La vida nunca es fácil. El mundo puede llegar a ser cruel y ella lo sabía. Ella había tenido la oportunidad de ser rescatada, había podido tener una oportunidad en una fundación para lograr lo que más quería. Marta Segú, prima del presidente del F.C...
Mañana mismo tomaría el vuelo que me llevaría a Manchester y firmaría mi contrato con City sin mirar hacia atrás".
El recuerdo de la última noche que estuve en La Masía invade mi cabeza cada vez que la miro y con ello me doy cuenta que esa idea fue la peor que tomé en mi vida. Dejé a mis amigos, familia y el club que llegue a amar con todo mi corazón por algo tan estúpido y evidentemente eso no solucionó nada.
Acá estaba de vuelta cuatro años más tarde y seguía igual o hasta más enamorado de la misma chica que había conocido casi toda mi vida. La única diferencia es que ahora la había perdido por completo y ni si quiera tuve el valor de decirle lo que siento por ella.
Ambos intercambiamos miradas, pero ella me ignora completamente para volver su mirada a Pablo que justo le acababa de hablar. El la hace reír y siento un poco de rabia al verla con ellos y no conmigo.
—¿Es ella?—me habla una persona a mi espalda haciendo que de un pequeño salto.
—Joder tío, me has dado un susto—le digo a mi mejor amigo de todo el tiempo.
—No me has respondido—me dice el moreno y se reclina a la barandilla a ver la escena que estaba observando antes—Por como me la describías siento que es ella.
—Sí, ella es Oriana—le respondo para imitar la acción.
Ambos observamos a Oriana jugar con las niñas y los chicos, Pedri y Gavi van despacio y se equivocan agrede cuando las niñas intentan quitarle el balón, pero con Busi y Nico entran duro. Por otro lado está otra chica que intenta jugar, pero hasta las niñas le quitaban el balón como si fuera un dulce, y luego estaba Ori que estaba demostrando lo buenísima que era con el balón.
Me había costado mucho convencerla cuando era una cría para que jugara conmigo en nuestro escondite secreto, pero una vez que lo hice le enseñe todo lo que hoy en día sabía.
—Juega de la ostia, hasta mejor que tú. Tiene un estilo muy..—me dice Ansu con una sonrisa de oreja a oreja, pero yo lo interrumpo.
—Ya sé, yo le enseñe a jugar—digo un poco serio.
—¿Todo bien?—me pregunta una vez que se percata que estoy cabizbajo.
Iba a responderle y contarle todo lo que había pasado hasta que un grito proveniente del campo hizo que nuestras miradas volvieran a este.
Mis ojos encontraron la persona que había emitido el sonido y ahí estaba ella tumbada en el piso con su pie ensangrentado.
—Ostia—dije en voz baja y empecé a caminar con dirección hacia ella seguido por Ansu.
Las niñas se habían acercado preocupadas a verla ya que ella seguía tumbada en el piso. La cara de Pedri y Pablo demostrada bastante preocupación por la que solía ser mi mejor amiga, mientras que la chica que lo había echo no tenía ni una pizca de arrepentimiento.
—Lo siento, no ha sido mi intención—le dice con un tono un poco hipócrita generando con Pablo la mirara con una cara de pocos amigos.
—Joder Ori, debí insistir para que te pusieras los botines—le habla Pablo un poco preocupado.
—No pensé que un pisotón iba a causar esto—vuelve a intervenir la chica que le había causado la herida.
—Joder si ella está descalza y tú llevas unos botines de cuatrocientos euros, no es difícil deducir qué iba a pasar si alguno de nosotros le pisaba el pie—le habla bastante cabreado Pablo.
Claramente el tono de voz de Pablo había hecho que la chica se avergonzara por su acción y es que no sé qué le había cruzado por la cabeza al hacer eso.
—Estoy bien, solo iré a la enfermería—Oriana se intenta parar con un poco de dificultad.
Le tiendo la mano para poder ayudarla, pero esta hace caso omiso a ella y se termina parando por su cuenta. Puedo notar la mirada de extrañase por parte de Pedri al ver cómo ha reaccionado Ori, pero prefiero dejarlo pasar por alto y concentrarme en ella y su herida que no paraba de sangrar.
—No vas a poder ir andando así hasta allá sola—habla por primera vez el canario preocupado.
—Pedri tiene razón, tal vez deberíamos pedir una silla de ruedas o.. —el andaluz iba a seguir hablando, pero su amigo fue más rápido que él.
Nico había tomado en sus brazos a Oriana y nos había dejado con la boca abierta ante su acción para luego llevársela a la enfermería.
—O puedes hacer eso—habla Pablo al aire ganándose un golpecito en la parte trasera de su cabeza por parte de Pedri.
Una parte de mi sintió rabia al verla en los brazos de Nico, pero sabía que no podía hacer o decir algo al respecto. Al final de cuentas, ella ya no me quería a su lado.
*Tete: palabra en catalán que normalmente la usan los niños para llamar a sus hermanos mayores.
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¡Hola hola! Primer capítulo narrado por uno de nuestros personajes principales :)) Ahora tienen una idea de lo que siente Eric cada vez que está con Ori, ¿qué opinan de ello? ¿Los shippean?
He subido este capítulo porque hemos llegado a mil vistas con cinco capítulo *salta como niña de dos años* y creo que eso ameritaba un capítulo! Les recuerdo que mediante los votos y comentarios hacen que me de cuenta si les esta gustando o no el camino que está tomando el fic y me sirven mucho como motivación <333
