― Si bien, yo ― Cielo carraspeó ― Me voy, nos vemos. 

― ¡Para Cielo! ― Dije y ambas chicas me miraron.

― Cielo... ― Murmuró Nicki y la miré, hizo una mueca y creo que sintió que sobraba ahí, no quería que se sintiera así pero antes que pudiera decir algo dejó un beso en mi mejilla ― Te espero en la plaza, hablen tranquilos.

Ni Cielo ni yo sabíamos donde meternos, era muy incómodo.

― ¿Pensas que deberíamos hablar? ― Preguntó y parpadeé varias veces, todavía no me lo creía.

― Eh si..., tengo un millón de preguntas que  ― Suspiré ― ¿Por qué te fuiste así? ― Pregunté casi en un susurro sentándome de vuelta en el banco, invitandola a hacer lo mismo, con algo de desconfianza lo hizo, jugó con sus dedos.

― Te lo dije mil veces, no hubiese tenido el valor de irme y vos no me hubieras dejado tampoco, era lo mejor para los dos.

― ¿Dónde estuviste en cuatro años?

Respiró hondo ― Más cerca de lo que pensas ― Se pasó las manos por el pelo ahora más largo y castaño, todo en ella era diferente, su pelo, su manera de vestir, de hablar. Parecía ser una mejor versión de sí misma, una en la que yo no entro ― no está muy lejos la institución Psiquiátrica a la que fuí de acá, media hora.

― ¿Te dejaban salir?

Se encogió de hombros ― Cuando hacía las cosas mal no ― Sabia a que se refería.

― ¿Cuantas veces?

― Cuatro ― Dijo fríamente ― Mi papá se fue otra vez ― Susurró ― Me fue a buscar a Córdoba para que me vaya a vivir con él, a lo que le dije que no y bueno, se tuvo que ir con su mujer y sus hijastros, no lo soportaba ― Contó brevemente y tuve la necesidad de abrazarla, rió sin gracia ― Ahora yo quiero preguntar.

― Te escucho.

― ¿Te diste cuenta lo cerca que estuve durante años? ― No entendía lo que me estaba preguntando ― Leí muchas cartas, las que le dabas a tu mamá.

Tiré mi cabeza para atrás ― Jodeme que te las dió.

― Todas, y las tengo ― Confesó ― Aunque no se si debería tenerlas.

― La escribí para vos, ¿Qué tiene de malo que las tengas? Y no, nunca me di cuenta.

― siento que soy un fantasma para vos Mateo, y no quiero eso ― Dijo y agaché la cabeza ― No quiero hacerte mal, y sé que ahora estas bien pero no quiero que después de esto estés noches pensando en esta conversación. No quiero que afecte tu relación con esa chica que se vé que es divina.

― Nicki no es...

― No me mientas.

― Es que tengo miedo ― Dije ― Tengo miedo de no volver a sentir lo que sentí con vos nunca más y lastimar a más personas.

― Por eso, ¿Qué sentido tiene seguir con eso si lastimamos a cada vez más personas? ― sus ojos se cristalizaron ―No tendría que haber venido ― Dijo y quiso pararse pero la frené agarrandola de su mano izquierda y note algo, un anillo en su dedo, giré su mano para verlo mejor y definitivamente era lo que yo pensaba, ― Es un regalo, nada más.

― Vos tampoco me mientas ― Dije y me aclaré la garganta nervioso ― ¿A que viniste Cielo?

― tuve la oportunidad de venir y quería hablar con vos, aclarar algunas cosas de ambas lares para que no haya rencor entre nosotros ― Se volvió a sentar ― Yo también me siento culpable por esto ― Dijo levantando su mano y lo confirmé, ella no estaba sola ― porque siento que hubo algo que no cerramos, por más cartas que nos mandemos y más cosas que te haya hecho llegar que no te diste cuenta.

lover of mine ; Trueno [Terminada✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora