Capitulo 27

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Riveria corría tratando de alcanzar as Bell, era momento de sacarle toda la verdad.

¡Espera ahi mismo Bell!.-Le grito Riveria deteniendo los pasos de Bell.

Este mismo se detuvo pero no se giro a verla, en cambio le estaba dando la espalda.

Riveria se detuvo a 5 metros de Bell, con una mirada seria.

Me debes muchas explicaciones Bell.-Le exigió Riveria con voz demandante.

¿De que hablas Riveria?... yo no te debo nada.-Le contesto Bell con una voz profunda.

Riveria no se desanimo pero no pudo evitar fruncir el ceño.

Ella sabia perfectamente que sacarle la verdad a Bell no seria fácil.

Deberías irte Riveria, ahora somos enemigos.-Le dijo Bell empezando a caminar.

¡Eso no es cierto Bell!.-Le grito Riveria deteniendo a Bell.-No se piensas Bell, pero no somos enemigos, hagamos esto juntos.-Le dijo Riveria acercándose.

No hagas esto mas difícil Riveria.-Le dijo Bell cerrando los ojos.

Riveria lo ignoro y siguió acercándose hasta llegar donde estaba.

Con sus manos tomo la de Bell con suavidad, no queriendo perder su oportunidad.

Hablemos esto con calma Bell, ¿Si?.-Le pregunto Riveria dándole una sonrisa.

Bell miro en silencio a Riveria, ante de soltar una pregunta.

¿Ya lo sabes no?.-Le pregunto Bell congelando Riveria.

Al ver como se congelo, Bell separo la mano de Riveria y empezó a caminar.

Ahora sabes el tipo de persona que soy Riveira, ¿Qué harás ahora que lo sabes? Que tengo el alma manchado de sangre que no es mía.-Le pregunto Bell.

Riveria ante eso solo guardo silencio, después de todo aun le costaba asimilar ese tema.

Lo vez....-Le dijo Bell alejándose.

Pero un repentino jalón en su mano lo detuvo, sorprendido giro la mirada.

Era Riveria quien tenia agarrada su mano con fuerza.

Aun con todo eso te amare Bell, estoy enamorada de ti.-Le dijo Riveria mirando fijamente los ojos de Bell.

El corazón de Bell empezó a latir, sintiendo como se descongelaba.

Pero no duro mucho... los ojos de Bell se pusieron fríos como témpanos de hielo.

Es una pena que no sienta lo mismo por ti.-Le dijo Bell con desdén en su mirada.

Pero contra todo pensamiento de Bell, Riveria lo seguía mirando con una sonrisa.

Lose Bell, pude darme cuenta de eso.-Se sincero Riveria.

Desde el inicio solo fue Riveria la que mostraba amor, después de mirar la mirada vacía de Bell se dio cuenta.

¿Entonces porque sigues insistiendo Riveria?.-Le pregunto Bell con una mueca.

Ya te lo dije Bell, te amo.-Le volvió a decir Riveria.

El rostro de Bell adquirió una mueca extraña en el, causante de no saber que hacer.

Las cosas parecía estar calmándose entre Bell y Riveria, parecía que todo se arreglaría.

Parece que decidiste cargar todo tu solo Bell, déjame ayudarte. NO estas solo en esto.-Le dijo Riveria con una sonrisa.

El Guardián de RiveriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora