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-¡Hay que atraparlo, si le cuenta a alguien lo que vio estamos perdidos!

-¡Aún lado!

Mythos corre hacia el extremo de la habitación y se lanza a toda velocidad hacia la ventana, Azula deja caer su capa real y hace exactamente lo mismo

-¿Que haces?

--¡Atraparlo!

Ambos dan un espectacular salto alcanzando el balcón del edificio de enfrente, ambos quedan sorprendidos con el otro, Azula porque el no solo acaba de dar un salto increíble, observa como empieza a escalar el edificio rápidamente y Mythos porque Azula acaba de dar el mismo salto que el sin ningún problema y está escalando el edificio de una forma tremendamente ágil

Arriba el joven desconocido está conmocionado por lo que acaba de descubrir, pero está confiado que tiene una ruta de escape y tiempo de sobra, aunque trataran de alcanzarlo ellos tienen que bajar 5 pisos y subir otros 6, jamás llegarían a tiempo

Está concentrado en eso cuando escucha un ruido detrás de él, al voltear observa a dos individuos que acaban de aparecer

Su corazón casi se detiene cuando se da cuenta que uno de ellos es la mismísima princesa Azula, la misma que estaba en el edificio contiguo hace apenas un par de minutos, el otro sin lugar a dudas es el asesino de cabello blanco

Su único pensamiento es huir del lugar y así lo hace corriendo a través de la azotea, usa una vieja tubería para pasar de un edificio a otro, él sabe que esos viejos tubos jamás aguantaran a uno de ellos, está a punto de detenerse para burlarse de ellos cuando se da cuenta que la pareja acaba de saltar desde un edificio al otro, su tiempo de reacción es lento, intenta volver a huir, pero es tomado del cabello y derribado al suelo

Azula se acerca a él amenazadoramente apuntando a la cara del muchacho con 2 de sus dedos

-(A) ¿Por qué razón nos estabas vigilando?

-(?) Yo... No...

-(A) sabes lo que va s salir de aquí si no me lo dices, ¿Verdad? (Acerca aún más sus dedos)

-(?) no puedo! El me matará

-(A) como quieras, mejor para mí

Azula empieza a hacer movimientos con los manos y el joven entra en pánico

-¡¡Aaahhh!! ¡Está bien, está bien! ¡Fue el señor Huang!

Mythos se acerca y lo toma por el cuello de la camisa

-(M) ¿Quién es Huang?

-(?) Hablaron con el ayer, en el mercado

-(M) mmm el burócrata

-(A) ¿Por qué te mando a seguirnos?

-(?) ¡Nooo!

Con una serie de pataletas y un movimiento más desesperado que planeado el joven hace que la pareja retroceda un poco dándole un pequeño espacio, lo suficiente para echar a correr, ambos intentan alcanzarlo pero este en su desesperación tropieza consigo mismo muy cerca de la orilla provocando que inevitablemente caiga al vacío, lo único que escuchan es su grito seguido de varios golpes sordos y un golpe seco al final, al acercarse a la orilla ambos observan que él está tendido en el suelo "boca abajo" con la cabeza viendo hacia el cielo sobre un pequeño charco de sangre,

En su caída reboto entre los balcones rompiéndose el cuello y al final de su fatídica bajada se rompió el cráneo

-lo que sea que haya visto ya no se lo contara a nadie

-vámonos los guardias no tardarán en llegar

Ambos regresan al departamento de Lu de la misma forma en que llegaron, una vez ahí Azula se quita el traje de la nación del fuego y cierra todas las cortinas

Los cazadores del fuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora