El día que Pau y Verona se hicieron una promesa , no sabía que un día la tendrían que cumplir. Eran dos crios jugando a ser adultos. Dos críos que escondían sus sentimientos y que nunca se atrevieron a decirse que se querían.
La vida les hizo separa...
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- Aún sigues rallado
- Muchísimo, ¿qué pasa? te recuerdo que esto ya lo hemos vivido contigo Ferrán. Y yo te apoyé.
Ferrán se lleva las manos a la cara y la mueve de un lado a otro. Sigue corriendo en la cinta mientras yo pedaleo en la bicicleta. Un rato llevamos con el monotema y yo ya estoy cansado, porque cada vez que hablamos, yo, me desespero aún más.
- Rebeca estaba borracha cuando me lo dijo - me recuerda Ferrán haciéndome un gesto con la boca
- Y Verona hasta arriba de pastillas
- Vale si. Te ha dicho te quiero, ¿cuál es el problema?
- No me lo ha vuelto a decir otra vez
-Pues díselo tú. ¿O es que no la quieres?
Me quedo mirando a Ferrán y paro hasta el pedaleo. ¿La quiero? Eso es lo que llevo preguntándome desde hace 2 semanas. Y no ayuda que ella no esté aquí. A los dos días se fue. A Londres. A grabar el disco. Y yo viviendo un infierno sin ella. Porque la echo de menos a cada puto instante.
Viene hoy para el partido. Si le ganamos ésta noche al Alavés somos Campeones de Liga. Va a cogerse un avión sólo para estar conmigo. A mi lado. Apoyándome. Aunque se irá mañana por la noche. Pero estará a mi lado. Y es lo único que me importa. Tenerla cerca de mi. Porque la necesito, joder. Nunca he necesitado tanto a nadie como la necesito a ella.
Al siguiente fin de semana iré yo a Londres. Verona me pidió que si podía salir en el videoclip de la canción que va a ser el primer single de su nuevo disco. Es la canción que escribió en mi casa. Nuestra canción. Y aunque aún no me ha dejado escucharla, quiere que salga con ella en el vídeo. Dice que tenemos que ser nosotros quienes lo protagonicemos, porque esa canción significa tanto para ella, que no concibe que sea otra persona que no sea yo, quien salga en el video. Y yo, encantado de la vida. Esta es una de esas cosas que haces y luego recuerdas toda la vida.
- No me has contestado Pau -me dice mi amigo mientras yo vuelvo a la realidad
- Yo creo que no sé lo que es querer a alguien Ferrán. Te lo juro que no lo sé porque nunca se lo he dicho a nadie -le digo sincerándome con él- pero si querer a alguien es que te falte el aire cuando no estás con ella, que sólo verla aparecer por la puerta y ya sabes que tu día va a ser de puta madre, y que necesito tenerla al lado porque sino, es que no vivo...entonces es que la quiero
Ferrán hace un gesto con la boca y asiente con su cabeza. Me mira con una pequeña sonrisa y le da al botón de la máquina para dejar de pedalear. Se acerca a mi dándome una palmada en la espalda.
- Si hermano si, eso es querer a alguien. Y tú estás enamorado hasta las trancas. Y no de ahora idiota, de toda la vida
- ¿Y tú lo sabías? ¿tú sabías que yo la quería? -le pregunto bastante confundido. Cuando se trata de mi y de Verona, al parecer, la gente de alrededor sabe más que nosotros
