—Iré a ver a los chicos jugar. Hoy no me toca pero tal vez los pueda ayudar en algo— Dijo Jughead.

Yo lo miré y sonreí. Por favor... es un chico que siempre está dispuesto a ayudar. ¿Como no enamorarse de alguien así?

—¿No quieres ir a ver el entrenamiento? Digo... si quieres— Me sugirió.

Yo lo miré y abrí los ojos como platos. ¿Ver el entrenamiento con mi crush? Definitivamente no me iré a mi casa ahora.

—Está bien— Acepté, sonriéndole.

Él me sonrió y caminamos en silencio hacia el campo de juego. No era necesario hablar. Con él hasta el silencio es algo fascinante.

Llegamos al campo de juego y nos sentamos en las gradas, uno al lado del otro. Yo veía como él observaba a los chicos jugar. Reggie, Archie y Fangs entrenando fútbol americano con otros chicos.

Pero yo no miraba específicamente el juego. Yo lo miraba a él. El viento movía con delicadeza su suave y sedoso pelo negro y el sol de la tarde se reflejaba en su rostro.

Él es una obra de arte.

—Rayos... a veces Fangs es pésimo— Admitió Jughead, sin dejar de mirar el juego y negando con la cabeza.

Yo solté una pequeña risa y aclaré mi garganta. —No te gusta hablar mucho por lo que veo—

Él me miró y sonrió. —En realidad no. No me gusta hablar mucho. Parece que a ti tampoco—

—Bueno... eso depende. Y si no te gusta hablar con nadie... ¿Por que hablas conmigo?— Le pregunté.

—Eres buena onda, Betty— Me contestó.

Yo sonreí y baje la mirada, levemente sonrojada mientras Jughead volvía a mirar el entrenamiento.

—¡Jughead! ¡Ven a enseñarles a estos muchachos como se juega!— Exigió Reggie desde el campo de juego.

—¡Ya voy!— Respondió Jughead y me miró. —Dame un momento— Me dijo, retirándose al campo de juego.

Yo asentí y vi como él les explicaba a los chicos como jugar y defenderse. Es muy listo, fuerte, rápido e inteligente.

Él tiene alma de líder, y quiero un líder como él.

Bueno... es hora de bajarle dos rayas a estos pensamientos tan locos de mi parte.

Y yo estaba tan perdida en mis pensamientos que no noté el momento en el que Jughead volvió a mi lado.

—Lo siento. A veces los chicos necesitan una pequeña instrucción— Se disculpó, sonriéndome.

Yo le sonreí. —Eres muy bueno en este deporte Jug—

—Na... ni tanto— Me respondió, encogiéndose de hombros.

—¿Que dices? Eres muy bueno, de verdad— Insistí hasta que mi celular vibró y yo lo tomé.

Era un mensaje de mi mamá. Ella ya me esperaba en casa porque las clases ya habían terminado y yo no llegaba. La entiendo, está preocupada.

Pero yo quería pasar más tiempo al lado de mi crush.

—¿Que haces Betty?— Me preguntó Jughead.

Yo lo miré y guardé mi celular en mi bolsillo. —Ya me tengo que ir— Suspiré.

—Bueno... en ese caso cuídate mucho y nos vemos mañana— Se despidió, sonriéndome como sólo él lo sabe hacer.

Yo le sonreí y me puse de pie. —Nos vemos mañana Jughead—

Me retiré del campo de juego y de la universidad y empecé a caminar a mi casa.

Mi interior saltaba y gritaba de alegría por ese contacto tan cercano con el que me gusta.

Siento que estamos cada vez más cerca... y eso es bueno.


Betty y yo estamos en las mismas😼 sólo eso voy a decir 🤭

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Betty y yo estamos en las mismas😼 sólo eso voy a decir 🤭

Samy ❤️

•Crush• 'Bughead' Where stories live. Discover now