Miré mi mano unida a la suya y lo volví a mirar a él. —Porque no. Ya se me olvidó—
—Pues yo te enseño otra vez, Betty. Por favor...— Me suplicó, poniéndose de pie y extendiéndome su mano.
—Jughead... ya te dije que se me olvidó— Me negué, avergonzada. Dios... frente a todas estas personas.
—No te arrepentirás. Te lo prometo. Todo estará bien— Aseguró, mirándome fijamente.
Solo miré fijamente sus ojos y no se como, pero de alguna manera supe que él no mentía. Tome aire y tome su mano para acompañarlo a la pista de baile.
Nuestras manos se entrelazaron y juntos fuimos a la pista de baile del balcón del restaurante en donde bailaban las demás parejas.
Él puso una mano sobre mi cintura y la otra sobre mi hombro con esa delicadeza que solo él conoce. Yo coloqué ambas manos sobre sus hombros y así empezamos a bailar suavemente al ritmo de la dulce melodía.
—¿Ves? Lo estás haciendo muy bien Betty— Me felicitó, sonriéndome.
Yo también le sonreí, pero solo me fije en sus ojos. Nuestras miradas estaban conectadas de una manera tan especial que juro que sentí una magia extraña.
No se por que o como, pero me deje llevar y recosté mi cabeza sobre el pecho de Jug mientras bailábamos y pude sentir los latidos de su corazón. Sus latidos eran tan relajantes que cerré los ojos mientras aun bailaba con el.
Otra cosa es que Jughead colocó ambas manos sobre mi cintura, apretándome. No me incomodó para nada. Yo estaba disfrutando esto, y mucho.
Bailando con mi crush.
El momento se arruinó cuando la música terminó y los dos nos separamos nuevamente. Maldita sea... ¿Por que ahora?
—No te creo cuando me dices que se te olvidó bailar. Sabia que no debía creerte— Admitió, soltando una risa. —Lo haces demasiado bien, Betty—
Sonreí y bajé la mirada, sonrojada. Luego Jughead pagó la cuenta para irnos del restaurante y subimos al auto, riendo.
—¿Por qué nos estamos riendo?— Me preguntó Jughead, aún entre risas. —Olvídalo. Te llevare a tu casa como me pediste— Dijo, encendiendo su auto.
Yo también pare de reír y entonces Jughead empezó a conducir hacia la casa mientras yo miraba por la ventana del auto, pensando en la maravillosa noche que tuve bailando pegada a mi crush.
Jughead detuvo el auto frente a mi casa y ambos bajamos porque él quería acompañarme directamente a la puerta de mi casa.
Estos últimos años lo hicieron aún más caballero.
—Muchas gracias Jug. No tienes idea de lo mucho que me divertí hoy— Admití, mirándolo con una sonrisa.
—No fue nada. Debí salir contigo mucho antes, Betts— Admitió el, mirándome a los ojos con esa mirada tentadora.
—Entonces... voy a buscar a Milo a la casa de Kevin mañana temprano. ¿Nos vemos pronto?— Le pregunté.
—Claro que si— Aseguró el, guiñándome el ojo.
Di la vuelta para entrar a mi casa porque yo sabía que hasta que él no me viera entrar no se iba a ir, pero yo no podía irme sin antes hacer algo que quería hacer hace tiempo atrás, pero no tenía el valor ni la libertad de ahora.
Hazlo Betty. Tienes la oportunidad y es mejor quedarse con el arrepentimiento que con las ganas. Aquí voy...
Me giré hacia él y atrapé sus labios. Así es... lo besé y no fue un beso de niños.
Ups! Gambar ini tidak mengikuti Pedoman Konten kami. Untuk melanjutkan publikasi, hapuslah gambar ini atau unggah gambar lain.
😳 Y ustedes tipo: ¿Que pasó aquí? 🤯
Ahí está lo que tanto querían🤗 solo hay que descubrir cómo reaccionará el👀