capítulo doce

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- ¡Dilo de una vez, Vic! - rodeé los ojos. Alex si que llegaba a ser irritante pero aún así lo amamos

- La fea tiene novio - comentó César con una mueca y en su mirada reflejaba decepción

- ¿¡Qué!? - antes de poder responder César ya le había regalado un zape en la nuca

- Oye, no lo pegues así - dije cruzada de brazos, a lo cual cara de culo se encogió de hombros con indiferencia

Típico de él

- Mi hermanita nunca me haría daño - dijo Alex abrazandome como si yo me tratara de un ángel

- Patético - comentó cara de culo

- Ese no es el punto ahora, el punto es que esta mocosa tiene novio, César - Alex y cara de culo se abrazaron como si del fin del mundo se tratase mientras que yo los miraba con una cara de poker por su escena teatral - Nuestra fea ya está grande

- Dijiste que podía tener novio antes de mis 18, Alex - mencioné mientras él desviaba la mirada a algún punto

Oh no

- ¿¡Qué tu qué!? - gritó mi hermano

- ¡Ay cállate!, deja de ser tan celoso. Ratita estoy muy feliz por ustedes

- ¿¡Celoso yo!?, ¡Con que derecho lo dices tú!

- ¿¡Ah si!? Pues tú eres un pendejo con cara de pelotudo

Ambos tienen cara de pelotudos

- Por lo menos yo si tengo gluteos y no parezco una tabla - Alex hizo una seña de diva donde reflejaba "No me hables"

- Si tengo gluteos

- ¿Sabes qué hijo mío? Vete a la carpintería, a ver si arregla algo - Alex se lanzo sobre él mierda y el desastre se desató. Empezaron a pelear como en la luchas que aparecen en la televisión ante mi mirada atenta

¿Por qué no compré pipocas para este momento? Que ilusa soy

- ¡Hermanita, ayuda! - bien, ya es hora

- ¡Basta los dos, bastardos!

- ¡Vic, admite que es una tabla! - dijo cara de culo. ¿Qué hago? ¿Digo la verdad o miento para no dañar sus sentimientos?

Es que es verdad, hasta nosotras tenemos más gluteos que él

- Vamos, Vic, se que quieres decirlo. ¿Sabes? El otro día Alex me dijo que eras una niña caprichosa y con cero pechonalidad - bien, la paz nunca fue una opción

- Eso no es cierto - dijo Alex casi chillando. No habrá compasión

- ¿¡Sabes algo!? Cuando naciste el doctor te infló los muslos por pena de tus nalgas ¡Las cuales no tienes!

- Eso es pasarse de pinche lanza, Jones - me encogí de hombros indiferente mientras César se burlaba a todo dar de Alex - Me lo merecía, se que odias que te digan caprichosa

Sonreí

Mire la hora y me acordé que debía ir a la casa de mi ahora sexy vecino

"EL CHICO DE LOS OJOS VERDES "Where stories live. Discover now