🌕Almas Gemelas🌕

🌕Capítulo 18🌕

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🌕 Ucrania, Territorio de la manada~ 15:00 PM🌕
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Era como un sueño que siempre había deseado desde que tenía memoria, tener a sus padres juntos, conocer a su padre y vivir como familia, pero jamás se había puesto a pensar en todas las cosas que habían pasado ellos, que ahora mismo se había enterado.
Le contestaron todas sus dudas y Sarada les contó como itachi se había contactado con ella, diciéndole la verdad. Sabían que lo había hecho a propósito, que quería conseguir que se peleen o suceda algo, solo porque Sasuke había salvado a su madre de la guarida. Pero al final lo que había hecho era unirlos más, pensó mal en que Sasuke se iba a quedar quieto ante lo que hizo, se quería vengar, tenía que planear algo para su siguiente movimiento. Tratar de molestarlo, joderle por todo lo que había hecho. Eso lo hablaría con Naruto y con kakashi para hacer algo en contra del supremo. 

Mientras tanto, la manada no estaba para nada contenta por tener que soportar a una vampira en su territorio, querían asesinarla por tener sangre vampirica, por ser la esposa de itachi, del supremo que siempre había traído problemas, pero estaba a cuidado del alfa, que no dejaría que alguien la tocara o le haga daño. Así que no era una opción atacarla, pero iban a demostrar que la idea de que ella esté allí, no les gustaba en lo absoluto. Aunque algunos estaban considerando a Sakura como una mujer noble, que realmente era alguien buena y con compasión, que tenía fuertes sentimientos hacia su alfa, tanto así que daría la vida por él, por eso no pensaban que era una mala persona, encima que había ayudado al rescate de Mikoto, no les desagradaba la idea de que esté ahí, así que la aceptaban como la beta de su alfa, obviamente la manada estaba separada por las diferentes opiniones de cada uno, no podían tolerar otros pensamientos y eso los había separado a la mayoría. Los padres de Sasuke se habían pasado a la casa de su hijo para poder conocer más a su nieta y a la madre de Sarada. Sasuke los recibió y los dejó pasar.

- Ayer no fue el momento indicado para conocerlas, pero ya solucionamos las cosas. - Sasuke se disculpó por haberlos echado de su casa en la noche de ayer. -

- No te preocupes Sasuke. - Mikoto se adelantó, dejando a su esposo con su hijo. -

- Sasuke... La manada no está contenta en tener a Sakura aquí. - Le explicó Fugaku en voz baja a su hijo de lo que sentía la manada por la presencia de Sakura. -

- Hmp, será así de simple, la aceptan o simplemente me van a conocer enojado. Yo no voy a dejar a mi beta, si eso no lo entienden que formen una fila para que los vaya sacando de la manada. - Sasuke no iba a separarse de Sakura porque la manada quiera, era su beta y no tenía planeado cortar lo reciente que estaban creando, aparte de que ahora podía enfrentarse sin problema a cualquiera que trate algo contra él, tenía más energía que antes. -

Fugaku dejó que haga lo que quiera, pero quería avisarle sobre la situación de la manada, ya que él no había salido de su casa en todo el día por estar con Sarada y Sakura conversando, sin estar al pendiente de lo que sucedía con la manada. Sarada había oído la conversación que tuvieron por saber cómo manejar su sentido de audio, no sabía como sentirse al respecto de que no la aceptaban a su madre, pero se sintió feliz porque su padre no iba a separarse de ella aunque su manada se lo pida, podía ver qué realmente sentía cosas por su mamá. Cuándo entraron a la sala de estar, vieron a Sakura y mikoto hablando de cómo era sarada cuando era una bebé.

- Sarada solía ser una niña bastante tranquila, casi nunca lloraba sino era porque tenía hambre. - Sakura le contaba a la mamá de Sasuke cómo era su nieta cuando nació y ella la escuchaba atentamente, interesada en saber más. -

- Me hubiese encantado conocerla cuando era una bebé y a ti aquella noche después de escapar del laboratorio. - Mikoto suspira al pensar en todos los años perdidos. - Pero la criaste muy bien sola, de verdad felicidades porque hiciste a una niña hermosa. -