Cuando encuentras una caja con fotos viejas y cartas, nunca imaginas que tu abuelo que casi nunca te habla, comience a hablarte como si durante tus 17 años no haya ocurrido nada de nada.
Y es que no tenía ni idea de como era posible que me contara tantas cosas sobre una persona que no conocía, con que alegría, con que palabras dulces, con que sensibilidad y sobre todo con que tristeza.
Mamá nunca me había dicho que la debilidad del abuelo John era mi abuela Mia, o mejor dicho, los recuerdos que ella había dejado. Y es que todo empezó con ese 19 de agosto, recogiendo cajas de la antigua casa del abuelo, ya que estaban a punto de venderla. Aún el negándose a aquello.
VOUS LISEZ
Aquello que fuimos
Roman d'amourJerard nunca pensó que encontrar una simple caja cambiaria tantos aspectos de su vida, ni que conocería tanto de la persona que tuvo al lado por 17 años. -¿Y como fue que conociste a la abuela? Una pregunta que por muy simple que parezca, fue la que...