Capítulo 37

1K 115 47
                                    

Mientras tanto...

Volviendo unas horas atrás, regresando al amanecer de ese día, la princesa  _____________ había logrado llegar al lugar que aquellas chicas le habían indicado.
Era una gran casa, estaba algo alejada de un pequeño pueblito.
Bajo de su corcel para acercarse a la puerta algo desconfiada, estaba agotada por haber galopado toda la noche.
Sus ojos tenían ojeras y estaban algo hinchados por la falta de sueño y las lágrimas que había derramado.
Toco la puerta, también temblaba levemente, había hecho bastante frío por la noche y mientras más se alejaba de Corona, más podía sentirlo.
La puerta se abrió lentamente dejando ver a una mujer ya mayor que al notar la presencia de la joven la miro confundida y preocupada.

-Señorita.. ¿esta usted bien? ¿puedo ayudarle en algo?- pregunto acercándose a ella

-N-necesito asilo... me... me dijeron que aquí podría encontrarlo... y... le pagaré por supuesto- respondió con un tono de súplica en su voz

Estaba cansada y solo quería dormir un rato y olvidar su última noche en Corona. La mujer cambio su mirada a una de compasión y comprensión, la sujeto del brazo con suavidad para hacerla entrar, dandose cuenta que estaba helada, necesitaba entrar en calor.

-¡Valentín!- llamo la mujer a alguien, ___________ miro con curiosidad como un pequeño de entre 6 o 7 años llegaba corriendo ante ese llamado

-¿Qué paso nana?- pregunto el menor al estar delante de ellas, miraba con curiosidad a la chica

-Lleva a la joven a la chimenea mientras yo llevo su corcel al establo- pidió con una sonrisa -Ya vuelvo señorita-

Soltó a la joven para salir del lugar y hacer lo que había mencionado. Mientras tanto el niño miro con una sonrisa a la chica, quien noto como dos de sus dientes de leche ya se le habían caído. Sonrió enternecida y se puso de cunclillas para estar a su nivel.

-Hola... ¿Tú nombre es Valentín, cierto?- pregunto

- Si!- respondió alegre -¿Usted como se llama?- pregunto curioso

-Soy ___________, un gusto conocerte- le extendió su mano para saludarlo formalmente

El niño primero miro confundido ese gesto pero después pareció entenderlo y estrecho la mano de la joven con entusiasmo pero luego la miro preocupado

-¡Esta muy fría! ¡Vamos rápido! ¡Necesita entrar en calor!- menciono preocupado sin soltar su mano

Ella rió levemente y se puso de pie de nuevo para seguir al menor, quien lucia muy angustiado, era muy tierno. Llegaron a una habitación donde al fondo había una gran chimenea, la chica se sento a un lado de esta soltando un suspiro, se sentía tan bien y relajante sentir el calor después de una larga y fría noche.

-¡Iré por mantas! ¡Y un chocolate caliente!- menciono aún preocupado el niño, sin dejarle tiempo de responder salió corriendo en busca de eso

La chica solo rió leve, le daba bastante ternura, se quedó sentada sintiendo el agradable calor producido por la llamarada de la chimenea. Pero comenzó a sentir como si la estuvieran observando, confundida y algo alerta miro hacía todos lados notando sorprendida como varios pares de ojos la miraban escondidos en varios lugares de la habitación.

-Ah... ¿hola?- saludó tímidamente -Soy... __________, un gusto-

Quizá la capa que llevaba puesta les generaba desconfianza así que se la quito dejandola a un lado, y así pudieran verla bien. Miro sorprendida como de sus escondites salían varios niños de entre 10 y 2 años, la miraban con curiosidad.

-¿Es una princesa?- preguntó curiosa una niña a otro niño

-¡Quizá es un hada!- mencionó otro niño emocionado

Contrato de amor (Varian X Tu)Where stories live. Discover now