Pasaron dos meses y fueron una agonía eterna. Parece que desde que mi cuerpo supo que estaba embarazada, se activaron esos síntomas horribles. Sentía ganas de vomitar desde que abría los ojos, en el momento menos esperado me mareaba y lloraba por cualquier tontería y así mismo me enojaba.
No se como Jughead me aguantaba. Estuvo ahí todo este tiempo. Vivía más en mi casa que en la suya. Me cuidaba como nadie lo había hecho antes y tenía mucha paciencia conmigo aunque yo me enojara por nada.
Me sentía tan mal que tuvimos que posponer la visita a casa de los futuros abuelos de nuestro bebé, pero también porque él aún no reunía suficiente valor para decirle a su familia. No se por que, si son muy agradables y seguro amarán a nuestro hijo.
Mientras tanto sigo aguantando esta tortura diaria, pero yo me lo busqué y eso no quita que Jughead y yo amemos a nuestro bebé con todo lo que tenemos.
<<<<<<<<<<<<<<<••••>>>>>>>>>>>>>
—No lo se. ¿Y si mejor esperamos a que nazca para que sepan?— Me sugirió Jughead desde afuera de mi habitación.
—Es una pésima idea Jug— Contesté, mirándome al espejo y respirando profundo para controlar las terribles náuseas que tengo justo en este momento.
—Tienes razón. Oye... ¿Que haces? Voy a entrar. Tienes una hora ahí adentro y ya estoy empezando a asustarme— Me dijo el, tocando suavemente la puerta de mi habitación.
—Te dije que no entres. Salgo en un momento— Le avisé. No me moveré de aquí.
—Eso dijiste hace como dos horas. Voy a entrar—Aseguró, empezando a abrir la puerta.
—Te dije que no... olvídalo— Dejé de hablar porque sé que él no me hará caso.
Él se acercó a mi y puso ambas manos sobre mis hombros mientras yo me cubría los ojos con mis manos. Me sentía fatal.
—Betts... si no te sientes bien, lo podemos dejar para otro día. Después de los primeros meses esos síntomas disminuyen— Me sugirió, besando mi cabeza.
—No— Me negué, poniéndome de pie con cuidado por los mareos. Me giré a mirarlo y tome su rostro entre mis manos, mirándolo fijamente. —Vamos a ir con tu familia y le diremos que vamos a tener un bebé. Y eso será hoy—
Él me sonrió y besó mi frente. —Esa es mi chica—
Sentí una electricidad en mi cuerpo cuando él me llamó "mi chica" como lo hizo en una ocasión cuando éramos dos chicos.
—¿Y Milo? Ya nos vamos— Dijo Jughead, buscando a mi perro con la mirada por la habitación. Debía estar por ahí. Después de mi embarazo vive asechándome.
Finalmente Jughead lo encontró y subimos todos al auto para irnos camino a la casa de sus padres. Mi estómago estaba revuelto. No se si era por los nervios o las náuseas del embarazo, y aún más en este auto en movimiento.
En el camino yo iba con los ojos cerrados para evitar marearme más de lo que estaba. Que pesadilla...
—¿Te sientes bien?— Me preguntó Jughead. Ya notó que no me siento muy bien...
Yo asentí y le sonreí sin abrir los ojos. —Solo que no quiero marearme—
—Pero si no te sientes muy bien lo podemos dejar para otro día— Me dijo, sin dejar de conducir.
—No Jughead. Ya les dijiste que vas a ir y lo vamos a hacer. Les diremos hoy— Exigí.
Jughead no dijo nada más y continuó conduciendo con música suave en la radio hasta que llegamos a casa de sus padres.
YOU ARE READING
•Crush• 'Bughead'
FanfictionBetty Cooper se siente terriblemente atraída hacia Jughead Jones, pero el chico apenas le habla. ¿Esto podría cambiar?
