El rubio caminaba hacia su casa, nada fuera de lo normal, esperaba que se encontraría a Hinata o quizás a Sakura ya que normalmente se las topaba.
Pero no pasó, algo que agradeció con toda felicidad, desde que el azabache de su amigo le hizo extrañas preguntas acerca de como sería su chica ideal, ambas chicas se habían puesto locas por querer llegar a sus expectativas.
-Una mujer confiable, segura de si misma y fuerte, no más
Era lo que había dicho.
Aun que realmente lo que quería era una persona que le quisiera de verdad no solo por ser lo famoso que era, sabía que cierta chica lo amaba de esa forma, pero no estaba del todo seguro si realmente salir con ella, quería enfocarse primero en ser Hokage el amor será después.
-¡¿Que?! ¿Por que no?
-Lo siento, hoy tengo planes con ¡Menma!
El moreno paro sus pasos para girar a su amigo quien venía corriendo a el, escapando así de aquella chica que hasta hace unos días -si mal no recordaba- le había entregado una rosa y tirándole piropos.
-Tenemos que hacer eso que te dije la última vez
Arqueo su ceja, el Uchiha había pasado su brazo en sus hombros y ahora le estaba dando una mirada suplicante pidiendo ayuda.
Aquella chica de había acercado a ellos con ambas manos en la cintura mirando un poco molesta al ojiazul, este solo dirigió su mirada al azabache quien por un segundo sintió miedo por lo temeraria forma en que lo veía.
-Oh claro eso
-Si si eso, vámonos
Literalmente escaparon de ahí, el rubio había pensado que quizás el tonto de su amigo se había metido en problemas por aquella chica.
Ya estaba por llegar a su casa y por culpa de cierta persona ahora estaba más lejos, solo quería dormir en esos momentos, mañana iría de misión como se lo encargo Tsunade y si no dormía exactamente sus ocho horas de descanso, Sasuke sería el culpable.
-Habla
El azabache se puso nervioso, sabía que a Menma no le gustaba cuando lo metía en sus embrollos, pero ya había decidido que se quedaría con ella, además de que sabía ahora que podría tener una oportunidad, ya que su amigo se iba de misión y no regresaría en un tiempo, no la desaprovecharía por nada.
-Lo siento Menma, solo quiero que deje de perseguir me.. Ella y también las demás chicas que me siguen
-¿Que?
-Es una historia larga, en fin me tengo que ir, ¡te debo una!
Este solo se le marco una vena por el enojo causado por su amigo y comenzó a caminar nuevamente hasta su dichosa casa.
El comportamiento de Sasuke no era raro para nada, sus sospechas habían desaparecido, se había metido en un problema.
Sin embargo algo no se le había quitado de la cabeza aun, le había dicho que no quería ser perseguido por las chicas que siempre le seguían, quizás alguna de ellas ahora quiere al azabache para si sola.
Solo quizás..
-Me marcho ya
-¡Suerte!
Su madre se despedía de el junto a su padre en la entrada a la aldea, decidió irse desde muy temprano así evitando nuevamente a sus dos grandes molestias.
La misión era sencilla, vigilar y capturar a los causantes de robo en Suna, había pensado que era más fácil de lo que espero así que no veía necesario quedarse tanto tiempo.
