Capítulo 10

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Vanesa López

--¿con cuanta frecuencia esta así? —pregunta Alfredo viendo a Mariel

--ha estado así desde que Emanuel desapareció, esta como pensativa y a la vez se ve vengativa—conteste mirándola golpear a un chico bueno que claro está en entrenamiento de box

--los estoy escuchando—nos miro antes de darle una fuerte patada a un tipo

--Ok Mariel hasta aquí, entrenar como loca no duplicara tu fuerza—dije en tono pacifico

--y quedarte parada diciéndome lo que tengo que hacer no ayudara a rescatar a Emanuel—contesto ella

--Mariel tiene que parar haz dejado a varios chicos y chicas sin nariz o más bien sin huesos—me apoyo Alfredo

--Cállense no puedo pensar con ustedes diciéndome eso—continuo ella sacando al tipo del ring de un solo golpe

--porque no mejor vamos por unos batidos—dije yo

--no gracias vallan ustedes—fue su única respuesta antes de volver al ring

Con Mariel así sentía que el tiempo era solo nuestro único enemigo si no también esa niña, sabía que no pararía de golpear a hombres inocentes hasta que se cansar o hasta que los nudillos le sangraran.

--¿de verdad piensas que pueden rescatar a Emanuel con Mariel en una crisis emocional?—odio admitirlo, pero Alfredo tenía razón como se suponía que lo hiciéramos si Mariel cada vez usaba menos la cabeza y más la fuerza bruta

--No se, si algo he aprendido es que Mariel es impredecible—conteste segura de ello y mis palabras tienen razón

--Si tu lo dices—ese tono me sonó a que tenía algo en mente y se me confirmo cuando el inicio a botar el balón de básquet boll

--¿Qué tienes en mente? —pregunte

--es muy sencillo Mariel no puede salir de esa crisis emocional ahora mismo y tu y yo estamos completamente sanos así que pensaba en que este puede ser nuestro momento—su sonrisa me da mala espina

--¿Qué tramas Alfredo? – dije deteniendo el balón mientras lo miraba a los ojos

--Vamos Vane no estas harta de ser la ultima de ustedes tres, la que más pasa en las sombras, este es tu momento si rescatas a Emanuel todo el mundo por primera vez notara que existes y nadie jamás volverá a decirte débil—en parte tiene razón pero no puedo traicionarlos ellos dos son las amistades más sinceras que tengo

--No, bueno no se—pienso nuevamente en lo que me dijo --¿dijiste todo el mundo? —volví a preguntar

--si, incluso Jesús—"rayos, perdóname Mariel, perdóname Emanuel" fue lo único que pude pensar

--Esta bien lo hare, bueno lo haremos—dije finalmente

--una sabia decisión Vanesa—extendió su mano--¿trato? —me vuelvo a quedar pensando

Si le doy la mano a Alfredo estaré traicionando a "las divinas estudiosas" así es ese fue el nombre que adoptamos como tercia, pero también seria mi oportunidad para que al fin después de casi cinco años Jesús notara mi presencia o mejor dicho notara que existo y lo peor es que se que esto me traerá grandes remordimientos de conciencia a un corto, muy corto plazo, pero aun así le di la mano a Alfredo

--trato—dije atropellando las silabas de esa palabra

--que así sea entonces—su mirada ya no me dio mucha confianza

"¿Qué hiciste Vanesa?, te das cuenta de que acabas de vender a tus amigos solo por llamar la atención de un chico" conciencia ahora no estoy para tus regaños y mejor oriéntame en como seguir con esto

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Alfredo Pérez

Jamás me sentí tan feliz de lograr algo en mi vida como el día de hoy, después de dejar a Vane en su casa me dirigi a la guarida donde estaba el resto del equipo

--dime que tu lograste algo—Eva me mira de forma seria

--claro que si, hoy vi con mis propios ojos el lugar donde Mariel entrena y logre que Vanesa accediera al trato así que no te preocupes que yo le sacare cada palabra que pueda y toda la información posible—dije seguro de mi mismo

--por lo menos hay alguien útil aquí entre tanto inútiles—ella volteo a ver a Tristán, Shadai, Jesús y Emanuel –lo creímos inútiles y es más listo que ustedes cuatro juntos—ver la cara de Emanuel preocupado me dio tristeza, pero como dice el dicho con dinero baila el perro y yo me deje vender por dinero

--gracias por tu reconocimiento Eva—dije agradecido

--si el inútil de Josué y el estúpido de Jesús dos llegan con las manos vacías les pasara lo mismo—me miro –y tu ten encargaras de que eso les pase—me dio un arma

--claro todo estará bien en tu ausencia—dije mientras ella se alejaba

--¡creí que éramos amigas! —grito Shadai quitándose el pañuelo de la boca

--¡Ay! Que ternura—Eva volvió su mirada a ella –en este punto de esta situación se olvidan las amistades y estas solo, ustedes simplemente me fueron de gran utilidad—dijo con descaro

--déjanos ir y prometo que ninguno de los dos diremos nada—señalo Tristán

--No, esperare a que alguien venga por ustedes y mientras disfruten de su hospitalidad—ella se fue y yo fui por un refresco, cuando volví me percaté de que estaban hablando entre ellos

--por lo menos tienes la certeza de que por ti vendrán tarde o temprano Emanuel—le dijo Jesús viendo a Emanuel

--la verdad es que eso ni siquiera me preocupa—contesto el sorprendentemente

--¿Cómo?—pregunto Shadai intrigada –me estas diciendo que te da igual que te tengan atado a una silla y que te golpeen cada que se le pegue la gana—continua

--Lo único que me preocupa son mis niñas que ellas estén bien es lo único que pida—hago acto de presencia

--que tierno—dije

Mi lastima era no muy notable así que mande a que los golpearan de nuevo 

Nota!!!

Como cada noche aqui un nuevo capítulo espero lo disfruten y me digan que opinan de estos niños 

POV: Alfredo en galeria 

El desastre que somosWhere stories live. Discover now