I Bet My Life

Capítulo 2

Este capítulo quiero dedicárselo a @stifrollers , porque fue la primera persona en dejar su voto y a @Tiara3DXE , porque fue el primer comentario en mi historia y me emocionó muchísimo.
¡¡¡Muchas gracias!!!

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—El mar es muy grande, y el Grand Line es el lugar más peligroso. Sólo los más fuertes logran navegar esas aguas y allí es a donde voy. ¿Pero tú? No creo que siquiera te acerques a la entrada, morirás. Tú nunca vas a ser el rey de los piratas—. Se alejó dejándolo atrás.

Luffy se quedó ahí, sin moverse, mirando hacia donde se había ido Ace con los ojos bien abiertos. Su mente seguía procesando lo que acababa de pasar, lo que le había dicho.
Una sensación extraña se apoderó de él y de repente le era difícil respirar. Sentía un hueco tan profundo en el estómago que tuvo que tocar su abdomen solo para asegurarse que estuviera completo.
Tenía que ir con Ace, tenía que arreglar esto ¡no podía dejarlo así!

—¡Ace!

Salió corriendo por donde lo había visto irse. Corrió y corrió y corrió y corrió por todo el bosque pero no sabía a dónde ir.

—¡Ace! ¡Por favor! ¿Dónde estás? ¡Ace!

Buscó por todo el bosque pero no encontró ni rastros de él. No sabía a dónde ir y ya estaba oscureciendo. No podía perderlo, tenía que encontrarlo.
Fue al único lugar que faltaba: la casa del árbol.
En cuanto llegó miró hacia arriba. Todo seguía igual a como lo recordaba. Ninguno había puesto un pie cerca de aquí desde hace un tiempo, pero su bandera pirata seguía allí.

—Ace...Ace ¿estás ahí arriba?

No recibió respuesta. Con cuidado, trepó el árbol esperando encontrar a Ace allí arriba, pero cuando llegó a la cima no había nada.

—Ace...

Miró al rededor con cuidado. No había nadie, absolutamente nadie. Estaba vacía. Parecía que el espacio era mucho más grande de lo que alguna vez fue. Sintió ganas de llorar de sólo pensarlo. Estaba solo allí.
En la pared aún estaban colgadas las copas con las que los 3 brindaron con sake y se convirtieron en hermanos. Se acercó y las tocó con cuidado, como si fueran a romperse.
Sabo se había ido hace muchos años buscando libertad y ya nunca regresaría, había perdido a un hermano. Y ahora Ace...

"No quiero ser hermano de alguien como tú"

Su expresión se deformó y un gemido de dolor escapó de él. No quería perder a otro hermano. Pero...Ace había dicho eso. ¿Ya no quería que fueran hermanos? No, no por favor no podría... ¿Su lazo de hermandad está rompiéndose? No, no, no, no, por favor no.
El espacio de repente era muy pequeño y las paredes se acercaban cada vez más a él. No podía respirar, necesitaba aire, necesitaba salir de allí.

Sin pensarlo, se aventó por una de las ventanas y cayó al suelo. Estaba tan alterado que no hubiera sentido el dolor incluso si no estuviera hecho de goma.
Trató de tranquilizarse, pero el aire no le entraba a los pulmones y su vista estaba borrosa por culpa de las lágrimas que se negaba a dejar salir.

Tenía miedo, miedo de perder a su hermano, a Ace.

—Está bien— sollozó mientras se tallaba los ojos con el dorso de su mano— sólo tengo que verlo y hablar con él. Ya es tarde, tal vez ya regresó a la cabaña.

Se paró con cuidado y se sacudió un poco el polvo. Tenía que regresar, tenía que ver a Ace.
Corrió y corrió y corrió hasta llegar a la cabaña de Dadan, abrió la puerta de un jalón y subió corriendo las escaleras hasta su cuarto.