Marrie Jackson Escuba Peter es una multimillonaria de los Ángeles, California y dueña de una gran empresa de tecnologías llamada The escubas, su padre y socio Denis Escuba, un hombre muy reconocido, la presiona con que debe casarse lo mas pronto pos...
Marrie: ¿de que hablas? - respondió totalmente nerviosa.
Sonreí.
Demi: Has estado actuando demasiado extraño, a ver puede que sea un poco lenta Marrie pero no soy tonta.
Marrie: Demi, yo..
Demi: No te preocupes si estás con alguien lo entenderé y me haré a un lado, pero si me sentiré muy mal si te acostaste conmigo estando con alguien. - dije tratando de sonar lo más tranquila posible mientras el miedo inundaba mi cuerpo.
Había sido muy notorio todo el comportamiento de Marrie desde que llegue por más que quise hacerme la que no sospechaba nada, me estaría faltando el respeto hacia mi misma si simplemente lo ignoro, siento ese miedo en la garganta de lo que vaya a pasar pero si Marrie estaba con alguien antes de que llegara.. haciendo lo que hicimos, me iré y definitivamente sacaré a Marrie de mi vida, ya serían muchas señales y yo las tomaría.
Marrie: claro que no Demi, te lo dije estaba boxeando es solo que estos días me he sentido demasiado nerviosa como si alguien me persiguiera o vigilara.
La mire a los ojos fijamente y ella a mi, me veía con ojos de súplica y desesperación.
No hablé.
Se acercó a mi, besando mis labios abriéndole paso a mi boca pero mi cuerpo no respondía, no podía moverme, me sentía confundida.
Marrie: por favor Demi, te aseguro que no había nadie es solo mi paranoia, estás aquí arreglemos las cosas y empecemos de nuevo, no me dejes ahora. - dijo con los ojos encharcados sosteniendo mis manos.
Era aquí donde Marrie tomaba todo de mi y me tenía a su merced, yo elegía creerle una vez más.
Demi: Esta bien. - dije un poco fría.
Marrie me besó ferozmente posicionándose sobre mi nuevamente y así hicimos el amor por horas y horas, perdí la cuenta de todas las veces que nos vinimos todo fue tan mágico y romántico, debía admitir que entre nosotras había mucha química y que éramos tan diferentes pero a la vez muy compatibles.
Después de todo ese encuentro de bienvenida que tuvimos, nos dimos una larga ducha que terminó en otras cosas obviamente, bajamos de su habitación dispuestas a salir a comer... quería que cocináramos algo pero la chica con la que salgo es muy engreída y quería ir a un restaurante por que moría de hambre. Marrie se colocó su perfume, ese que desde el principio me tiene completamente loca, ese que penetra mis fosas nasales y me deja sin aliento.
Demi: Me gusta mucho tu perfume. - dije suspirando su cuello una vez más.
Marrie: Lo se, el día que te conocí estabas babeando por mi.
Demi: Eres demasiado ilusa Marrie.
Marrie: ¿cuando lo admitirás? - dijo sonriendo de esa forma triunfadora.
Demi: Nunca. - dije de forma dramática dando la vuelta recibiendo una nalgada.
Después de otro tiempo con Marrie.
Opte por algo cómodo que tenía en mi maleta.
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