Es tiempo de empezar a volar con mis propias alas

Capítulo 3

Al entrar a la cocina, Jin Ling ve un montón de túnicas moradas revoloteando encima de ellos, más específicamente con su vista en el pequeño Jiang Cheng, el cual por la pena que le da tener tanta atención como jamás la tuvo, se esconde entre las túnicas de su Gege de amarillo.

— ¿Qué ocurre aquí? —pregunta Jin Ling a los discípulos, quienes ni siquiera se molestan en verlo puesto que solo tienen ojos para su Jiu.

— ¿Es el líder Jiang? —pregunta uno de ellos con un brillo en los ojos.

— Lo es, pero esto se debe quedar entre Yunmeng, con los recientes sucesos el mundo del cultivo esta de cabeza.

— Lo que usted considere líder Jin, por cierto... —el discípulo, removiéndose nervioso en su sitio, pregunta— ¿podemos ver al líder Jiang?

— Supongo que está bien —Jin Ling se da la vuelta y se acuclilla para hablar con su Jiu—. A-Cheng, los discípulos te quieren ver, no tengas pena —comenta, extendiéndole la mano para que salga.

Jiang Cheng toma la mano de Jin Ling, y, al salir, saluda como su Jie le enseño.

— Éste se presenta, Jiang Cheng de la secta Yunmeng Jiang, un gusto conocerlos.

Todos quedan en un silencio sepulcral, para después exclamar al unísono.

— ¡Owwww, un gusto conocerte Jiang Cheng!

Jiang Cheng, al ver que los discípulos no lo miran con desaprobación como su padre lo hacía cuando iban a juntas entre clanes, les regala una sonrisa que hace que los discípulos se sonrojen.

— Bien hecho A-Cheng —le dice Jin Ling mientras le acaricia la cabeza—. Ahora vamos a comer, ven, vamos a sentarnos.

Después de comer, Jin Ling se encamina a la oficina principal para mandar la carta a Gusu y ver si pueden resolver esto, aunque en el fondo no quiere, ha pasado pocas horas con su pequeño Jiu y siente que quiere mimarlo mucho.

Llegan a la oficina y puede notar que Jiang Lin sorprendentemente no está, y ahora que lo piensa ni siquiera se presentó en la comida, así como tampoco se presentaron Jiang Tai, Jiang Zhou ni Jiang Ming. A Jin Ling esto se le hace extraño, aunque según recuerda Jiang Lin le dijo que iría a la habitación de su Jiu para ordenarla. Después le preguntaría si encontraron algo.

— A-Cheng, siéntate a un lado mío, te daré un papel y pincel, haz un dibujo en lo que yo me ocupo de un asunto, ¿sí? —dice el Jin mientras le pasa un pincel y una hoja.

— Esta bien, A-Cheng se portará bien.

— No lo dudo A-Cheng.

— Gege, ¿puedo hacerle una pregunta? —pregunta Jiang Cheng mientras toma el pincel para empezar a dibujar.

— Claro que si A-Cheng.

— ¿Qué es dudar? —pregunta mientras inclina la cabeza a un lado sin dejar de realizar su tarea.

— Es cuando no te sientes seguro de algo o alguien, esto se puede desarrollar en distintos contextos. 

— Oh... —exclama Jiang Cheng colocando un dedo en su barbilla—. Entonces cuando dudaba de que mi papá me quisiera o mi mamá estaba orgullosa de mí, ¿era por qué no me sentía seguro con ellos?

Jin Ling siente un odio hacía sus abuelos maternos, antes había escuchado muchos rumores sobre como Jiang Fengmian, ya que a ese tipo de persona no se merece que le llame abuelo, hacía distinciones entre Wei Wuxian y su Jiu.

Así mismo escuchaba como Madame Yu solamente los comparaba, pero pensó que esto había comenzado con la llegada de Wei Wuxian, no obstante ahora con esta pregunta que su Jiu le hacía se dio cuenta que comenzó mucho antes.