La vida nunca es fácil. El mundo puede llegar a ser cruel y ella lo sabía. Ella había tenido la oportunidad de ser rescatada, había podido tener una oportunidad en una fundación para lograr lo que más quería. Marta Segú, prima del presidente del F.C...
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eric;
Una parte de mi sabía que no podía reclamarle absolutamente nada. Yo la había dejado hace cuatro años y, lo peor de todo, me había ido sin decirle nada.
Me había costado mucho tomar la decisión de irme, pero sabía que no podía quedarme y ella era la única razón por la cual aún seguía en Barcelona. No podía dejarla, una parte de ella había me había hecho caer completamente a sus pies.
Ansu era el único que sabía de su existencia y me había costado un montón hablarle sobre ella. Al inicio no lograba entender por qué debía vivir bajo la sombras de todos, pero conforme iba creciendo entendía el porqué de esa decisión.
"—Cuando cumpla dieciocho voy a pedirle a la señora Marta que me deje postular a la Universidad de Oslo, dicen que es una de las mejores del mundo para la carrera que quiero—habla Ori sin despegar su mirada del cielo.
Ambos habíamos decidido pasar el atardecer mirando el cielo desde la azotea de La Masía. Absolutamente nadie venía a esa parte del club, a menos que seas Oriana o la señora Marta, y ese lugar se había convertido en nuestro escondite perfecto.
—¿Que vas a estudiar Ori?—le pregunto mientras volteo a verla fijamente, pero ella no despega su vista del cielo.
—Marketing.
—¿Para ser parte del club?—le preguntó y ella asiente con su cabeza lentamente—Pero, ¿por qué no mejor en Barcelona?
—Una parte de mi quiere dejar La Masía, Eric—me responde y esta vez si voltea a verme directamente a los ojos.
—Pero, ¿qué hay de mi?—le hago la pregunta que tanto había tenido hacerle desde que descubrí que Oriana no era una amiga más del montón.
Tenía miedo de oír su respuesta, pero era algo que necesitaba saber para así poder la decisión que cambiaría mucho nuestras vidas.
—No sentirías mi ausencia, tete*. Aparte, estoy segura de que cuando te pongas de novio con alguna que otra chica vas a olvidarte completamente de mi—respondió Oriana sin si quiera mirarme.
—¿Novia?—le pregunto bastante extrañado por su comentario.
—Sí Eric, se supone que te cuando alguien se enamora y es correspondido te pones de novio con esa persona—me responde con un tono de voz burlón ante mi pregunta.
Claro que sé lo que es tener novia.
—¿Y tú has pensado tener novio últimamente?—le pregunto mientras le miro fijamente cada una de las pequeñas pecas que tiene en su nariz.
—No ha llegado la persona que me haga sentir lo que dicen que se siente cuando te enamoras—me responde y vuelve a dirigirme la mirada.
Y en un segundo todo cambio para mi. Esa era la respuesta que necesitaba oír para poder tomar la decisión por la cual últimamente mis agentes me habían estado presionando. Era más que evidente que ella no sentía nada por mi y yo tenía que sacármela de la cabeza si no quería arruinar nuestra amistad.
