¿Suerte o Desgracia? || 𝘽𝙖𝙠𝙪𝙜𝙤 || (RESCRIBIENDO)

CAP.35

Aviso contenido +18

A quien no le guste que no lea

T/N

Me besó fugazmente, como si nos echaramos de menos el uno al otro. Después de ese momento de beso sentimental empezó a subir el tono, llegando a un beso lleno de lujuria y deseo.

Le fui quitando la camisa botón a botón, y luego el me ayudó a quitarme el vestido dejándome en ropa interior.

Que por cierto gracias diosito por darme señales y hacer que me ponga lencería.

—Vaya vaya, pero si vienes preparada y todo—hablo el rubio mirándome de abajo a arriba

—No todos los días me puedo cojer al famoso bakugo Katsuki

Me empujó a la cama para luego mirarme con deseo y luego unirnos en un fugaz beso. Estuvimos en una guerra interna, de ver quién tomaba el control, que ganó el y antes de separarse mordió suavemente mi labio inferior.

—Sabes, me da igual si es nuestra primera vez. Te voy a dejar 1 semana sin caminar—susurro en mi odio 

Joder como me pone

Fue dejando besos por mi cuello y alguna que otra marca. Mientras seguía dejando marcas me quito el sujetador y lo tiro por ahí. Luego bajo a mí pechos y lamió uno para luego meterlo a la boca mientras pellizcaba el otro con la mano.

Pequeños suspiros y gemidos salían de mi boca, y joder como para no hacerlo. Me iba a dar la noche de mi vida.

Siguió bajando dejando besos por mi abdomen y justo antes de que llegase a más cambié de posición. El abajo y yo arriba.

Me tocaba a mí. Fui dejando besos por su cuello para luego bajar y dejar besos por cada uno de sus cuadritos. Porque nadie me puede negar que el algo más aparte de para hacerse más fuerte.

Le quite el pantalón para luego ver tremenda erección que se podía ver.

Con las manos roce un poco su miembro por encima de la tela y pude ver cómo pequeños ronquidos y suspiros de placer soltaba.

Le quite la única tela que le quedaba y Diablo. Si que la tenía grande.

Sonreí victoriosa, este hombre era perfecto.

Lami mi mano y empezé a masturbarlo. Luego lami su punta haciendo que salga un pequeño gemido de el. Me encantaba verle, haciendo que quiera darle aún más placer. Así que con la boca fui poco a poco metiendo su miembro en mi boca haciéndolo desesperar un poco.

Así que el mismo me hizo una coleta improvisada y empujó un poco mi cabeza. Haciendo que tenga casi todo su falo en mi boca. Fui haciendo un vaivén mientras iba chupando con la lengua como si de una piruleta se tratase. Subí la mirada arriba, a sus ojos rubíes, viendo si estaba disfrutando tanto como yo.

Estuve un rato así hasta que de pronto empujó más mi cabeza metiendo todo en mi boca. Pequeñas lágrimas se asomaban en mis ojos para luego correrse. Yo gustosa acepte su líquido tragandomelo todo para luego mirarle con una sonrisa.

—Que buena perra eres—me sonrió—me toca

Ahora era yo quien estaba al borde de la cama. Me quito mis bragas y como si haya estado días sin comer atacó mi intimidad al segundo.

Un gemido salió de mi boca. Estaba con la lengua de arriba abajo, para luego buscar mi clítoris y jugar un poco con el. Metió su lengua dentro de mi entrada simulando embestidas. No podía parar de soltar gemidos y maldiciones. Era muy bueno en esto.