la hija de un narco [TERMINADA]

capítulo 26

  T/N.  

Me desperté cuando no sentí a mi hermano tomado al lado, mire por la habitación y lo vi terminando de ajustarse el cinturón

—Venga T/N,tienes que ir a clase—

—No quiero— le contesté escondiendo mi cabeza entre las sábanas —¿Y Devan?—

—Ha ido a por el desayuno, vamos T/N levanta el culo de la cama—

—Agh está bien—

Me levanté con un resoplido y me metí al baño me acomode un poco el cabello y me duche cuando salí ya lista ya estaba Devan con los cafés y los bollos que había comprado para desayunar.

Cogí uno y desayuné tranquilamente hasta que vi la hora y acelere

—Cuidado que te atragantas—

—Yo ya me voy—

Con prisa busque mis cosas y le di un beso a mi hermano en la mejilla

—Te quiero— le dije mirándole

—Ala y a mi no— escuché decir a Devan

—Tambien te quiero—  reí un poco y me fui rápidamente a la universidad.

Al llegar a esta estaba algo nerviosa, cuando estaba cerca de la entrada vi a Jean en las escaleras esperándome impacientemente y cuando me vio levanté la mano dudosamente para saludarlo.

El corrió escalera abajo y a paso rápido llegó en pocos segundos a donde estaba yo.

Me abrazó y levantó del suelo apretándome fuerte contra él.

—No sabes lo mal que lo he pasado T/N— dijo después de bajarme.

Me agarró la cara y estampó sus labios contra los míos en un beso lleno de necesidad y desesperación, yo me acerqué más a él puse las manos al rededor de su cuello y profundice más el beso.

De alguna manera eso me daba paz y tranquilidad

—Necesito que me lo expliques— dijo Jean a pocos centímetros de mis labios

—Si, lo haré—

—¿Y si no entramos a clase y vamos a mi depa y me lo explicas todo?—

Lo mire dudando si aceptar su petición pero termine diciendo que si, tampoco me apetecía dar clase ahora mismo

Me agarró de la mano y caminamos fuera de la universidad hasta llegar a su departamento.

Abrió la  puerta para entrar y la cerro tras él.

Me giré a mirarlo y el me dio un beso tierno, cuando se separó de mi no pude evitar contener las lágrimas y rompí a llorar delante suyo.

Él me volvió a besar y me secó las lágrimas

—No llores cielo— dijo suavemente en un susurro

Caminamos hasta el salón y nos sentamos en el sofá, le conté todo detalladamente con la voz algo entrecortada y cuando termine vi en sus ojos que sentía culpa por lo que estaba pasando.
Le agarre la mano y me miro

—Pero no pasa nada, mi hermano, Devan y yo vamos a poder salir adelante juntos. De momento tenemos algo de dinero y pronto encontrarán algún trabajo—

—Esta bien amor pero... Si necesitáis algo no dudes en decírmelo y haré hasta lo imposible para ayudaros—

—Es que... Esto es mi culpa me siento tan mal, le he jodido la vida a mi hermano y...— no me dejó acabar y me besó

—No te preocupes cielo, a sido por vuestro bien y no es tu culpa—

Me senté en sus piernas y lo bese como nunca lo había hecho

—Te necesito—

Pronuncie en un susurro al despegarme de el unos centímetros.

Me volvió a besar y me levanto llevándome a la habitación.

Cerró la puerta con un empujón con el pie y me soltó en la cama.

Me saco el pantalón que llevaba y mi ropa interior abrió mis piernas dejándome expuesta ante su mirada y metió su cara entre ellas lamiendo me.

Empecé a jadear sintiendo su lengua recorrer toda mi parte íntima hasta que no pude aguantar más. Sentí un calor y una presión muy grande en la parte inferior de mi vientre haciendo que agarre fuertemente de las sábanas de su cama y arqueando la espalda de la excitación termino dándome un orgasmos.

Paso la lengua por toda la superficie llevándose consigo lo que había expulsado y metió dos de sus dedos en mi haciendo movimientos lentos, se levantó hasta llegar a mi altura y me besó, empezó a meter y a sacar los dedos rápido y le atrape el labio inferior tirando de el.

Luego saco los dedos mojados de mi interior y los lamió.

Abrió mi top con botones dejando mi pecho al aire y empezó a devorar mis pezones mientras apretaba con la mano el que estaba libre , los lamió y mordió tanto que quedaron rojos y sensibles.

Se separó para quitarse la ropa y saco del cajón un condón.

Observé cómo se lo ponía y luego tiro de mis piernas para dejar mi cadera al borde de la cama.

Se posicionó entre mis piernas y sentí su erección en mi parte íntima .

Me miro y yo mordí involuntariamente mi labio inferior , vi como sus ojos se oscurecieron después de mi acción y entro en mi sin previo aviso haciendo que suelte un gemido en voz alta.

—No nos va a escuchar nadie, quiero oírte gritar mi nombre cielo—

Dijo para luego profundizar en mi, lo mire y me humededecí los labios, volvió a repetir lo anterior y yo cerré los ojos fuertemente, lo repitió más veces acelerando los movimientos y cada vez profundizando más y empecé a soltar gemidos cada vez que se metí dentro de mi gemía su Nombre repetidas veces y sentía como se ponía cada vez más dura dentro mío. Se agachó a besarme jadeando y empezó a envestirme más rápido que antes y en poco tiempo termine corriéndome con el aún dentro y por su expresión supe el el también lo había hecho.

Se cayó rendido en mi pecho y con la respiración igual de agitada que la mía, le acaricie el cabello y le di un beso en la frente

—Te... Amo— dije agotada intentando calmar mi respiración y pulsaciones

—Yo más—

Se levantó de encima mío se quitó el condón, le hizo un nudo y lo tiro a un lado de la habitación, me agarró y nos tumbamos abrazados en la cama yo encima de su pecho escuchando su corazón agitado que poco a poco volvía a la normalidad