¿Peligrosa?

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Azael:

Cuando ví la silueta de aquella chica la imagen que se me vino a la mente fue la de aquella chica que había conocido hacia un año atrás. Si aquella chica pelinegra que odiaba por el simple hecho de haberse metido en mi cabeza con solo verla, aquella chica que al conectar sus ojos con los míos supe que tenía que ayudar, aquella chica que lloro en mi hombro desconsolada y confió en mi. La chica a la que le pertenecía esta casa en la que tenía que trabajar y a veces intentaba encontrarla pero era misión imposible. Cuando me acerqué y ella se giro la vi pero su rostro estaba muy cambiado, sus labios eran algo más rosados y se encontraban sosteniendo una colilla del cigarrillo que fumaba con tranquilidad, su sonrisa estaba allí aunque se le notará lo fingida que era, su pelo estaban de un castaño claro y su ropa era de marca en tonos marrones. El tono de su voz era cambiado ahora tenía una voz cálida ,modesta y con algo que llamaba mi atención su sensualidad y ironía al hablar, aunque por dentro pensará todo esto me mostraba indiferente ya que era una chica que conseguía lo que quisiese y al chico que quisiese con solo mirarle a los ojos. Lo que mas llamaba mi atención eran sus muslos, su perfecto trasero que no pude evitar mirar cuando se agacho y esa cintura que podía mover con solo una mano, ella no era como las demás ella tenía todo lo que me atraía. Cuando se acerco a mi oído amenazándome sentí todo mi cuerpo estremecerse y como mi pantalón comenzaba a apretarme más de lo normal, lo único que pasaba por mi cabeza era agarrarla de su precioso trasero y besarla con frenesí hasta que aprendiese a no amenazarme .Pero antes de poder decirle nada apareció aquella enana de jardín que siempre hacía más de 1.000 preguntas por minuto colmando mi paciencia, era tan estresante como su hermana. No pude evitar quedarme a mirar un rato más a aquella pelicastaña que había producido mil sensaciones en mi interior, todo iba bien hasta que vi al enanito de jardín mirarme fijamente ¿ Me estaba desafiando una niña de 3 años y un metro?.

Comencé a mirarla sin algún tipo de expresión y frunció su ceño pero la mocosa no hizo ni un solo movimiento que indicará que apartaría su mirada hasta que la pelicastaña nos miro sonriente y me hizo hablar por la idiotez que salió de sus jugosos labios, dejándola confundida y a mi sonriente. 

Me aleje de allí con una sonrisa victoriosa para seguir con mi trabajo, cuando acabe de podar todo el césped de la jodida mansión de la castaña, me acerque a la piscina y eche un vistazo para intentar ver a la pelicastaña .

XXXX: Se te perdió algo Cellen- En ese momento no identifique que era aquella voz cálida que causaba mil sensaciones haciendo que hiciera una de mis llaves que para mi sorpresa la paro y en segundos estuve en el suelo completamente inmovilizado y lo mejor de todo con aquella castaña encima mía- ¿Qué coño te pasa?- Dijo aún encima de mi mientras yo estaba boca abajo- Habla joder- Dijo apretándome más hacía abajo causando más dolor, con la llave que me había hecho podría partir mi mano de un momento a otro y eso en vez de asustarme me encantaba, relamí mis labios para contestar.

Azael: ¿Como sabes mi apellido?- Dije intentando evitar el tema y ella apretó aún más - Joder...no iba a golpearte solo pensé que eras otra persona- Dije suspirando y ella rio irónica

XXXXX: ¿Golpearías otra persona?- Dijo con curiosidad y rodé los ojos bufando, ella tenía mis muñecas agarradas con fuerza.

Azael: ¿Te importa eso realmente?- Dije intentando calmar el dolor de mis manos, aunque era un dolor que me gustaba que ella hubiese generado porque indicaba que tenía muchas técnicas de defensa personal, que supongo que aprendió después de todo lo que vivió con su padre, apreté mi mandíbula con rabia solo de pensarlo.

XXXX: ¿Te importa que te parta el brazo realmente?- Touché sonreí ante su contestación, después de unos segundos sentí como me liberaba y me di la vuelta viéndola de pie frente a mi, haciéndome apreciar su rostro con detalle, su pelo estaba húmedo y tenía un mechón de pelo cerca de su rostro, su mirada estaba fija en mi, sus brazos estaban cruzados y cuando mi mirada se deslizó levemente a su cuerpo me estremecí. Ella estaba en un bikini rojo granate que estaba perfectamente adherido a su cuerpo, la parte de arriba era triangular con un volante rojo debajo de cada uno de sus perfectos pechos y el lazo de el mismo formaba un x en su cintura, la de abajo era la tradicional solo que los lazos estaban pegados a sus muslos haciéndolos ver más sexy de lo habitual, en uno de esos lazos tenía una cajetilla de cigarros- Levanta idiota- Dijo sacándome de mi trance y la mire encontrándome con su leve sonrisa, rodé los ojos levantándome poniéndome frente a ella dándome cuenta de que ella no medía más de 1'60.

Azael: ¿Donde aprendiste eso?- Dije con curiosidad y ella se encogió de hombros agarrando la cajetilla del lazo de su cadera.

XXXX: ¿Realmente te importa?- Dijo mirándome con su ceja alzada y una leve sonrisa, ladeé mi cabeza y ella rio levemente llevando el cigarrillo a su boca y encendiéndolo.

Azael: ¿Como sabes mi apellido?- Dije con curiosidad y ella me miro con una leve sonrisa que me estaba volviendo loco exhalo el humo de su boca.

XXXX: Una noche me lo dijiste- Dijo para encogerse de hombros y volver a llevar el cigarrillo a su boca haciéndome mirar sus labios detalladamente. En ese momento supe definitivamente que si era ella aquella chica que había visto rota y ahora parecía tan dura como una piedra.

Azael: Nunca me dijiste el tuyo- Dije para volver a mirar sus ojos y ella hizo una mueca que me hizo sonreír levemente.

XXXX: ¿No sabes el nombre de la chica que vive en la casa en la que trabajas?- Dijo arrugando su nariz haciéndola ver sexy y adorable a la vez, negué acercándome a ella quedándome a centímetro de su rostro, su mirada no se despegó de mi y sonrió levemente- Rachel Smith- Dijo acercándose más si se podía ,llevó su mano a mi boca y dejó su cigarrillo entre mis labios. Inhalé el humo para luego agarrar nuevamente el cigarrillo y llevarlo a su boca, calentándome al instante

Azael: Con que Rachel- Ella conecto sus ojos con los míos y luego los llevo a mi boca calentándome a un más. Ella se pegó a mi y se puso de puntillas para llevar su boca a mi oreja.

Rachel: Quizás soy tu peor pesadilla Cellen- Dijo para dejar un beso en mi cuello haciéndome cerrar los ojos ante su contacto.




Perfectos mafiososWhere stories live. Discover now