38 || Frío

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Huening abrió uno de sus ojos para acostumbrarse a la luz, se sentía triste, estaba en un buen sueño antes de que la realidad lo despertara. No iba ni intentar volver a dormir porque el sueño no iba a seguir, igual en unos días ese sueño se va a disolver entre sus memorias.

Frotó sus ojos con sus manos y bostezó, ¿Tenía sueño de nuevo? Quizás, últimamente se sentía muy cansado. Estudiar y trabajar definitivamente no era para él, pero tampoco se iba a rendir. Se levantó de la cama con la fuerza de voluntad que le quedaba, allí cayó en cuenta de que no se había quitado sus zapatillas ni para dormir.

Estiró sus brazos hacia adelante y movió su cabeza para relajar sus musculos, sacudió la cama y la ordenó rápidamente, podían decir lo que quieran de él, pero no podían decir que era impuntual o desordenado, porque sería la mentira más obvia del mundo. Palmeó sus pantalones, pudo sentir sus llaves y su celular, perfecto. Cuando abrió la puerta fue recibido por un delicioso aroma a comida siendo preparada.

Eso definitivamente le había quitado el sueño para reemplazarlo por hambre.

Bajó las escaleras, divisó a BeomGyu jugando con Soobin Jenga. Lentamente se acercó, haciendo lo menos posible de ruido para que no notaran su presencia, una vez estuvo cerca empujó muy levemente el hombro de Soobin, quién en ese momento estaba intentado quitar una de las fichas. El Jenga se tambaleó hasta caer.

Soobin rápidamente se giró para encontrar al culpable. ㅡ ¡Huening! ㅡ Se levantó del suelo empujando a un Huening divertido. BeomGyu se retorcía en el piso, riendose por su victoria.

ㅡ ¡Gané! ㅡ Estiró sus brazos en un intento de festejar.

ㅡ ¡No vale, Huening me empujó! ㅡ Su queja llegó rápido, era injusto que ganara. ㅡ Esta partida no vale, se anula por juego sucio. ㅡ Arrugó el entrecejo encarando a Huening, iba a volver a pegarle hasta que hablaron.

Sus botas sonando en el suelo también llamaron la atención de los tres. ㅡ ¿Otra vez están gritando? Siempre están discutiendo por algo. Calmense, por favor. ㅡ Pidió deteniendo los impulsos asesinos de Soobin, quien se detuvo mirando mal a Huening una última vez. ㅡ Veo que despertaste, ¿Estás mejor? ㅡ Se dirigió hacia Huening, quién asintió levemente.

ㅡ Sí, ya no tengo sueño. ㅡ Sobó su abdomen. ㅡ Aunque tengo un poco de hambre. ㅡ

ㅡ Claro, estoy cocinando... ㅡ Sonrió dejando en el aire las palabras. ㅡ ¿Me dices tu nombre completo? ㅡ Pidió amablemente, intentando no ofender al chico, no recordaba si los habían presentado.

ㅡ Kai Kamal Huening. ㅡ Dijo sin ningún tipo de molestia. ㅡ Dime como quieras, aunque normalmente no me dicen por mi nombre. ㅡ La despreocupación resaltó en su voz, no le molestaba, podía tener una infinidad de apodos cuando quisiera.

Ginu sonrió de nuevo y asintió. ㅡ Bien, Kai. En un momento terminaré de cocinar, puedes esperar con los chicos. ㅡ El mencionado asintió de nuevo con una pequeña sonrisa, quería comida y lo iban a alimentar. Perfecto.

El mayor terminó dandose la vuelta para regresar a la cocina, Huening se acercó a sus amigos y se dejó caer en el sofá en medio de ambos, Soobin mostró sus hoyuelos apretando sus labios y se acercó al rostro de Huening, quién hizo una mueca y puso su mano en la frente de Soobin.

ㅡ No me acoses, Hyung. ㅡ Lo empujó alejandolo de su rostro.

ㅡ Tus orejas están rojas. ㅡ Señaló y Huening llevó su mano hacia el lugar que señalaba Soobin. Frunció el ceño.

ㅡ ¡Hyung mentiroso! Si estuvieran rojas se sentiría caliente. ㅡ Rodó los ojos empujando nuevamente a Soobin.

Y así empezó un nuevo debate entre los dos sobre la realidad, ninguno ganó. BeomGyu sólo se reía viendolos discutir por algo tan bobo, siempre había algo que hacia que ambos empezaran a discutir por algo, sea lo más simple hasta lo más complejo. Huening terminó viendo su rostro y orejas en la cámara de su celular, pero seguía sin verlo rojo.

Coffee Choi || TaeGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora