──̸ ▸ 𝇄 ᮥMisión Suicida ꓻ │Eddie Munson

﹙🕯️﹚ナ∕︰𝗖𝗵𝗮𝗽𝘁𝗲𝗿 𝘁𝘄𝗼 ヽ ❜

𓆙 ⸝ ' 𝐃𝐄𝐁𝐎𝐑𝐀𝐇 ⌜⌁
› 𝕯𝖆𝖞 𝕺𝖓𝖊 ‹
𝗁𝖺𝗐𝗄𝗂𝗇𝗌
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8:00 am, yo no quería estar despierta pero mi despertador sonó justo a tiempo, me levante con mucha pereza de la cama y me metí a bañar, pase la gran parte de la noche terminando de acomodar TODAS las cosas que había traído, pero hoy tenía que darle un repaso a los informes. Me cambié, realice mi desayuno y saqué un maletin de debajo de la cama que contenía todo lo necesario.

En la mesa deje caer un par de expedientes clasificados en 3 niveles: clasificados, eventos y individuos. Comencé por la más interesante, individuos. Habían expedientes de muchas personas aquí pero una destacado entre las demás, Maxine Mayfield. Era la misma chica pelirroja que había conocido ayer, había estado involucrada en los eventos del Centro comercial y su hermano había muerto en el lugar, si que debía de ser un evento traumatico para una chica de su edad.

Otroa nombres se hicieron presentes, Jane Hopper, Mike y Nancy Wheeler, Dustin Henderson, Lucas Sinclair, Steve Harrington y muchas otras personas más, eran demasiado y me dedique a leerlos uno a uno Miem tras que desayunaba, decidí acompañar con un poco de música, al haber traído mi teléfono inteligente de otra época coloque mi playlist desde el inicio. Sinceramente esperaba que no funcionarán pero era todo lo contrario, quizás el Internet no era de lo mejor pero si funcionaban sin problemas.

Me perdí tanto en los expedientes, cada vez había más datos que agregar a cada individuo y la mayoría de estos no pasaba de los veinte años, esto posiblemente podría ser algo de jóvenes pero con muertes de por medio no lo era, también tenían a una chica con Telequinesis, su pasado era el peor de todos pero al parecer trata de convivir día a día con todo eso. Un par de golpes se hicieron presentes en mi puerta y Max no se presentaba hasta en un par de horas.

- ¿Quien es?

No hubo respuesta alguna por parte de la persona o cosa que había tocado la puerta, me levante y abrí la puerta de repente, dejando ver a aquel pelinegro de ayer en la noche, lo mire confundida esperando a que dijera algo pero el no sabía que decir.

- Quería venir a saludar, ayer te vi llegar y no tuve la oportunidad de venir a saludar.
- ¿Esta bien?
- Perdona, Eddie Munson. ¿Y tu eres?
- Devon Blackwood.
- Blackwood, suena misterioso.
- Es un apellido problemático, no querrás verlo en acción.
- Si que me gustaría ver eso.
- Muy bien, gracias Eddie por pasar a saludar pero tengo un par de cosas que hacer.
- Esta bien, lamento haber interrumpido.
- No te preocupes por eso, fue un gusto conocerte Eddie.
- Espero volver a verte, Devon.
- Seguramente me volverás a ver, vivimos en el mismo lugar.
- Oh, cierto.
- Hasta luego.

Espere hasta que este se alejara lentamente mientras que no apartaba la mirada de encima de mi, no podía negar que el chico era lindo pero no estaba en posición de ir en busca de un romance adolescente. Volví a mi mesa de trabajo y continúe revisando expediente tras expediente.

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Las horas pasaron y cuando menos me había dado cuenta Max ya se encontraba esperándome fuera. Organice todas mis cosas y rápidamente tomé una chaqueta de mezclilla bordada en las mangas y en la parte trasera, todo alusivo al rock y al empoderamiento de las mujeres. Salí de casa con mis llaves en la mano y salude a Max para comenzar una conversación.

- ¿Que tal tu día, Max?
- Creo que bien, ¿Que tal el tuyo?
- Bien hasta el momento. ¿A donde iremos primero?
- Iremos a casa de un amigo, necesito un par de cosas.
- Muy bien, yo voy a donde tu vayas.

Reí levemente mientras que salía del parque de remolques junto a Max, hastdta el momento podía decir que era una chica bastante agradable.

- ¿De dónde eres, Devon?
- Soy de muy, muy lejanos.
- ¿Que? Rio la pelirroja ante mi comentario.
- Provengo de Noruega, aunque llevo años viviendo en América.
- Eso sí que está lejos, ¿Que te trajo hasta aquí?
- El trabajo de mi madre, aunque casi nunca esta en casa Parece que eso había convencido por completo a la pelirroja.
- Entiendo.
- ¿Cuántos años tienes, Max?
- Tengo 15 años, ¿Y tu?
- Tengo 17, no hay mucha diferencia.
- Cierto, puede que así compartamos un par de cosas. ¿Vas a la secundaria?
- Ah, si. Estoy por comenzar mi último año aquí.
- Te veré mucho más seguido entonces.
- Eso espero.

Maxine y yo congeniamos a la perfección y la conversación fluía mejor de lo que esperaba, cuando menos lo esperábamos ya estábamos en la casa de uno de sus amigos, ella lo presentó pero ya lo había visto en mis archivos como Dustin Henderson, pero el no estaba solo, todo un grupo de personas en el sótano jugando D&D, entre esas se encontraba Eddie. Lo salude con un simple gesto de manos y este respondió con una sonrisa y abría sus brazos como dando una bienvenida, no pude evitar soltar una leve risa para luego seguir a Max. Había conocido a una parte de las personas de los expedientes, ahora tenía que buscar una forma de acercarme a ellos.

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- Estoy ansiosa por entrar a clases.
- Creo que eres la única que se emociona por eso.
- ¿Que? ¿Tu no?. Poder ver a tus amigos, compartir clases, vivir día a día una locura nueva, ¿Nada de eso te motiva?
- No, bueno si, pero no estoy cómoda.
- Te entiendo, quizás no es el mejor momento de tu vida pero es mi último año y quiero hacer todo lo que nunca hice.
- Lo haces parecer tan sencillo.
- No lo haces, sacrificas mucho pero al final vale la pena. Nunca sabes si volverás a ver a aquellos con los que pasaste todo tu tiempo.

Hace mucho tiempo había pasado a tener una conversación profunda, ya conocía un poco más de Max y eso me parecía excelente, yo por el contrario, en vez de mentirle, comencé a decirle muchas cosas que me gustaban sin revelar mi identidad.

Ambas caminábamos riendo hacia nuestros remolques, había sido un buen día pero ahors tenía que colocarme manos a la obra para trabajar en un nuevo expediente y en mi bitácora.

- Gracias por todo, Max.
- No tienes por qué, nos vemos mañana.
- Hasta mañana, pelirroja.

Comente en voz alta mientras está se alejaba, saqué mis llaves con la intención de abrir la puerta pero un estruendo me puso alerta, mire a mi alrededor y no había nadie, así que le di la vuelta al remolque y mire debajo de él, llevándome una sorpresa.

- ¿¡Que carajos haces hay!?
- Perdón, perdón. Puedo explicarlo.
- Más te vale que lo hagas rápido o terminaras sin cabeza, Munson.
- Estaba escondiendome de un par de locos.
- ¿Y como puedo asegurarlo?
- Puedes preguntarles a los vecinos, todos lo vieron.
- Muy bien, te creo. Era complicado enojarme con Eddie teniendo en cuenta como me miraba.
- Gracias, creo que es mejor que me vaya.
- Mañana hay clases, creo que si.

Eddie se despidió de mi algo avergonzado y se veía muy lindo de esa forma, era una tontería pensar de esa forma pero no podía evitarlo. Entre a mi remolque y tenía mucho que pensar.



➣̸̤ ('°'🕸️) 𖤩⃨ 𝐆̤𝐎̶͟𝐎̶𝐃 𝐁̣𝐘᳔͟𝐄 ›⠀★☆
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