[𝐁𝐫𝐢𝐠𝐡𝐭𝐞𝐬𝐭 𝐬𝐦𝐢𝐥𝐞]《 Bokuto y tú 》

O11. El tiempo que nos pertenece. (3/3)

(...)

Sólo observaste a Bokuto confusa. ¿Por qué te habría pedido esto tan de repente? ¿O por qué tuviste que lanzarte? Se formó un silencio incómodo entre ambos, tú querías aceptarlo, claro está. Es solo que tus inseguridades entraron por tu cuerpo: ¿Y si esto es una broma? ¿Alguna apuesta que hizo? ¿Y si realmente estoy soñando esto? ¿Estoy segura de que no está jugando conmigo?

Bokuto puso sus feroces manos en tus hombros y saliste de tu trance.

―¡Por favor, respóndeme, ___! Escuché todo lo que sentías por mí, ¡No pude evitar sentir un cosquilleo tan agradable cuando dijiste que yo era tan admirable! ¡Arrrhg! ¡Nunca me sentí tan genial y no podía parar de darle vueltas y sonreír embobado!―él me miró con admiración―¡Eres genial, ___!

Te detuviste en seco a pensar.

Nunca le habías mencionado eso a alguien cercano al equipo, a las otras chicas, tus amigas o siquiera al propio Akaashi. Aunque Akaashi ya lo sabía sin tener que escucharlo de tu boca. Entonces, ¿cómo lo sabía? No recuerdas haber hablado de tus sentimientos hacia el chico a nadie nunca, excepto a un animal.

El búho.

¿Acaso Bokuto escuchó el rumor de alguien más o el propio Akaashi le empujó a hablar contigo sobre esto? Saliste de nuevo de tu trance cuando notaste que el chico te cargaba en brazos y te daba vueltas.

―¿¡Bo-bokuto-san?!―exclamaste alarmada.

―¡Espero que esto sirva para que dejes de pararte a pensar tanto! ¡Sólo dime si me quieres tanto como yo a ti!―dijo en un tono triste, notaste la curiosa gravedad de su pelo hacer lo de siempre y viste como sus mechones se caían por los lados―¡Por favor, ___, no me tortures así, hoot!―dijo.

―¿Espera, qué acabas de decir?―miraste a los ojos dorados del chico, éste se detuvo en seco y te miró como si nada, no parecía haberse percatado de su acto repentino.

Bokuto ahogó un grito agudo y se cubrió la boca.

―¡Bokuto-san! ¿Qué sucede?―dijiste preocupada.

―¡NO IMPORTA! ¡¡Fue algo sin querer, lo lamento!!―se disculpó haciendo varias reverencias bruscas, le miraste sin saber qué decir―Por favor, responde a mi... declaración improvisada.

―Bokuto-san... yo acepto tus sentimientos, al igual que espero que tú aceptes los míos―dijiste jugando con tus manos. Sentiste como sus fuertes brazos te enrollaban y te atraían hacia el pecho del chico―¿E-eh?

―¡¡NO PUEDO CREERLO!! ¡¡ERES LA PRIMERA CHICA QUE ACEPTA MI CONFESIÓN DESDE QUE ESTOY EN ESTA ACADEMIA!! ¡Muchas otras chicas me rechazaron, pero no hay problema ___! ¡Eres y serás la única en mi vida! ¡¡MUCHAS GRACIAS!!―el chico comenzó a gritar de forma exagerada y abrazarte con alegría y un tanto de fuerza, notabas como te costaba respirar―¡Ah, lo siento!―él te soltó y salió corriendo de nuevo al pabellón―¡¡HEY HEY HEEEEEEEEEY, CHICOS YA TENGO NOVIA!! ¡¡___ ACEPTOOOOOOOOO!!―gritó a todo pulmón, escuchaste risas desde dentro.

Tú mirabas al chico sonrojada y fuiste corriendo a taparle la boca.

―¡¡O-oye!! ¡Apenas pasaron 5 minutos y ya estás haciéndolo público!!―te acercaste y te pusiste de puntillas para taparle la boca con tu mano, el entrenador se acercó hecha una furia y le dió una patada en las rodillas al albino.

―¡Deja de gritar! Vas a hacer que nos llamen la atención y no nos dejen usar el pabellón, Bokuto! ¿Para esto gritas así? Ay... este chico―se fue resignado y dejando a un Bokuto modo 'emo'. Hora de subirle el ánimo, pensaste.