- Lo odio. Lo odio con todas mis fuerzas
Aprieto mis puños y siento las lágrimas como resbalan por mis mejillas. Estoy cabreada y furiosa otra vez. Y otra vez es por su culpa. Puto Pau Torres. Siempre me da una de cal y otra de arena.
- No lo odias cariño -me dice Gema cogiendo mi mano. Ella, Rebeca, Vanessa y yo estamos en una de las habitaciones del parador donde he corrido a esconderme de Pau
- Si que lo odio -le digo no muy convencida- joder, ¿con tu madre también Rebeca? madre mía. ¿Se ha follado a alguien más de vosotras?
Miro a las tres chicas y ellas me dan una triste mirada negando con su cabeza. Me llevo las manos a la cara y me pongo a llorar. Porque es lo único que quiero, llorar.
- No, cariño no....pero deberías hablar con él -me dice Rebeca acariciando mi pelo
- No quiero hablar con él. No quiero volver a verlo en lo que me queda de vida... -le digo a Rebeca alzando mi cabeza- y tú, vete con tu marido, joder, que es tu boda y estás aquí perdiendo el tiempo con una amargada
- No seas dramas Verona -me dice Vanessa poniéndose a mi lado- a ver, todas sabemos que Pau ha sido un poco...
- Cabrón -le contesto
- Promiscuo, diría yo -contesta ella resoplando- pero, joder, no estabais juntos cuando paso todo, lo mío, lo de mi prima, lo de la zorra de la madre de Rebeca...
- Si lo sé...pero joder, que estoy harta de tener cara de tonta -le digo limpiándome las lágrimas de la cara
- No tienes cara de tonta -me dice Gema cogiendo mi mano. Joder, que suerte tengo de tener a estas tres chicas apoyándome
- Y para que lo sepas -me dice Rebeca- Pau está muy arrepentido de haberse acostado con mi madre...pero mucho...
- ¿Y porqué lo hizo entonces? -le contesto yo
- Porque era la zorra que tenía más dispuesta y más cerca suya
Me quedo mirando a Rebeca. Ella está hablando de su madre como si fuera una desconocida, pero después de todas las cosas que me ha contado sobre ella, la entiendo. Me muerdo los labios nerviosa y no lo puedo evitar. Me pongo a reir. Pero a reir. Miro a Rebeca pidiéndole perdón y al final acaba ella también riéndose, y contagiando a Vanessa y a Gema.
La puerta se abre mientras nosotras nos reimos. Luisa, mi suegra y la madre de Pau entra por ella mirándonos muy sorprendida.
- Verona cariño -me dice ella mientras yo me seco las lágrimas- ¿qué es eso que dice mi Pau que habéis roto el compromiso?
Me pongo en pie como un resorte mientras Gema, Vanessa y Rebeca se callan. Siento un tembleque por todo mi cuerpo y como el corazón empieza a latirme muy deprisa.
- ¿De qué hablas Luisa? Yo no he roto nada -le contesto sintiendo como la sangre me hierve
- Pues me lo ha dicho mi Pau -me dice cruzando sus brazos
YOU ARE READING
𝓛𝓪 𝓟𝓻𝓸𝓶𝓮𝓼𝓪
RomanceEl día que Pau y Verona se hicieron una promesa , no sabía que un día la tendrían que cumplir. Eran dos crios jugando a ser adultos. Dos críos que escondían sus sentimientos y que nunca se atrevieron a decirse que se querían. La vida les hizo separa...