En la montaña de mentiras |OREGAIRU

Capítulo 14: Mientras cae la nieve, el cielo canta una melodía silenciosa #3

¿Ne, Komachi?", murmuró Hachiman mientras revisaba el contenido de la mini olla arrocera. Dado que sus padres no llegarían a casa pronto, no tenía sentido que cocinaran demasiado arroz de todos modos.

Komachi, que actualmente estaba cortando el filete de cerdo que había adquirido en el minimercado por un precio con descuento, respondió. "¿Mmm?"

"¿Tienes algún plan para esta noche?"

"¿No realmente por qué?"

"Ya ves, tengo este problema". Hachiman cerró la tapa de la cocina y comenzó a hurgar en la nevera en busca de verduras sobrantes, guardando las más frescas para mañana. Encontró un par de papas, las cuales lavó antes de comenzar el proceso de pelarlas.

Hachiman le contó a Komachi sobre las travesuras que habían sucedido en la escuela, aunque omitió cuidadosamente cualquier cosa que lo involucrara a él y a su novia. Komachi escuchó atentamente las quejas de Hachiman. "¿Me estás diciendo que lograron cebarte con un chico que te gustaba?" Komachi no pudo evitar expresar su decepción con él, "¿No es eso básicamente engañar a tu novia?"

"No, eso es diferente". Hachiman negó con la cabeza con una cara horrorizada.

"No es diferente en absoluto cuando sigues proyectando a tu chica ideal en Sai-chan". Komachi dijo en voz baja.

Hachiman quería discutir, pero se quedó sin palabras antes de que pudiera decir algo. Lo que dijo Komachi era cierto. Hasta ahora, Hachiman siempre había hecho exactamente eso. Saika tenía la cara y los gestos de una niña, incluso si en realidad era un niño. Hachiman estaba tan acostumbrado a tratarlo como una 'opción segura' donde podía adularse sin cesar sobre la feminidad sin consecuencias. Eso fue porque hasta que conoció a Yuigahama y Yukinoshita y las conoció mejor, Hachiman odiaba bastante a las chicas en general, especialmente a las chicas agradables.

Pensar que le había hecho eso a una compañera de clase tan importante como Saika, alguien que también era la primera compañera de clase a la que consideraría una verdadera amiga, lo horrorizaba.

Hachiman también podría deberle una disculpa a Hina. La habitual actitud perversa de Hachiman hacia Totsuka Saika no era exactamente un secreto, pero, de nuevo, muchas personas también estaban haciendo lo que él había hecho, por lo que no estaba realmente fuera de lo normal. Aun así, eso sería injusto para Ebina Hina, la que se suponía que más le importaba.

A pesar de que se había hecho una promesa a sí mismo como alguien que no estaba dispuesto a cambiar, también le prometió a Yuigahama que no volvería a lastimarse y que sería más considerado con los sentimientos de otras personas.

Naturalmente, un hombre no podía retractarse de su propia palabra.

El cuello de Hachiman no pudo soportar el peso de sus pensamientos y se golpeó la cabeza contra la mesa. "Realmente soy lo peor".

"Ahora solo estás siendo melodramático". Komachi palmeó su cabeza afectuosamente, "Solo discúlpate con Sai-chan, y tal vez con Kano-san también".

Hachiman volvió a levantar la cabeza y sonrió derrotado, "Supongo que puedo hacer eso".

Su teléfono sonó justo cuando terminaba de hervir la sopa de miso. Era de Hina. Era bastante raro que ella lo llamara directamente así, por lo que debe tratarse de algo importante. Por lo general, solo intercambiaban correo todas las noches. Cuando Komachi le sonrió burlonamente, señaló con el pulgar para decirle que se quedara en silencio y que todo estaba bajo control. Luego decidió subir las escaleras antes de responder la llamada...

"[Buenas noches, Hachiman.]"

"Yo."

"[¿Que estas haciendo ahora mismo?]"