Sé mi chama, soy tu chamo ➤ haruto, treasure

# ' prefacio 〽

—El coro irá así —Haruto comenzó a explicarme mientras todos los de la Maknae line lo veíamos atentamente —"be my, be my, be my girl. Oh, be your boy! Be my, be my, be my. I just wanna be your boy!"

—Está como que muy sifrino ¿no? —Jeongwoo soltó una risa y Junghwan asintió mientras Haruto se cruzaba de brazos por mi comentario —hagamos algo más de barrio pa' barrio.

—¿barrio pa' barrio? ¿Como así? —me sorprende lo rápido y lo mucho que mi frase llamó la atención de la hyung line como para que Yoshi dejara el télefono para preguntarme eso.

Ése power que yo me cargo para llamar su atención, ni los tequeños recién hechos pues.

—Si, ya saben —sonreí saliendo un poquito de mi capullo -aka mi sudadera- para hablarles a la cara y no metía en la capucha de la misma —un poco de fanservice para mi gente venezolana.

—¿Cómo sería? —no sé, pero el tono altanero y la sonrisita del japonés éste me dice que me está retando.

¿Vos querés peo, Naruto Shippuden?

—Algo así, ve —me levanté y me coloqué frente a él con el doble de altanería y el doble de flow —"sé mi, sé mi, sé mi chamo. Oh, ser tu chama. Sé mi, sé mi chamo. Solo quiero ser tu chama."

Clarito y raspao' directo.

Y todo se quedó en absoluto y total silencio.

Uf, la calma antes de la tormenta.

¿Ustedes de más chiquitos vieron alguna vez El Mundo de Riley? ¿Escucharon la risa que siempre soltaba Farkle?

Bueno, más o menos así se rió Yedam, solo que tres veces más su volumen.

La risa de foca que soltó Yedam hizo que todos lo siguieran y se cagaran de la risa. Si seguían así iban a morirse por falta de oxígeno y después van a culpar a uno por la muerte de esa gente.

Uy no, cálmense. Que oso.

JAÁ.

—Epa, no era jugando ¿no me ven que ando de compositora? Ya no respetan —me crucé de brazos viendo como se seguían riendo de mi súper improvisación, y sonreí porque mi intención era exactamente hacerlos reír como retrasados —¡ya, pues!

Volteé de nuevo a ver a Haruto porque con él era con quien estaba hablando y lo ignoré por los otros gafos. Incliné hacia un lado mi cabeza al notar que estaba como...¿rojo? Con la piel tan mojigata que se carga se notaba un montón, además de que se le había quedado una tremenda cara de gafo. 

—Epa, ¿Estás bien, Haru? Te pusiste rojo de repente —levanté una de mis manos para llevarla a la frente del japonés, pero antes de que pudiese lograrlo...

Yoshi salvaje apareció y le dió un coñazo en la nuca al menor con una botella de agua, así a lo random, sacando del trance al pelinegro.

—Debes tomar agua, Haruto, seguro estás deshidratado —y le sonrió mientras el menor lo veía como diciendo "¿te pica el culo?" y sobándose el lugar dónde había recibido el coñazo del pote de agua.

—Claro... —murmuró con un puchero el chamito.

Todo bien, pero ¿qué pasó? No entendí.