MATCH Compatibilidad en el Amor..... Rubirena

Capítulo IV

Rubí, ingresa al  ascensor desde el lugar donde se está realizando la recepción de Macarena, desciende desde el piso 20 hasta el -1, en donde está el estacionamiento. 

Mientras conversa con Jacinta recibe una llamada, aprovecha la situación y decide irse a su casa, no tenía deseos de estar ahí, no se siente parte del grupo, se siente ajena, quizás es por su cargo, quizás es por su disposición, le cuesta separar sus responsabilidades laborales y sociales con ese grupo de personas. 

En general, no se motiva con reuniones sociales, ha tenido decepciones en la vida y siente que no merece la pena ni esforzarse. 

De todas formas, pese a su resistencia,  hay un pensamiento que no la deja tranquila, mientras baja el ascensor viene persistentemente a su mente la imagen de Macarena.

Le inquieta la forma que la trata Macarena, es muy distante, le desvía la mirada cuando ella quiere hacer algún contacto visual, tiene algo que la intriga, en ocasiones desde su oficina la observa interactuar con Carla, y tiene una forma particular de gesticular, de sonreír, ese pelo rizado por su cara, hay algo en ella que le llama la atención, y no logra decifrar en sí misma el motivo de este interés por ella. Se cuestiona y  no entiende el porqué cuando cruzan sus miradas Macarena cambia su expresión facial y la evade, no entiende el malestar que siente Macarena por ella. Se recrimina así misma por estos pensamientos, lucha contra ellos, cree que no deberían estar ahí,  ¿por que me importa el como me mira y lo piensa de mí?, no me debería importar, no quiero que me importe.

Las ultimas veces que fue a su oficina se percató de unos retratos, le llamaron la atención, eran hermosos, con rasgos muy bien definidos, pintados con lápices mina, enmarcados de forma muy cuidadosa. 

La primera vez los vió a la distancia, la segunda vez se acercó, pero con disimulo para que Macarena no notara su interés y vió el autor, le sorprendió mucho que en la rúbrica estuviese el nombre de Macarena Correa. A Rubí, le dificulta comprender como alguien tan distante, sarcástico, por momentos desagradable, pueda tener esa capacidad de poner trazos tan perfectos y bien delineados. Rubí no logra conectar a esas dos personas, para ella un artista en general, tiene su mundo emocional más desarrollado, son sensibles, humanos, en cambio, ella se muestra fría, distante, siempre a la defensiva, por momentos quisiera entenderla, preguntarle que le pasa, pero no, prefiere no hacerlo, ¿para que? piensa, si solo sería para que encontrarse con ese muro que la rechaza una y otra vez. La relación entre ellas se volvió una dinámica habitual, una costumbre, hablarse con indirectas, sarcasmos, con lejanía. Rubí se cuestiona, para que el esfuerzo de acercarse, cual sería el sentido,solo, solo  son compañeras de trabajo, nada mas, no es necesario conocer su mundo más interno, sus emociones, lo que siente, que le gustaría en la vida... 

Rubí entra en una confusión, una encrucijada mental, entiende racionalmente que le debería dar lo mismo, solo son colegas que no tienen ninguna cercanía, incluso ella la evita, pero por otro lado, algo en ella quiere conocerla, entender lo que siente, ingresar a su mundo personal, conocer su mundo interno . ¿para que quiero conocerla, por que?.

Rubi, se va conduciendo su automóvil, se pierde nuevamente en sus pensamientos y se sonríe por lo que le dijo Jacinta, ella la conoce más y cree que le gustó su regalo. 

Rubí se dá cuenta que se está sonriendo por Macarena y se recrimina así misma, que importancia tiene que le gusten o no le gusten los lápices, solo lo hiciste por cumplir, solo es para tener una relación más cordial con ella, para nada más... ¿pero quizás podría acercarme más? , se responde a ella misma, no Rubí, no,  nada más, así esta bien, olvídate.