Mi Historia Justin Bieber-Primeros Pasos Hacia La Eternidad

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<<La gira My World va a pasar por ochenta y cinco ciudades de Estados Unidos y Canadá, y va a contactar con casi dos millones de fans, en menos de seis meses.>>

Camino por el garaje de los autobuses con mis abuelos, Bruce y Diane Dale, y con Kenny Hamilton, mi nunca de seguridad personal y víctima habitual de mis poderes asesinos con la Xbox 360. Mi madre, Pattie Mallette, se contonea detrás de nosotros, con sus jeans ajustados y sus tacones. Mamá es la mejor y lo ha sacrificado todo por mí.
Scooter ya lleva horas en el recinto, tirándole a la canasta con los encargados de trasladar y montar el equipo y con los bailarines de apoyo; en medio ocurren frenéticas llamadas al celular. Scooter es el cerebro de la operación y, junto con su equipo, se esfuerzan para que todos los detalles encajen a la perfección: asuntos con los medios de comunicación, como estevadas y peticiones de fotos; cosas de logística, como quien va en que autobús y, por supuesto, cuestiones de vital importancia, como asegurarse de que no coma pizza en un día de concierto (se supone que los cantantes no pueden tomar lácteos de una actuación, aunque todos sabemos que rompo las reglas. ¡La pizza es demasiado buena!). scooter está todo el día planeando, entiende si vida como una gran partida de ajedrez, y siempre lleva ocho movimientos de ventaja. El es una máquina.

Choco los puños con Kenny, que nos abraza a mi madre y a mí y nos lleva por las catacumbas del backstage, a la pista en las que los trabajadores de la gira están subiendo en la cesta de un enorme globo aerostático rematado en acero.

<<padrísimo>> Kenny y yo asentimos como muestra de aprobación.
Lo han diseñado para que se eleve sobre el público durante la canción de Up. Subirá por encima del escenario a algo mas de nueve metros, y luego va a sobrevolar las cabezas , deslizandose en medio de oleadas de energía y ruido para luego bajar, aún que no tanto como para que me puedan tocar las fans, pero se lo bastante para ver de cerca todas sus preciosa caras.
Espero que mis seguidoras se vuelvan locas cuando lo vean. En ese momento, la góndola hace un ruido como el de un Chevy al rozar contra las protecciones de la carretera. Pega un par de sacudidas y se queda parada.
Bruscamente se inclina a la izquierda. Luego se tambalea a la derecha. Y yo salto:<<¡Eh, tú! Esto no debería estar pasando.>>