II

28 3 5
                                    

—Amor ¿Cuántas veces debo de decirte que así no se dobla la ropa?.— Kihyun mantenía mantenía brazos cruzados por encima de su pecho observando con una ceja alzada al chico sentado en el suelo.

—A veces es muy difícil doblarla.— Se defendió HyunWoo alzando su mirada y dirigiéndose hacia su pareja.  Su espalda se mantenía recargada en la cama mientras un bulto de ropa se mantenía a su costado derecho mientras en el izquierdo yacía una canasta con la ropa mal doblada.

     El castaño no pudo evitar soltar una pequeña risita por lo gracioso que le parecía la escena, normalmente él se encargaba de hacer los aseos del hogar y uno de esos era el lavar, planchar y doblar la ropa para que no se estropeara. Con paciencia tomo asiento enfrente de su pareja y tomo la camiseta que este tenia en manos.

—Amor, los bordes se salen y no deben de hacerlo, mira hazlo así.

     HyunWoo mantenía su mirar en aquellas delgadas y suaves manos, los finos dedos de su menor se movían con sigilo y elegancia logrando doblar con éxito la camiseta la cual fue depositada en el canasto. De nuevo ejerció la acción contraria con otra camiseta haciendo que el más alto abultara sus labios en un pequeño puchero.

—Yo quería hacerlo. Renegó sintiéndose un cachorro regañado.

—Lo se, pero sabes que también puedo hacerlo, te has empeñado en trabajar muy duro y ayudarme, por favor déjame hacer lo mismo por ti, déjame cuidarte.

     La voz dulce de Kihyun hizo que HyunWoo mantuviera un suave sonrojo en sus mejillas y su nerviosismo aumentará. Para el moreno le era difícil el no mantenerse  de aquel modo pues ha estado enamorado del castaño por muchos años y aún no se acostumbraba demasiado a la idea de vivir juntos.

     Kihyun le recordaba todos los días lo mucho que lo amaba, trataba de mimarlo y consentirlo ¿Cómo no hacerlo? El moreno había robado su corazón desde el primer día que se vieron, sintió un clic cuando sus miradas se cruzaron y desde aquel momento trataba de enamorarlo y hacerle saber que era el amor que necesitaba y deseaba.  Eran la pareja perfecta.

—Joohoney me ha enviado la invitación a su boda, me exigió que debemos estar presentes.

—¿Al fin se casara con Changkyun? Ya se habían tardado en darse cuenta que eran el uno para el otro.

— ¿No te recuerda a alguien más? — La burlesca mirada del de piel blancuzca se mantuvo en su contrario el cual empezó a reír apenado por aquellas palabras.

— ¿Cuándo me perdonarás? Ya te dije que tenia miedo.

—Ni que te fuera a vender por Internet.

     Ambos amantes estallaron a carcajadas al recordar su pasado, Kihyun había estado dos años detrás del mayor, rogándole para tener una cita y aceptara sus sentimientos, HyunWoo se negaba ya que sus pensamientos eran diferentes ¿Cómo dos hombres iban a salir en citas? Lamentablemente la familia del moreno era muy conservadora y le habían inculcado ideas erróneas acerca de las parejas del mismo sexo.

     Era una abominación que dos hombres se amasen libremente ¿Qué no pensaban en la mala imagen que daban? ¿Acaso no veían como los niños podían imitar esas acciones? Dios creo a Adán y Eva, los matrimonios se conformaban de un hombre y una mujer  no de dos hombres o dos mujeres. Fueron los pensamientos inculcados hacia el moreno de parte de su madre, pero aquellas palabras e ideas no fueron impedimento para que ambos jóvenes empezarán una relación que actualmente tenia cinco años.

     Cinco maravillosos años en donde sufrieron, lloraron, rieron y amaron como si fuese la primera y última vez.

—Eso quedo en el pasado, lavaste mucha ropa y hoy tengo flojera de doblarla mejor veamos una película.

—¿Y si mejor hacemos otra cosa?

     Una pizca de picardía sonó en la voz gruesa del mayor, ahora las mejillas de Kihyun fueron las que se tiñeron de rosa al saber que era lo que se refería el mayor. Su garganta se sentía reseca al igual que sus labios así que paso su lengua por estos para humectarla.

     Aquello no pasó desprevenido para el mayor y a gatas acortó la distancia entre ambos, su rostro quedó a escasos centímetros del de Kihyun, ambas respiraciones se mezclaron antes de a pegar aquellos gruesos labios a los más finos logrando encajar a la perfección. Las manos de HyunWoo cosían por poder tocar la suave piel de su ser amado y marcarlo como tanto adoraba. Kihyun no se hizo esperar y fue retrocediendo hasta recostarse en el suelo con su mayor encima de él logrando hacerse un espacio entre sus piernas.

     Fue así que las ropas de ambos fueron desapareciendo y ambas pieles se conectaron sintiéndose erizar, ambos jóvenes se entregaban como todas las noches, se susurraban lo mucho que se amaban y promesas que estaban por cumplir. Y así como en la primera noche, HyunWoo y Kihyun se entregaron al otro con todo el amor que solo una pareja destinada podía tener.

Una vez en octubre. 》Showki《Where stories live. Discover now