~ 𝑻𝒓𝒆𝒊𝒏𝒕𝒂 𝒚 𝒔𝒊𝒆𝒕𝒆 ~

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Perdón por el numerito... sobre todo por lo último... no quiero presionarte a nada que no quieras. Solo quiero saber qué piensas y el otro día, cuando hablamos del futuro... no sé... parece que aún tienes que pensar en muchas cosas como para perder el tiempo en amores y cosas así... perdóname Shuji, en serio.

Escribí el mensaje y lo releí varias veces. Me quedé dudando si darle a enviar o no.

Va, venga, quien no arriesga no gana. Pulsé el botón de enviar

Me quedé mirando el móvil y empecé a morderme las uñas. Tenía la pierna que parecía que iba a salir a andar ella sola, pues no paraba de temblarme con el pie apoyado en el suelo. Al poco vibró el móvil. Se me tensaron los músculos y sudores fríos me llenaron las palmas de las manos. 

Por favor que no sea nada malo, por favor... 

Cogí otro cigarro por si acaso y lo encendí antes de leer el mensaje. El móvil vibró de nuevo.

Shuji, recibido el 7 de marzo a las 2:05

Shhh, no me hables, interrumpes mi profunda meditación.

Oye, has llegado bien a casa?

Mira que es tonto. Me calmé un poco. Parecía que me estaba preocupando demasiado otra vez.

Le di una calada al cigarro que tenía en la mano mientras me secaba las lágrimas que quedaban en mi cara. Intenté no llorar más, aunque las gotas seguían saliendo de mis ojos, pero esta vez con una sonrisa... 

 —¿De verdad vas a pensarlo? —musité.

¿Y qué quiero yo? La verdad, a largo plazo no lo sabía, pues nadie sabe qué es lo que nos depara el destino a cada uno de nosotros, sin embargo... No me parecía mala idea la de tenerle a mi lado; nos divertíamos, estaba claro que éramos tal para cual, ambos estábamos solos en el mundo, al menos en lo que a familia se refiere. 

Ya no me imaginaba los días sin esas visitas inesperadas y sin ver esa cara burlona que parece estar retándote a desafiarle cada dos por tres, las caricias, los besos... hasta cuando se burlaba de mí...

Sonreí para mis adentros. Acababa de darme cuenta de mis sentimientos.

Al final el que parecía no tenerlo claro era él, así que el próximo día le diría cómo me sentía... y si él decidía no seguir con esto lo entendería.

Al menos así habría sido antes de que llegase a enamorarme del todo. Aunque ya lo tenía claro... me había enamorado de él. Quizá lo haya estado desde el principio y lo había estado negando constantemente, por cabezota.

Noté que el móvil vibró otra vez.

Shuji, recibido el 7 de marzo a las 2:30

¿Me vas a contestar o voy a tener que ir a tu casa a ver si estás bien?

Se me había pasado contestarle antes,

Tú, enviado el 7 de marzo a las 2:32

Perdona, no aún no estoy en casa, me he parado un momento en un parque, pero ya voy a casa, te aviso cuando llegue

Shuji, recibido el 7 de marzo a las 2:33

¿Qué estás sola por ahí? Vete a casa. Ya es tarde para que estés por ahí sola.

Me levanté del banco y arranqué de nuevo la moto. Llegué a casa en menos de diez minutos. Me tiré directamente en la cama.

Tú, enviado el 7 de marzo a las 2:45

𝐇𝐄𝐀𝐕𝐄𝐍𝐒 || 𝐇𝐀𝐍𝐌𝐀 𝐒𝐇𝐔𝐉𝐈Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang