/ Alternative.

6.9K 788 262
                                    

Akashic Record.

"Por favor, Dios.
Si existes, déjame ver tu misericordia.
Y por lo menos, una vez.
Muéstrame que puedo ver un sueño feliz... "

¡Kazutora!
¡Despierta, Kazutora!

Cuando abrí los ojos, pude percibir los colores del atardecer.
Su cabellera negra, y esos ojos que siempre estaban mirándome e invitándome a cometer alguna locura.

Hace mucho que quería verlos...

-Ba...ji... -Dije, aún despertando de mi letargo en el tren. Por alguna razón, al verlo, mi pecho dolió. Como si hubiésemos pasado mucho tiempo separados.

-¿Qué te pasa últimamente? Duermes de más. Podría dejarte dormir un rato, pero estoy a punto de bajar, y me preocupa que el tren te lleve hasta el final.

-Hmm... últimamente... - Respondí - Mi cabeza duele demasiado, y a veces sueño que estoy ahogándome.

-Ah, qué cosas. Deberíamos ir con el médico. O dile a tu terapeuta. Tal vez tenga algo que ver con tu ansiedad.

-Supongo...

Baji frunció el ceño. Pone esa cara cuando se preocupa de más.

Qué nostalgia...

—Kazutora — Me miró serio. —Deberías dejar de forzar las cosas. Sé que te sientes mal por lo de Shinichiro, pero tienes que dejar de esforzarte tanto para que los demás te acepten. Si una u otra persona no lo hace, debes vivir con ello.

Después de decirme aquello, Baji me entregó una de sus sonrisas y desapareció entre la gente. Era habitual. Había compartido mi infancia con él. Yo sabía en qué estación terminaba su viaje, y él se iba sin despedirse, para continuar hablándome en otro momento.
Me pregunté, por qué a veces parece que es otra persona. Por qué siento una terrible nostalgia mezclada con culpa cuando lo veo. Tal vez, por aquel incidente. Aunque me ha perdonado mil veces, yo estaré arrepentido un millón.

— A veces me gusta leer libros sobre las religiones de occidente...

Escuché una voz apagada entre los ocupantes del tren. Era un chico de piel pálida y ojos azules. Aunque se veía como alguien fuerte, no parecía de esos que alardearan sobre sus habilidades. Llevaba una espada de entrenamiento en su espalda, y ataba su cabello desordenado en una cola. Aparentemente, iba acompañado de su novia, pero no pude ver bien a esa persona.

— ... los ángeles son mensajeros de Dios. O algo así, como nuestros guardianes personales. Suena lindo, ¿No?. ¡Ah! ¡Ya nos pasamos! ¡Vamos a bajar!

Ellos dos corrieron hasta la salida antes de que el tren cerrara sus puertas.

Y esa chica que sostenía su mano pasó enfrente mío.

Al ver su cara, fue como si todo al rededor mío se sacudiera y mi cuerpo, o una parte interna de mí quisiera ir tras ella y abrazarla con todas mis fuerzas. Mierda. Con ese novio, ¿Cómo iba ella a voltear a verme?
¿Es esto a lo que llaman amor a primera vista?
Qué sentimiento tan patético.

Ámame.

Las puertas del tren se cerraron mientras me sentía mareado. Claro que sus ojos no voltearon a mirarme, ni un sólo segundo. Ella estaba concentrada en él.
Es natural en alguien que ya ha sido encarcelado. Esos pensamientos. Cuando encuentras algo y quieres hacerlo tuyo a como dé lugar.
Buscarla en este tren a la misma hora, seguirla, aprender sus horarios, fingir un casual encuentro hasta que se fije en mí.

🎉 You've finished reading ᴅɪᴇᴢ ᴅɪᴀꜱ [ 𝚈𝚊𝚗𝚍𝚎𝚛𝚎 𝙺𝚊𝚣𝚞𝚝𝚘𝚛𝚊 | 𝙻𝚎𝚌𝚝𝚘𝚛𝚊 ] 🎉
ᴅɪᴇᴢ ᴅɪᴀꜱ [ 𝚈𝚊𝚗𝚍𝚎𝚛𝚎 𝙺𝚊𝚣𝚞𝚝𝚘𝚛𝚊 | 𝙻𝚎𝚌𝚝𝚘𝚛𝚊 ]Where stories live. Discover now