La mujer del bar

Fiesta de cumpleaños, dolor y decepción

Gi Tae y Min Ha reian como locos al bajar la gran montaña rusa del Parque Everlan en Corea...

- ¡Eso estuvo fantástico! - decía Min Ha con las mejillas sonrosadas por la adrenalina del juego y por la satisfacción de haber liberado la frustración de su cumpleaños en cada grito dado.

- Te dije que esto te serviría para relajarte.... ¿ya te sientes mejor?...

- Si... ha sido fantástico... ¿podemos subir otra vez?...

- mmm creo que hay otro juego que te gustara más.

- Genial.... ¡vamos!... - dijo entusiasmada y tomo su mano, el no se negó, por que aún a su pesar su cercanía le gustaba. Llevaba todo el dia convenciendose que esta era una buena relación de amigos... pero el palpitar de su corazón cada vez que ella se acercaba lo delataba en sus intenciones.

Se dijo a sí mismo que disfrutaría este día, solo por unas horas se olvidaría que tenía una novia a la cual dejó esperando y un amigo al cual estaba casi traicionando... solo por unas horas serian solo Min Ha y el....

Ella estaba feliz, su humor había mejorado considerablemente con el paso de las horas, era la primera vez que disfrutaba de un día fuera de la casa y del trabajo....era la primera que compartía una salida con Gi Tae, su corazón no daba más de felicidad a pesar de lo triste que había empezado su cumpleaños la verdad es que ningún regalo ni ninguna fiesta podrían ser mejor que estar con el.

Despues de subir a varias atracciones del parque, pasaron por la feria de juegos y concursos. Se acercaron donde un hombre que ofrecía premios a quien fuera capaz de disparar con una pistola de juguete a todas las figuras que se movían. Se quedaron un rato viendo como todos los participantes fallaban cuando de pronto el encargado  se acercó a invitarlo a participar.

- Pase por aquí joven ¿cree usted que pueda dispararle a alguna de las figuras?...

El no pensaba participar, pero luego de ver la mirada entusiasmada de Min Ha decidio hacerlo.

- Bien...deme el arma - dijo aparentando nerviosismo.

- Tranquilo... con que le de a tres ya puede ganar un pequeño premio.

El sonrio de medio lado.

- Lo intentare...

- No sabe a quién tento - dijo Min Ha riendo, sabiendo la buena puntería que lo caracterizaba.

Minutos después todos aplaudían a rabiar luego de que disparara a todas las figuras y lograra ganar el premio mayor que  era un enorme oso de peluche con un corazón en sus manos y una burda medalla de supuesto oro, lo recibió y se acercó a Min Ha.

- Feliz cumpleaños Min Ha.... - y le entrego el oso...

- ¿Para mi?.... - el afirmó con un movimiento de cabeza - claro tu me diste la suerte...

Ella muy emocionada por el gesto se lanzó a sus brazos... se fundieron en un abrazo, a la vista de cualquiera eran una bella pareja de enamorados.

Esta cercanía era algo que necesitaban y añoraban, pero sus cabezas le recordaban lo prohibido de este tipo de de demostraciones de afecto. Ella lo miro a los ojos, llevaba todo el día con unos enormes deseos de besarlo sus brazos y el aroma de su piel la invitaban hacerlo y le sugería que olvidara a todo el mundo y se dejara llevar, un niño paso corriendo por su lado y los empujo, eso hizo que la burbuja se rompiera, el primero en reaccionar fue el.

- Bueno... no sé tu pero yo tengo mucha hambre ¿vamos por algo de comer?.

- Esta bien.... vamos por algo de comer - dijo sonriendo - igual ya hemos subido a casi todas las atracciones, quizás ya deberíamos volver a casa. - su voz sonó desanimada, ella no quería volver a la casa aún, quería disfrutar de ese momento que era solo para los dos.