7. "Halloween I"

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Layla.

Que fue todo eso qué pasó hace días? ¿Por qué nos besamos? ¿Por qué le permití que lo hiciera? ¿Desde cuándo conocía a Bernie?

Tenía muchas dudas después de esa noche, Dash no parecía ser ese chico frio y distante que conocía hace mucho tiempo, fue tan diferente. La manera en la que me miraba, la forma en la que movía sus labios y sus manos, verlo desde una perspectiva diferente a la habitual había despertado en mi cosas que jamás pensé sentir por él.

¿Qué tenía Dash Berlot? No comprendía que era eso que lo hacía especial y diferente ante mis ojos, más allá de su radiante aspecto físico había algo más. Tal vez después de todo era que solo no lo conocía pero, sus palabras me llevaron a un plano distinto y plantaron aún más dudas acerca de quién era él.

»Eres mi salvación, Layla.

¿Su salvación de qué? ¿Cómo podía ayudarlo sin saber que le pasaba? De cualquier manera no iba a conseguir las respuestas si me quedaba tranquila y dejaba que mi orgullo no me permitiera mirarlo de nuevo a la cara.

Tomé mi celular y coloqué la cámara frontal para tomarme una foto, hace un tiempo que no lo hacía y mi vestimenta me alentaba a hacerlo, cabe destacar que mi autoestima no era un problema con respecto a la cámara.

Observé el collar que me había dado esa noche, recuerdo que me dijo que era un péndulo de cuarzo blanco, servía para atraer buenas energías y repeler negativas, me dijo que sentía
que debía tenerlo, quiso darme un regalo y lo hizo sin tener ningún motivo para hacerlo. Y era muy hermoso, el corte de la gema y la forma en la que estaba hecho el collar era algo que jamás había visto en las joyerías de Skyville. Lo adoré al instante aun sabiendo que venía de ese chico, mi vecino, el cual no conocía en lo absoluto, qué tal vez podía ser un asesino en serie con una mente maestra que le dejaba usar sus encantos para atraer a sus víctimas; pero lo hice, conservé su presente y me encantaba.

Cuando papá lo noto me preguntó acerca de donde lo había sacado o quien me lo había regalado, no quise decirle que Dash lo había hecho, conociéndolo me diría que estaba intentando conquistarme o que solo tenía malas intenciones conmigo y, probablemente lo hubiera invitado a casa e interrogado buscando alguna respuesta a sus preguntas de padre sobreprotector.

La blusa roja que traía puesta había sido un regalo que mi madre me había hecho en mi cumpleaños tiempo antes de perecer, el rojo no era un color que me gustase usar mucho y en ese tiempo me quedaba grande, pero después de tanto tiempo por fin ya la podía usar, unos jeans ajustados de color azul y calzaba unas zapatillas del mismo color de la blusa. El péndulo colgando de mi cuello se robaba toda mi atención.

Saldría a verme con Brandon y Anna, nos encontraríamos en Heaven's para ayudar a Anna con los preparativos finales de la fiesta de Halloween que se llevaría a cabo en la noche.

Mi celular sonó luego de haberme tomado algunas fotos, era Bernie.

Bernie:

—Hola, Layla.
— ¿Cómo estás?
— ¿Te gustaría que comiéramos algo en Heaven's?

El chico que me besó esa noche en esa fiesta, tan dulce y tan suave, con delicadeza y ternura había estado intentando acercarse a mí, quería enlazar una amistad y yo no tenía razón para negarme, después de todo lo que me dijo no podía dejarlo solo.

Layla:

— ¡Sería increíble!
—Estaré con Brandon y Anna, puedes llegar y estar con nosotros.

Bernie:

—Nos vemos allá, Lay.

Salí de casa y estando en la acera volteé para mirar hacia la casa Berlot, no había rastro de él ni de sus padres y proseguí a caminar hacia Heaven's.

ANGEL BABY.Onde histórias criam vida. Descubra agora