-Dicen que extorciona a viejos ricachones.
-Otros dicen que vende su cuerpo.
-Es un completo zorro astuto.
Rumores de distintos disparates eran murmurados en todo el campus de la universidad G, manchando la imagen de un joven estudiante universitari...
Una dulce y ronca sinfonía hace eco en cada rincón del oscuro cuarto. El poco rastro de luz es mínimo e insignificante. Al lado de una mesa de noche donde habita una fugaz lámpara, se ilumina el contenido a su lado.
Escasamente se puede observar dos esbeltas figuras entrelazarse amorosa y fogosamente.
—Más, más, más, dame más por favor...
Suplicando implacablemente con fervor y necesidad, se aferra fuertemente a los músculos de los hombros, ahogándose en un mar de gemidos.
—Debes descansar tu cuerpo.
Roncamente murmuró, deteniendo el movimiento de pelvis que ejercía su cadera.
—No, por favor, no te detengas ugh, te necesito.
Suplicó, soltando lo que su cuerpo y mente necesitaban en esos momentos. Necesita sentir esa calidez embriagante que solo la persona que le sostiene le puede brindar.
—Mn.
Pronunció, blandiendo sus labios por todo el blanquecino cuello, dejando castos besos hasta subir a sus labios y besarlos tratando de transmitir sus sentimientos.
No sabe los sucesos ocurridos ni el indicio del estado actual de su pareja, sólo sabe que debe demostrar su preocupación y presencia.
Estar para cuando lo necesita.
Entonces, delineando suavemente sus dedos de Jade superficialmente por la perlada piel, acarició lentamente su tesoro más preciado.
No sabe con exactitud las horas presentes en esos momentos, seguramente llevan encerrados desde hace mucho tiempo. Después de todo, la persona debajo suyo llegó hecho un mar de emociones luego de la reunión celebrativa local de las universidades. No sabe qué o quién debió haber visto para quedar demasiado impactado.
Demasiado hasta el punto de llegar a su hogar e ir en busca de su persona, llevándolo directamente a la habitación.
Desde entonces, han estado revolcandose durante horas sin descanso. Incluso ha perdido la cuenta de cuántas rondas en total llevan.
Está bien, solo espera que su pareja se estabilice primeramente antes de preguntar debidamente lo ocurrido para terminar en este estado.
No desea ver nuevamente esa expresión en su rostro sonriente; ver sufrir a su pareja es insoportablemente doloroso, puede soportar el dolor, pero no puede soportar verlo sufrir.
—Lan Zhan, abrázame fuerte.
—Mn, estoy a tu lado Wei Ying.
Amortiguo su voz en el sudoroso y húmedo cabello negro, bellamente esparcido y suave al tacto.
Sintiendo una respiración más liviana chocar en su pecho, dedujo que la bella persona en sus brazos dormía agotado. Soltando un suspiro, depositó un beso en la sudada frente antes de acomodarse plenamente en la cama, juntos.
Tarareo una suave melodía mientras sostenía a su pareja.
Esperaría hasta que su amado hablará con él.
—Mmm Lan Zhan...
Adormilado hablaba, siempre buscando el calor imprescindible de su esposo. Hoy y siempre su lugar seguro será su pareja.
El pasado es el pasado y no puede ser cambiado, por ende, traza el presente en una perspectiva donde te encuentres a tí mismo y tu zona de confort.
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