꧁𝚃𝙷𝙴 𝙽𝚄𝙼𝙱𝙴𝚁 𝙵𝙾𝚄𝚁꧂ 𒊹︎︎︎-𝐒𝐩𝐢𝐝𝐞𝐫-𝐮𝐧𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞-𒊹︎︎︎

014-. . .

—Peter, Suéltame —exigí frente al que antes llamaba Suggar, puesto que no me soltaba ni dejaba salir del cuarto dónde me habían metido.

—No —dijo, mirándome.

—Peter —llamé ahora a Peter tres— déjame salir.

—Felicity, tienes que calmarte.

—¿Por qué quieren que me calme?, debería ir y degollarla por haberse metido en mi mente, ¡en mis putos recuerdos! —grité con la voz demasiado alzada— ella no puede decirle nada a Peter.

Eso hizo que me vieran interesados.

—¿Nada de qué?.

Pasé la mirada por ambos exhausta, tanto mentalmente como físicamente, era como estar en una guerra interna, en dónde una parte luchaba contra algo que no conocía.

Pero ahora, también peleaba yo misma contra la idea de preocuparme lo que Peter pensara sobre mí, la idea de que Wanda dijera algo que no debía hacía estremecer mi corazón.

Como si pudiera importarme lo que Peter pensara sobre mí.

No podía, ¿no?.

No sentía absolutamente nada por este Peter Parker, no podía hacerlo, no cuando tengo a alguien esperándome.

Siempre supe como era separar el sexo de los sentimientos amorosos, y sabía que eso pronto te confundía y terminabas sintiendo cosas por la persona, pero ahora era diferente, no había desarrollado sentimientos por alguien con quien tuve intimidad sexual.
Había desarrollado sentimientos con Peter, con el que no había tenido algo sexual, pero con el que la tracción estaba allí, y ahora me daba cuenta de que con Peter no lo había hecho porque él solo calmaba mi ser y me distraía con verlo, oírlo, me gustaban sus ojos en mí, sus manos acariciando levemente mis cabellos.

Me negaba a este nuevo sentimiento.

Yo quería estar con otra persona.

Quería estar con mi Strange.

Suspiré, pasando las manos por mi rostro exhausto.

—Voy a devolverlos a sus universos —avisé luego de unos minutos en silencio— yo los retuve aquí, así que yo voy a devolverlos.

—No queremos irnos —intervino Peter tres.

—Queremos estar contigo —siguió Peter dos dando pasos suaves hacia mí.

—Pero yo no —confesé, intentando no sonar fría, ni mucho menos dura— ustedes tienen que volver a su vida, a sus universos y hacer como si esto nunca hubiera pasado.

Ambos se sentaron en la cama en la que yo anteriormente me había sentado, a mis costados se quedaron en silencio.

—¿Por qué no quieres volver a tu universo? —preguntó Peter dos, casi susurrante.

—Asesiné a alguien —respondí intentando que mis palabras no se oyeran reales para mí— y no quiero enfrentarme con mi padre, pero ahora quiero volver. Tampoco quiero que Peter lo sepa, no soportaría que me viera con la misma mirada que usan todos para verme.

—No podría verte así —aseguró Peter dos— ni mucho menos nosotros.

—Fuiste una parte muy linda de nuestra poca vida aquí, Felicity —habló Peter tres, con una sonrisa dulce en su rostro— te agradezco por dejarme compartir contigo.

—¿Hablan del sexo? —cuestioné riendo.

—No, aunque fue fabuloso —respondió entre risas Peter dos— pero nos dio gusto conocer a la verdadera Felicity y de alguna manera los tres ser parte de uno mismo.

—Los quiero — acepté, besando sus mejillas— iré a visitarlos, eso ténganlo por seguro.

—Voy a esperarte.

—Lo mismo digo. Pero, ¿cómo harás que volvemos?.

—Él los devolverá —dije, en tono suave, sabiendo que estaba cerca.

Peter tres se acercó a mí, besando mi cabeza con delicadeza— Te quiero, chocolatito.

Peter dos, como si supiera que era su momento, nuestro momento de despedirnos, dejó un suave beso en la comisura de mis labios, antes de verme a los ojos y besar mi cabeza.

—¿Estarás bien? ¿Estás segura de esto?.

—Te quiero, daddy.

Sonrió contento cuando la habitación fue sumida en un silencio gélido, el mundo pareció detenerse, mientras frente a nosotros, comenzaba a verse una grieta, que rompía la barrera.

Mi Strange había llegado y yo iba a irme, pero Peter rebotaba en mi mente, una parte de mí quería irse, y la otra quería correr a los brazos de Peter y esconderme allí del mundo.

El hechicero se hizo presente, con sus ojos azules brillando al verme, se acercó con una sonrisa de labios cerrada para abrazarme con deleite.

—Mi hermosa Felicity —acarició mi mejilla, al ver mi sonrisa brillante, escaneó mi rostro unos segundos antes de fruncir el ceño— ¿quién perturbó tu mente de esa manera?.

—Antes quiero que los devuelvas a sus universos —dije, señalando a ambos Peters— deben irse a casa, como tú y yo.

Deseaba irme, era hora, ir a casa, ver a papá, ver a Shane, ver a Harry, a mamá y estar con mi Strange.

Pero que era lo que tenía Peter Parker que lograba hacerme dudar.
Que era la duda en mi mente ahora que deseaba descubrir la verdad de mi vida y la que sabía que si me iba de aquí no descubriría nada.

¿Qué debo hacer?

¿Qué harían en mi lugar?.

¿Que harías tú, lector?.