Capítulo 12

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¡Feliz cumpleaños, señor Gareth! Parte 2

Llega la hora de la cena y ya me encuentro lista, tuve mil crisis existenciales con la ropa, no tenía con que combinarlo o simplemente no me gustaba.

Catalina aprovecho que Nerea fue a comer con Becca para rebuscar entre sus cosas y conseguir algo para mí.

—Será una bruja pero tiene ropa linda —confiesa— Esta blusa queda con el pantalón que tienes puesto

Mi atuendo es en tonos pasteles, la blusa de Nerea es tipo corsé color palo rosa, el jean es claro y combina con unos tacones stiletto del mismo tono que la blusa

—No es muy formal ni tampoco muy informal, te queda precioso —asiente satisfecha —A todo esto ¿A dónde vas, Pris?

—Zander me invito a una cena que está organizando el equipo

—Hoy follan, nena —bromea Catalina

—No —río— es una especie de cita o algo así, no me quiero ilusionar demasiado

—Hugo fue una bestia conmigo y nunca me invito a ningún lado, Zander se ve decentito, parece buen chico

—Esperemos que si, un corazón roto no está en mis planes este año —le digo sincera

—No lo creo, nena, y si eso sucede avísame que entre todas lo golpeamos

—Lo tomaré en cuenta, además, Víctor también irá

—Si se te pega como una sanguijuela también házmelo saber —vuelvo a reír

Tocan la puerta, abro y me topo con Víctor

—¿Qué sucede? —pregunto

—No tengo una cita y en vista de que vas con el rubio con porte de muñequito estoy en busca de una pareja, permiso —me hace a un lado y se adentra a la habitación— Mmm...tu estas estudiando —señala a Olivia— Tú estás loca —señala a Sarah, su mirada se dirige a Catalina y sonríe coqueto— Cata

—No

—Por favor —suplica

Le envío un mensaje a Zander y en menos de un minuto me responde que ya está afuera, salgo y dejo a Catalina y Víctor discutiendo

—Que guapa —halaga

—Lo mismo digo —sonrío, Zander me ofrece su brazo, lo tomo y avanzamos con camino a la cafetería

—De antemano te aviso que mis compañeros son un poco bruscos al hablar, si te sientes incómoda dímelo y nos retiramos

No le respondo y me quedo quieta viendo la mesa en donde se encuentra Stephen.

Desde nuestra conversación no le he dado la cara, me ha escrito un par de veces pero lo estuve ignorando.

Joder, había olvidado que él también es parte del equipo

—¿Te sucede algo, Lila?

—Eh, no bueno si, no —me mira confundido— Olvídalo

Nos acercamos a la mesa, saludo educadamente a todos y tomo asiento al lado de Zander

—Cierto, ya conoces a Stephen —sí, es mi medio hermano— a Vincent y a Corzo

—Hola, Priscila —saluda Stephen, evito mirarlo a los ojos

—Stephen ¿Qué tal?

—Bien, desde que hablamos hace días ya no te vi más —contesta mandando indirectas

—Si, ya no hubo oportunidad

Agradecida con el de arriba por la interrupción, llegan Víctor y Catalina, como siempre el inoportuno toma siento a mi lado con una enorme sonrisa en la cara

Atrapados en la universidadOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz