Kim Taehyung, desde su punto de vista, cuenta como se enamoró de Jeon Jungkook; su mejor amigo y a la vez la persona que siempre estuvo para apoyarlo y darle la luz que necesitaba... ¿Estaba bien amar cada parte de él?
Obra Original por: Moon_Minth...
¿Quién era yo para juzgar la bella actitud de Jungkook?
El era perfecto; su cara, sus manos, sus labios, sus abdominales bien marcados, sus luceros negros que transmitían una completa paz, su única personalidad siendo carismático y teniendo valores respetable, en fin, innumerables cosas en el eran perfectas.
Pero...¿Qué podía hacer para que se enamore de alguien tan simple como yo?
Sin embargo, aquí la verdadera pregunta era para mi mismo:
¿Qué mismo quería ser? ¿Qué quería en mi vida? ¿Qué odiaba? ¿Qué adoraba? ¿Qué anhelaba en mi futuro?
La respuesta era simple a la vista, ni siquiera me conocía lo suficiente como para darme razones validas de que en algún momento le pudiera llegar a gustar a Jeon Jungkook, aquella persona que provocaba miles de deforestaciones en mi bosque lleno de arbustos; era imposible detenerlo, una vez que empezabas, nunca llegabas a saber su final.
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Aquella tarde todos mis pensamientos fueron esparcidos por esa tonta; simpática, deslumbrante, impecable y tierna sonrisa de conejo.
Maldito seas Jeon Jungkook por hacer que mi corazón quiera salirse de mi pecho.
Y si, me encontraba sentado en una grada de la cancha principal, viendo como se divertían los del equipo de voleibol; unos parloteaban con chicas, otros hacían un ruedo y se pasaban la pelota haciendo grandiosas salvadas y Jungkook, bueno el...Él se veía estupendo, aparte de tener una gran estatura, tenía músculos bien fornidos y un cabello que se veía realmente sedoso. En fin, a lo que realmente iba era que yo, Kim Taehyung, nunca acostumbraba a estar en este tipo de lugares, ya saben, era alguien realmente "aburrido" debido a que siempre merodeaba con YoonGi a mi lado, chismoseando o haciendo alguna que otra travesura en el teatro, pero aquí me tenían, observando detenidamente a ciertos jugadores y teniendo a un YoonGi malhumorado por mi gran enamoramiento, y no lo negaría, si que era uno realmente torpe y fuerte.
El día transcurrió de lo más normal, al finalizar el partido todos volvieron a sus debidas clases continuando con el horario ajustado de cada estudiante y los quejidos rodeando la cafetería, un día realmente agradable...un día de muchos que pronto finalizarían.
