39. Te amo, no te vayas.

Start from the beginning
                                    

Estaba en la terraza con mis amigos, habían venido temprano íbamos a comer en casa hoy como habíamos acordado, anoche dormí en mi casa ya que Emi me insistió en que juguemos a la play hasta tarde y obviamente acepté, fuí en la madrugada a darle el té de todas las noches a Cielo despertándola para que no tenga terrores nocturnos pero la ví bastante bien aunque me daba algo de cosa dejarla sola. Nos pusimos acá a tomar tereres y escuchar música, el asado lo iba a hacer Tiziano, le había mandado mensajes a la morocha pero no me contestó, ni siquiera había salido a desayunar a la terraza como me dijo que tenía planeado, o mandado un mensaje de Buenos días, asi que la llamé alejándome un poco del grupo.

Cuando atendió hablé ― Eva.

― Palacios ― Su voz sonaba triste, estaba llorando ― Justo te iba a llamar.

― ¿Estás bien Cielo? ― La escuché llorar más del otro lado y me asusté ― Amor, ¿Estás en tu casa?

― Te amo Mateo pero no puedo, ― Estaba desconsolada y yo me estaba haciendo veinte escenarios distintos en la cabeza por segundo ― No puedo con esto, me está matando.

― ¿Cielo que...? Por favor, decime donde estás y te voy a buscar, lo vamos a arreglar juntos.

― No, no quiero seguir afectando tu vida así, te mereces a una chica que pueda amarte sanamente, que te cuide, que te valore, alguien como... como Belén ― Negué aunque no pudiera verme ― Yo ya no tengo solución, ya estoy perdida.

―Si la tenés, yo te estoy ayudando, estás mejorando y yo te amo Cielo, ¿Qué vas a hacer?

― Me quedé sin opciones Mateo ― ¿Iba a hacer lo que pensaba? ― Y no podes amar a alguien que no se ama a sí misma, sin darme cuenta te estoy cambiando la vida y no quiero, ya no tengo razones para seguir...― La interrumpí.

― ¿Yo no soy una razón para seguir? Te amo Cielo, en mi casa te quieren como a una hija, pensá en Emi, en Silvina, en tus viejos a pesar de todo, en Irene que te ama muchísimo, lo vamos a resolver juntos linda, ¿Te voy a buscar? No importa donde estés, espérame que en cinco estoy ahí.

Ignoró mi pregunta ―Te amo Mateo, ya vas a entender que te estoy cuidando.

Mis ojos se cristalizaron ― No ― Negué y bajé rápidamente de la terraza mientras salía de mi casa e iba a la suya, obvio que no pude entrar ya que no había nadie ― Cielo, ¿Donde estás? me estoy asustando amor, decime donde estás por favor.

― Estoy bien Palacios, cuídate muchísimo, sos la mejor persona que conocí en la vida y nunca va a haber nadie como vos, ― Mis lagrimas ya caían ― Tenés un corazón tan grande que por mucho tiempo creí que podía superar todo pero hay cosas que..., ― Su voz se quebró y yo no sabía que hacer, no sabía a donde ir ― Intenta no pensar tanto en esto ni darle tanta vuelta, nada te faltó, diste todo por mi, te jugaste hasta lo que no tenías y no me va a alcanzar la vida para agradecerte, me salvaste y no lo voy a olvidar nunca.

― Cielo, por favor.

― Solo..., seguí con tu vida, sos fuerte y sé que van a estar todos para acompañarte y va a ser una anécdota más, gracias por todo Mateo, a vos y a tu familia.

― ¡Para! ¡Cielo! ― Me cortó antes de que pudiera seguir hablando.

Mi respiración se hizo más rápida y mis amigos se acercaron, nunca me di cuenta cuando bajaron.

― ¿Qué pasó Mateo? ¿Cielo está bien? ― Habla Camilo y negué.

― Creo que Cielo se está por mandar una cagada ― Busqué el número de su tía en mis contactos, las manos me temblaban, lo encontré y la llamé ― Espero que no lo haga posta porque ahí si no sé que haría ― Hablé más para mi que para ellos.

― Hola Mateo ― Dijo la tía de mi novia al atender, su voz sonaba desanimada.

― Silvi, ¿Cómo andas? Escúchame no te quiero asustar pero hablé recién con Cielo, se despidió re raro de mi y creo que... ― Suspiré pasándome una mano por el pelo ― Creo que se quiere suicidar ― Mi voz se quebró.

Mis amigos me miraron sorprendidos, Leyla aguantó un sollozo con su mano mientras su novio la abrazaba y los demás se miraron entre ellos asustados.

― No Mateo, tranquilo, Cielo te dejó una carta acá ― No la dejé terminar.

― ¿Está con vos? Por favor decime que está bien ― Supliqué ― ¿Dónde está Cielo? Necesito saber Silvi, en serio, no puede dejar todo así.

No podía dejarme así.

No podía dejarme solo.

Duró un rato en responder ― Tuvo un bajón y fue a mi casa a dejarme unas cosas y hablar conmigo ― Ella también comenzó a llorar ― Estoy yendo para allá en taxi, quédate ahí, está todo bien, tranquilo.

Ella también me cortó antes de seguir preguntando, ¿Cómo que todo bien? ¿Soy el único que no ve que Cielo es capaz de matarse? Más si tuvo una recaída, encima ella ya estaba muy mal.

― ¿Qué mierda está pasando? ― Dijo alterado Nico ― Mateo, ¿Y Cielo?

Negué y me senté en la vereda ― Eso mismo me pregunto yo y encima me hacen esperar.

Ellos sólo me consolaron mientras lloraba asustado, no sabía dónde estaba, que pensaba o que iba a hacer, ¿Y si ya era demasiado tarde? No tenía porque pensar en lo peor pero, ¿Y si lo hizo? Sé que tiene el valor de hacerlo por "No hacernos sufrir a los que la queremos" pero esa sería la peor decisión que ella tome, había una solución que no era quitarse la vida, si supiera donde está, podría demostrarle que la vida es más que esto, mucho más, que siempre hay otra opción y que la voy a apoyar, vamos a salir juntos de estas y de muchísimas más.

Un taxi frenó y me paré yendo hacia el auto, creí que Silvina venía con ella pero no, sólo tenía un papel y una caja con ella.

Sus ojos estaban rojos de haber llorado y me acerqué a ella ― Decime que hizo, Sil.

― No sé qué es lo que habló con vos pero me pidió que sólo te dé esto ― Me dió lo que traía.

¿Por qué una carta y no venir a decirme las cosas como son? Seguro porque antes muerto a que ella haga alguna boludes, y lo sabe. Sabe que jamás dejaría que se vaya.

― Silvina, Cielo se va a...― No quise decirlo otra vez, dolía, negué con los ojos cristalizados ― La quiero ayudar.

Se le cayeron algunas lágrimas y suspiró ― Tranquilo Teo, lee el final de la carta.

La abrí bruscamente leyendo por encima, hasta que,

No...

lover of mine ; Trueno [Terminada✔]Where stories live. Discover now