Ocean & Wind【XiaoxLectora】

Capítulo 23

¡He vuelto gente! :D

Diría que volví con más energía que nunca, pero no, sigo sin poder dormir como es debido...

Creo que no volveré a ausentarme por tanto, o al menos si lo hago revisaré las notificaciones, el volver a Wattpad después de como dos meses y encontrar más de 800 notificaciones es...bueno, creo que me entienden. Será un proceso un tanto tedioso...

Capítulo 23: Regreso a la posada

Narra la narradora

Sin duda nadie que conociera a Xiao se habría esperado que algún día podría llegar a enamorarse, mucho menos de una mortal. Zhongli, quien era la persona que se podría decir era la más cercana a él, pudo notar de inmediato que algo había de diferente en él. Sobre todo cuando estaba contigo, y fue esa la pista clave para que el arconte se diera cuenta de lo que estaba pasando. El momento en el que lo descubrió, no pudo evitar sentirse como un padre orgulloso de su hijo. 

Y con razón, hay algunas personas que dicen que el enamorarse puede llegar a cambiar a las personas. Esto podría ser exactamente lo que le estaba pasando a él, era algo completamente nuevo para este, por ello se comportaba así. Ahora mismo estaba sentado sobre el tejado de la Posada Wangshu, presenciando un hermoso atardecer, después de una largo día de exterminación de monstros. Se pudo dar estos momentos libres para pensar sobre todo lo que había ocurrido durante los últimos meses.

Aún con los consejos de la propia Verr Goldet, y Kazuha, quién era el que mejor conocía a T/N. Este seguía teniendo sus dudas. Y no había que culparlo por eso, ya que se trata de un adeptus del que estamos hablando, y, sorprendentemente, tenia miedo, miedo de que su karma acabara haciéndote daño, o peor. Y aunque eso no pase, eso no quitaba el hecho de que tuviera un tiempo de vida bastante corto, al menos eso comparado al tiempo que los inmortales como el vivían. Tomando cosas como estas en cuenta, ¿Era siquiera una buena idea esto de confesarse?

Sacudió la cabeza para dejar de pensar en ello. Lo mejor sería preguntarle al propio Zhongli, aprovechando que estaba aquí, pensó. Seguramente él tendría la respuesta a sus dudas. 

Desde que él llego a la posada hace apenas un par de días, se habían tomado el tiempo de charlar sobre bastantes cosas, entre ellas sobre a lo que se dedicaba ahora el hombre de cabello castaño, y se sorprendió bastante de que acabara siendo empleado de Hu tao.

 Pero dejando ese tema de lado, jamás habían hablado sobre esto, y él volvería al Puerto de Liyue dentro de poco, más específicamente mañana por la mañana. Así que era ideal que fuera a hablarle justo ahora.

Se levantó de dónde estaba, e hizo desaparecer su lanza, la cual se encontraba al lado suyo. Para entonces dirigirse hacia donde estaba Zhongli. Al cual no tardó en encontrar, tomando bastante relajado un taza de té en la zona inferior de la posada.  En cuanto ubicó donde estaba, fue inmediatamente a su dirección, ignorando nuevamente las diversas miradas sorprendidas de algunas personas que pasaban por ahí, reconociendo quien era, sin embargo, y para su suerte, no dijeron nada al respecto. Ya había hecho esto un par de veces en el pasado, y no es que haya acostumbrado a la gente para nada, así que agradecía eso.