Hubo una Vez...

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Hay leyendas que perduran por años, que fueron contadas a nuestros bisabuelos, luego a nuestros abuelos, estos a nuestros padres, y finalmente a nosotros; pero hay una desventaja, y al ser tan viejas, ya no hay modo de comprobar si fueron reales.

Está, fue la historia que su madre contó a JaeBeom cuando era un pequeño:

"Hubo una vez una mujer que servía en el castillo, la cual se había enamorado profundamente del heredero de la familia Real en el año 1085.
Ella estaba muy enamorada del príncipe Yi Bangseok, no había día y noche que no velara por sus cuidados y todo lo que él necesitara.

Sin embargo, el príncipe nunca volteó sus ojos a ella, no podía verla como mujer por más que ella se esforzara, y la desesperación de no ser amada por el príncipe, la llevaron a buscar un método.

Una noche, bastante noche, cuando todo el Reino y el pueblo dormían, ella subió al monte de Hanyang, para conjurar a la Luna, que la bendijera con el amor del príncipe, suplicó hasta el amanecer, ella realmente deseaba entregar su amor al príncipe, y ser correspondida.
Entonces la Luna, al ver su desesperación, su llanto y perseverancia, se compadeció de ella y atendió su llamado, hablando desde el cielo.

La Luna cumpliría su deseo, sus sentimientos serían correspondidos, el príncipe la tomaría por esposa:

-Sin embargo -Dijo la Luna - Yo también tengo una petición; aquí estoy muy sola, y quiero a alguien que pase la eternidad conmigo.

Por eso te digo a ti mujer, que tus sentimientos por el joven heredero Joseon serán correspondidos, pero a cambió, vas a entregarme al primero de tus hijos que engendres de él.

Pudo ser una decisión difícil, si sus sentimientos por el príncipe no fueran tan fuertes; así que sin pensarselo dos veces, aceptó, y así, un mes después estaba casándose con el príncipe.

Para los 5 meses de casada, finalmente se dio la noticia de la espera del primogénito o primogénita, la Luna se encargaba de recordarle a la mujer su trato, incluso cuidaba de ella cada noche, y cuando esta dio a Luz, el príncipe sufrió la peor decepción de todas.

El bebé había nacido varón, sin embargo no tenía rasgos del padre, el príncipe tenía un tono de piel canela, y el niño era blanco como la nieve, ambos padres tenían ojos oscuros, sin embargo el niño tenía ojos grises.
El príncipe se lleno de irá.

¡Ese niño no es mío! - Exclamó

La Mujer no se había percatado en que momento la Luna había echo su herencia dentro de ella, y por más que trató de explicar a su esposo lo sucedido, este no le creyó, y en un gran silencio nocturno, tomó un cuchillo, hiriendo de muerte a su esposa, pues no iba a ser capaz de pasar por la vergüenza ante un Reino entero, por la traición de su mujer, en cambio diría que en la noche del nacimiento de su heredero, unos rebeldes de la corona, se habian escabullido a mitad de la noche, para asesinar a su esposa e hijo.

Sin embargo, el príncipe apesar de estar lleno de irá, no fue capaz de matar al niño; así que simplemente lo tomó para ponerlo dentro de una canasta, y subió a lo más alto del monte Hanyang, para abandonar al niño ahí y esperar que cualquier cosa ahi pudiera devorarlo, yéndose así, para seguir su reinado.

Quizás la Luna había movido el corazón del príncipe para no matar al niño, porque cuando este fue abandonado, ella ya lo estaba esperando, y así, no volvió a estar sola..."


[Año 1400]

-¿Y donde está el niño ahora mamá? -Pregunto un JaeBeom de 7 años, recostado en su cama

-Bueno, la Luna lo está cuidando, es su hijo, siempre lo fue y lo será siempre, así que debe cuidarlo, como yo lo hago contigo. - Su madre dio un toque tierno en la nariz pequeña de su hijo.

-¿Pero como puede cuidarlo? , la Luna está en el cielo y no puede bajar, no tiene brazos, ni ojos, ni boca, porque es una pelota gigante.

-Bueno, la leyenda dice también, que cuando el Niño llora, la Luna le hace una cuna para arruyarlo y así pueda dormir, es por eso que la Luna tiene esa forma aveces. - Su madre señalo la ventana, porque justo esa noche, había media Luna🌙

-¿Entonces el niño está llorando ahora? - Su madre asintió - Entonces debemos buscarlo, no quiero que llore, seguramente se siente solo, el monte está cerca.

Su madre soltó una risita tierna.
-Claro que no Beommie, la Luna lo cuida, y él a ella, ya no están solos, y recuerda que nadie puede subir hasta lo alto de la montaña, es muy peligroso.
Además, ella ya está arruyandolo para que el niño duerma, así como también tú debes dormir ahora. - La mujer se encargó de arropar a JaeBeom, besó su frente, y antes de soplar las velas volvió a escuchar a su hijo.

-Y como se llama el niño?

-La verdad, es un misterio, nadie lo sabe Beommie, no se sabe que nombre le dio la Luna.

-Algún día subiré hasta arriba del monte, y buscare al niño para preguntarle su nombre, también jugaré con él para que no se sienta solo.

Su madre sonrió por la inocencia de su pequeño hijo. - Lo harás Beommie, eres un niño bueno.
Ahora descansa...

Hijo de la LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora