hoy visitaría a los padres de Bin.

Era perfecto, ya sabía eso, ellos mismos le dieron ideas, ya que estarían ocupados en su viaje, pero me habían dado buenos datos.

Minho cerró después de una hora, dijo que aún tendría que ir a cambiarse y ponerse, según él, más bonito, aunque bueno, para mí siempre lo era. Entramos hasta su habitación, era la primera vez que estaba ahí.

Yo solo lo veía buscar entre su ropa y maquillaje lo que a él más le gustaba, aunque algunas veces, me preguntaba mi opinión.

—Si te soy sincero— mencioné observando las dos blusas que me enseñaba— la azul me gusta más.

—De acuerdo. — volvió a cambiarse de ropa y terminó. Después se puso algo de maquillaje en los ojos.

Si de por sí me gustaba, con eso solo logró gustarme más. Salimos no sin antes despedirnos de los padres de Jeongin, aquellos señores eran tan amables.

Al llegar al auto, le extendí un ramo de camelias blancas con algo de vergüenza, él las recibió gustoso, lanzándose a mi para abrazarme.

—Como puedes ser tan romántico.

—No lo sé, me sale natural.

El soltó una de esas risitas sinceras, arrancó una de las flores y se la puso en su lindo cabello, a manera de decoración, la flor destacaba entre su pelo, por lo que se veía bien, en contraste con el atuendo que ambos habíamos elegido.

Conduje por unos minutos, al llegar, la señorita de recepción nos señaló nuestra mesa, el atardecer comenzaba a verse, y las luces colgantes comenzaban a bajar su intensidad. Nos sentamos e inmediatamente un mesero nos ofreció el menú. Ambos pedimos y esperamos nuestra orden. Sonreí mientras seguíamos hablando, la tarde/noche fue de maravilla, un grupo de jazz estuvo tocando durante todo el tiempo, y eso solo hacía el ambiente más relajado.

—Así que...— comenzó a hablar, algo nervioso— ¿Alguna ocasión en especial?

—Oh, ¿Acaso no puedo traerá mi novio a lugares bonitos?

—Repite lo que acabas de decir.

—¿Minho?

—¿Qué sucede?

—Yo... no sé por donde empezar, pero bueno— él me miraba con curiosidad— yo te traje aquí por que ya no lo soportaba más.

Minho me miraba atento, con esa mirada atenta a todo lo que hacía.

—Minho, desde que te conocí vi algo especial en ti, aunque bueno, en ese tiempo yo estaba con Seungmin.

Asintió aún atento a mis palabras.

—Pero conforme te conocí, supe que éramos más compatibles de lo que pensaba, y lo sé, es muy poco tiempo, pero no creo necesitar más.

—Chris...

—Min, ¿Me concederías el gran placer de ser tu novio?

Su sonrisa pareció iluminar todo el establecimiento, se estiró un poco para tomar mis manos y asentir con la cabeza.

—Claro que quiero idiota.

Esa noche brindamos con algo de alcohol, no recuerdo nada más, solo recuerdo que esa noche, conocí todo de él, y nos entregamos mutuamente, en un acto de amor, que solo sirvió para confirmar lo que ya sabía.

Amo a Minho, y ya no hay dudas de por medio.

*Las camelias blancas simbolizan el amor puro, el deseo, la belleza, fidelidad y la perfección.