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Narra ___

Giulia termina de tomar de mi pecho, se ha quedado dormida incluso con el pezón en la boquita y me ha parecido muy mona. Me subo el sujetador, me pongo bien la camiseta, pongo derecha a la pequeña y la coloco para que eche los gases. Le doy golpecitos en la espalda y me voy moviendo por el salón, salen sus pequeños gases y bosteza. Mueve la cabeza y se acurruca más a mí.

—Vamos a dejarte en la cuna, mi niña —escucho a Reborn gritar y luego reír, niego y miro de nuevo a mi hija— tu padre está trabajando pero seguro que va a dejarte descansar.

Le dejo un beso en su cabecita y ando hasta las escaleras, las subo con calma. Escucho las risas de Matteo y un hijo de puta de regalo. Niego mientras río silenciosamente y me acerco a la puerta de su estudio. Llamo con dos pequeños golpecitos y abro, me mira de reojo y a los pocos segundos me mira fijamente.

—Perdona que te moleste, la peque acaba de dormirse y voy a dejarla en su cuna.
—Entiendo —se pone de pie, me deja un beso en la frente y acaricia la mejilla de Giulia— voy a acostarla yo anda.
—Por supuesto.

La sujeta con mucho cuidado, la mira, sonríe, le deja un beso en la frente y se va hacia nuestra habitación. Aprovecho, me acerco al PC y escucho por los cascos las voces de Juan Guarnizo, Pol, Axozer y Auron. Me los coloco y escucho, están jugando al Worms.

—¡Pero mamapingas no mates a pollita! —grita Juan indignado.
—¡Jódete hijo de puta! —le responde Auron.

Me río, golpeo la mesa sin querer y de repente Axozer habla.

—¿Quién se ríe?
—¿Un hacker? —pregunta Pol.
—Una hacker, es una mujer.

Mierda, he debido de darle sin querer a la tecla de desmuteo. Bueno, voy a saludar ya que me han escuchado.

—Holaa...
—¡___! —grita Auron— ¡Qué susto nos has dado!
—Perdón —río— he desmuteado sin querer el micro.
—¿Está el riborn en vivo por ahí? —pregunta Juan con risas.
—Ahora viene.

Miro el chat y todos ponen corazones junto a mi nombre, algunos incluso preguntan si ya tuve a la bebé. Sonrío y me fijo en que ya le toca atacar a Reborn, sé que se está tomando su tiempo con Giulia así que voy a aprovechar.

—Igual Reb me mata, pero voy a jugar mientras por él. Me toca.
—Ojooo, se viene —dice Axo, río.
—Se vino, se vinoo.

Apunto a uno de los gusanos de Pol, disparo y lo mando al mar, llevándome también por delante a otro. Empezamos todos a reír y escucho como Auron golpea la mesa.

—¡Qué cabrona! Es muy buena.
—Te ha reventado Pol —sigue riendo el catalán— te queda sólo uno.
—Ya ya, es muy buena como dije —ríe.
—Ahora me caes muy bien ___, ahora somos hermanos, mejores amigos y novios.
—Como te escuche el viejo —vuelve a reír Auron.
—Me come la verga ese abuelo.

Todos reímos y llega Reborn, que me mira abriendo mucho los ojos. Veo pánico en estos, así que lo calmo con un gesto.

—Chicos, Reb ya está aquí así que tengo que despedirme.
—Quédate ___, por favor —me pide Axo.
—Eso, quédate. Eres buena y nos apetece jugar contigo. Al abuelo lo tenemos muy visto.
—Pero Auron —reímos y miro a Reb— no creo que pueda quedarme.
—Sí puedes, pásame a Reborn que le digo cuatro cosas —dice Raúl con chulería.
—Te reclaman, riborn en vivo —le doy los cascos y dejo que se siente.
—¿Qué le habéis hecho, capullos?
—¡No le hemos hecho nada comevergas, nos estábamos divirtiendo!
—Ahora mismo te ordeno, como secretario oficial del rey de España, que dejes que ___ juegue con nosotros —escucho desde los cascos, que están a todo volumen.
—No soy español, así que no me importa. Como si viene el que le lava los putos gayumbos.
—Ahora enserio, déjala que juegue con nosotros un ratito, ¿no está ocupada ahora verdad? Tampoco es nada malo que se divierta.
—Ya sabes mi opinión al respecto Auron, volvamos a la partida que ___ tiene cosas que hacer.

No, no tengo nada que hacer mientras está la niña dormida. Me apetecía muchísimo jugar con ellos y pasar una tarde entretenida, aunque Reborn quiere alejarme lo máximo de Twitch y lo entiendo, pero no sé. Por una vez no pasaría nada. Ya ha podido comprobar que en el chat solo hay mensajes positivos respecto a mí. Y tampoco está la cam puesta, se escucha solamente mi voz.

Reb me mira, niega y continúa con el juego, como si nada. Suspiro, me doy media vuelta y me voy hacia nuestra habitación. Cojo el móvil y me pongo a revisar las redes sociales.

En Instagram pues como siempre, bastante tranquilo pero las solicitudes de seguimiento a reventar. Miro los stories de algunos familiares, doy likes a fotos y me salgo.

Voy a Twitter, aquí está la verdadera locura. Mis notificaciones a reventar entre follow, likes, retweets y comentarios, más menciones. Veo algunos de esos tweets, varias cuentas mencionan que Reb podría haberme dejado jugar ya que todos insistían y a mí me apetecía. Otras defienden que él se niegue y me aleje. Las dos partes llevan la misma razón así que no hay nada que comentar más.

Decido, por último, meterme en Youtube y ver algunos vídeos, para pasar el rato hasta la hora de la cena. Aún no sé qué voy a preparar, sinceramente.

****

Escucho dos golpecitos en la puerta, paro el vídeo y levanto la vista del teléfono. Matteo se acerca, se sienta cerca mía y me mira.

—¿Qué haces?
—Veía vídeos, ¿has terminado ya el stream?
—Sí, justo he apagado todo.
—Guay —sonrío— ¿te lo has pasado bien?
—Muy bien, como siempre.
—Me alegra —miro la hora— imagino que has venido por el tema de la cena, ahora la preparo. ¿Te apetece algo en concreto?
—No venía por eso, ___, quería hablar contigo.
—Pues dime.

Dejo el teléfono a un lado, me siento poniendo la espalda en el cabecero y abrazando mis piernas. Matteo gira un poco su cuerpo hacia mí, pasa la mano por la barba y me mira.

—Es sobre lo que pasó hace unas horas —asiento— ¿por qué hablastes y jugastes con mis amigos? Ni siquiera me preguntastes.
—Desmuteé sin querer el micro, me escucharon reír y se ralladon, así que hablé de nuevo para calmarlos. Te tocaba en el juego y creí que no sería mala idea hacer tu turno por ti para que no perdieses, me lo pasé bien mientras hablaba con ellos. El chat no paraba de ponerme corazones y estuve muy cómoda.
—¿Entiendes la gravedad de lo que hicistes? ¿Y si te hubiesen atacado? ¿Y si te acosaban? O peor, ¿y si decían algo de la niña?
—Escúchame Reborn, entiendo tu molestia y enfado. Sé que me quieres alejar de todo esto, pero fue por un accidente y ya está. Nadie hizo ni me dijo nada malo, está todo bien. Ya otro día jugaré con ellos cuando no estén en stream y ya está, arreglado. No hace falta que te enfades.
—Es que, dios ___, si tan sólo te hicieses a la idea de lo que puede llegar a provocar exponerte aún más... —se restriega la cara con la mano.
—A ver, llevo un rato metiéndome en Twitter y no me han dicho ni un solo insulto. Al revés, han dicho que les ha encantado mi pequeña visita y que les gustaría verme más por allí. Si hubiesen dicho algo malo, me habría llegado créeme. No les tiembla el pulso a la hora de mencionarme.
—Simplemente no lo vuelvas a hacer por favor.
—Sí, vale —estiro las piernas y cruzo los brazos— ¿quieres algo concreto para cenar o no?
—Te da igual, ¿no? —frunce el ceño.
—¿Por qué lo dices?
—Ese “sí, vale” con ese tono —levanto una ceja— yo lo digo por tu bien. Quiero protegerte.
—Lo sé, lo sé de sobra y lo agradezco. No es que me dé igual, sólo que no quiero que discutamos por esto. Ya está todo aclarado. No volveré a aparecer y punto, fue un error y pido perdón. Ahora, con tu permiso o sin él, voy a hacer la cena. Haré lo que me apetezca ya que no me das sugerencias. Vigila a Giulia porfa.

Me pongo de pie, me coloco las zapatillas de estar por casa, le doy un apretón en el hombro, acaricio su melena y salgo de la habitación.

No entiendo por qué se ha puesto así, sé que él siempre va a intentar protegernos lo máximo posible y lo agradezco enormemente. Pero parece que no entendiese que fue por un error y ya está, que no me puse a jugar a propósito. Supongo que se le pasará el cabreo mañana, tenemos que hablar de la comida con la familia y otra con los amigos que tenemos pendiente.

Destiny 2 Where stories live. Discover now