Arrasando con la Magia.

Capítulo 59 - Caras -

El día en que la plaga del maná corrupto comenzó, Ryp le juró a Lyte que él siempre la protegería y que daría su vida por ello, Lyte le sonrió y le dijo que ella no soportaría perderlo, y que si alguien se sacrificaría por el otro, sería ella. Rypserk le hizo prometer que si él caía en batalla, que ella corriera y no mirara atrás, Lyte aceptó, solamente pidiéndole que él hiciera lo mismo. Quién diría que el trágico día llegaría en que es promesa se hiciera realidad, Lyte había sido asesinada justo en frente de los ojos de Rypserk, y desde entonces, sus últimas palabras le retumban en la cabeza. Él nunca le dijo a nadie qué fue lo que Lyte le susurró al oído, ¨Salgan de aquí...Migue...no llores, por favor, ahora mismo no puedes ponerte a hacer payasadas para hacerme sonreír...recuerda siempre levantarte...temprano... ojalá encuentres a alguien que te cante en las noches de insomnio... adiós¨

El torrente de recuerdos barrió la mente de Rypserk como un huracán, él había superado las muertes de sus amigos, pero el dolor de la pérdida de Lyte nunca lo pudo sacar de su pecho, aunque se hiciera el duro frente a los demás. Entonces, por efecto de la iluminación, los dorados cabellos de Claery parecieron plateados por un momento, Rypserk se dejó llevar por sus emociones, en contra de lo que se había jurado a sí mismo, su mente le jugó una mala broma. Se voltea violentamente y abraza a Claery con fuerza.

- ¡¡Lyte!! - gritó, teniendo los ojos cerrados - ¡¡Te extrañé mucho...no me vuelvas a dejar más nunca!!

Claery se vio conmovida por las lágrimas del tipo, y le correspondió el abrazo, ambos terminaron abrazados en el piso, Rypserk tenía la cabeza en el pecho de la mujer.

- Lyte.... ¿Acaso te crecieron las...? - en ese momento abrió los ojos y vió a quién abrazaba

Con un movimiento rápido, este se echó para atrás rápidamente, secándose las lágrimas y mirando fijamente a Claery.

- ¡Es un truco muy bajo jugar con la mente de un oponente! - gritó el tipo aún con la voz quebrada

- ¡No, no! Escúchame, me han conmovido tus sentimientos, Rypserk, sé que tal vez sea extraño, y que al parecer yo difiero mucho de tu novia muerta, pero si es posible... - la mujer abre los brazos, como si fuera a abrazar a Rypserk - ¿Podría llenar yo ese vacío?

- Ni de chiste - responde contundentemente el señor de las almas - Lyte es irremplazable, y menos por una vaca como tú, ¡En guardia!

- ¡Espera! - intenta convencerlo

Pero Rypserk había entrado en un estado en que no escuchaba a nadie. No estaba molesto, pero tampoco estaba tranquilo, era como una especie de seriedad absoluta, su estado de guardián de las almas.

Embistió a la mujer con el hombro, esta soltó un grito ahogado, agua la rodeó y formó una armadura plateada, con bordes congelados en permafrost. Rypserk invocó un espadín, formado con almas rojas, envolvió sus brazos con el mismo tipo de almas para mayor fuerza de impacto. Se abalanzó contra Claery con cortes furiosos. La mujer trataba de calmar a Rypserk, pero este simplemente la mandaba a callar o le lanzaba un corte al rostro, pero su agua la protegía.

Extrañamente, Rypserk estaba peleando con los ojos cerrados y una expresión incómoda, como si no quisiera ver a la mujer directamente. Esta miraba al señor de almas con ojos piadosos. Su corazón latía fuertemente, ella no sabía por qué, hacía mucho tiempo que no le prestaba atención a un hombre.

Claery era una mujer muy reservada, no solía hacer muchas amistades, era una chica muy silenciosa. En la academia más prestigiosa, para futuros magus, ella era la mejor criomancer (maga de agua/hielo) de su clase. Red no la reconoció, pero ella estudió con él, y en secreto estaba enamorada del pelirrojo. Siempre lo había admirado por ser el mejor piromago, ella lo miraba como un ser perfecto. Pero la tenía difícil, Red era el tipo más popular de su clase y de prácticamente toda la academia mágica, el pelirrojo, con tan solo trece años, lograba manejar las cantidades de fuego de alguien de 27. Además de que se corría el rumor de que Red poseía un arma legendaria.