04

24 6 0
                                    

Contra su voluntad fueron obligados a salir de la caravana a las malas, les cubrieron los ojos y amarraron sus manos, eran bruscamente empujados con el objetivo de que caminarán, ambos estaban cegados del miedo, habían golpes de metal a su alrededor y gritos de órdenes por todos lados.

Que era ésto, una construcción?

Fueron llevados hasta un lugar en que sólo se oía a lo lejano cualquier voz, fueron lanzados dentro y después una puerta fue cerrada, el lugar era muy oscuro, se notaba por que mientras caminaban el sol pegaba en las bolsas de sus cabezas y hacían que el camino se pudiera distinguir, en cambio aquí no, era un ambiente frío y con una gran humedad, de seguro enfermarán por ésto

—jimin...

—si?

—se que no ves nada pero necesito que uses tus manos y quites la bolsa de mi cabeza —indagó con uno de sus pies hasta que logró saber dónde estaba jimin—

—b-bien...

Uso sus manos pará guiarse usando la pierna que indicaba donde estaba jungkook, logró dar con su cabeza y rápidamente quitó la bolsa de un jalón dejando que él pelinegro finalmente pudiera divisar el lugar donde estaban, su rostro se desfiguró inmediatamente

—lo que faltaba... —quitó la bolsa que opacaba la vista de jimin permitiéndole finalmente ver— por lo menos esta limpio...

—jungkook, pero eso es porque no hay nada más que una maldita mesa, dos sillas y una ventana —humedeció  sus secos labios antes de quejarse—

—peor es nada...

Jungkook Fácilmente desató la cuerda que amarraba sus muñecas y ayudo a jimin con la misma acción, lo ayudo a levantarse y lo llevo a una de las sillas, las heridas que el rubio poseía comenzaban a manchar la tela que las cubría de manera preocupante, el pelinegro removió de manera cuidadosa una de las telas de su brazo izquierdo dejando que una pequeña cantidad de sangre resbalará en su piel, a jimin le dolía profundamente el tacto de jungkook pero debía dejar que él lo sanará

—vas a estar bien... —su tono de voz se volvió levemente tembloroso—

Uso lo que quedaba de la sábana para hacer nuevos vendajes para cubrir algunas de sus heridas restantes y dejar vendajes para un cambio, se tomó su tiempo para hacer todo menos doloroso e incómodo para jimin teniendo sumó cuidado con cada vez que lo tocaba.

—no estoy echó de azúcar kooki...
—murmuro dejando caer su cabeza en el hombro de su concentrado compañero— se que tienes miedo de tocar mi piel pero es necesario, yo no puedo hacerlo solo...

—lo sé... —no pudo evitar soltar un sonoro suspiro tratando de buscar la manera de hacerse el fuerte— mierda eso lo sé, pero me aterra tocarte y saber que te puedes... no sé, Talvez desangrar!

Jimin debió tomar las manos de jungkook estaba temblando muy fuerte, su mejor amigo estaba realmente aterrado por creer que le podría hacer un grave daño con solo tocarlo, se tenía que deshacer de esa imágen mental.

—si te he dicho que necesito ayuda para poder curarme porqué es claro que no puedo hacerlo, no me ayudarás por miedo a tocarme? —su voz había expresado su enojó dejando a Jungkook algo sorprendido—

—Y-yo no quise-

Debió guardar silencio cuando la mirada amenazante que jimin le daba se lo estaba comiendo vivo, estaba realmente molesto.

Había tenido muchas oportunidades de ver a jimin molestó, y siendo sinceros, era mejor comerse un pan rancio de hace tres años y enfrentar una enfermedad estomacal a tener que enfrentar la ira de jimin, podía ser realmente directo y honesto y estando sacado de sus casillas era mucho peor, cuando le tocó estar en los zapatos de un rico la mitad de su vida no se dejaba intimidar por nada ni nadie, era el quien daba miedo con sus músculos, cabello negro, mirada fría y calculadoramente amenazante, pero desde que cambió a una vida mucho más diferente, tenía miedo de que jimin lo matará con sólo mirarlo, así es... Un niño de 18 años de 1,73 un increíble cabello rubio, manos pequeñas y adorables y ojitos color miel era quién mandaba al pelinegro de 25 años 1,79 de cabello y ojos negros quién fácilmente levantaba 100 kilos sin tanto esfuerzo, pero ni siendo el mayor dejaba de tenerle un miedo irreparable a los ojos amenazantes de jimin...

𝖂𝖎𝖓𝖙𝖊𝖗𝖈𝖎𝖗𝖈𝖚𝖘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora